Emergencia en el Suelo de Expedición
El rugir del hechizo incinerador de un reactor y el fuerte sonido de los propulsores zumbaron
en el suelo. El aire, perturbado por las hojas rotantes, golpeaba salvajemente.
Enterrados en una capa de nubes en forma de una gruesa niebla, más allá de las
arenosas planicies, una aeronave revoloteaba.
Las cajas de
madera fueron arrojadas por propósitos de investigación para llegar a la
superficie sin problema. Por jalarlas de nuevo con lazos y revisar las
lecturas, la tripulación no descubrió anormalidades. En otras palabras, el área
directamente debajo de ellos no entró en contacto con el Shiantor, el cual
instantáneamente reducía a cualquier ser que se arrastrara por la arena.
[Sin pistas en
ningún lugar… a este paso, no podemos controlar el rumor que el Shiantor de
pronto colapsó y murió.] Un joven Borgle lo murmuró mientras rascaba su calva
cabeza. [En realidad, espero que ese rumor sea cierto. Para estar vivo y andar
por ahí, no sobremos cuando pueda dar un golpe otra vez.]
[Hehe. Superar
el miedo y ansiedad con una razón y tecnología significa ser una forma de vida
inteligente.] Un Gremian lo dijo, moviendo sus dedos. La hombrera de su
uniforme militar mostraba la insignia del rango de un Primer Técnico.
[Colocamos una caja de pólvora en un área amplia rodeándonos. Están
especialmente ordenados, diseñados para producir un gran sonido al daño que no
es nada más que un simple impacto. Ese es el poder de desintegración que el
Shiantor o como fuera, es activado, ¿cierto? Y si esa cosa aparece,
definitivamente se asentara en una de nuestras cajas. Todo lo que tenemos que
hacer es dejar de movernos si escuchamos un ruido.]
[Eso suena
conveniente, pero ¿qué si el enemigo se arrastra debajo de nosotros?]
El Gremian,
quien inflo su pecho en orgullo, dudo. [¿…Esa Bestia excavo un túnel debajo de
nosotros?]
[Bueno, no lo
sé, pero cuando venga, no me sorprenderán si así pudiera. El Shiantor está
envuelto en misterio.]
[T-Tampoco
podemos estar preparados para eso. La tecnología existe para responder a los
problemas los cuales podemos comprender concretamente.]
[Si lo dices
así, está bien conmigo.] La aeronave lentamente empezó a descender. Poniéndose
sus lentes, el Borgle vio a las planicies cenicientas esparcidas abajo. [Los
problemas no solo vienen y se presentan por sí solos a nosotros. Si la
situación nos toma con la guardia baja, el que esté en pánico serás tú.]
[Ah…] El
Gremian probablemente quería decir algo en retorno, pero solo hace unos meses,
él había sido atrapado con la guardia baja por la situación y se mostró un lado
vergonzoso de él. Reflejándose en esa experiencia, él se cayó.
[De todas
formas, no bajes la guardia. No te diré que te prepares para un posible
resultado, pero al menos alístate para actuar.]
[…Haré todo lo
que pueda.] El Gremian lo murmuro amargamente.
Viendo como
avanzaba, El Borgle, Grick Graycrack, pensó.
Hasta ahora,
este primer técnico no era el tipo de persona que atendiera a las palabras de
otros. Ahora, Grick pudo ver la resistencia en él, pero las palabras de Grick
parecían ir a un oído y quedarse allí, en lugar de salir por el otro. Juzgando
el hecho que el Gremian aceptó el papel de comandante de esta expedición, Grick
supuso que los eventos de ese día debieron haber sido un profundo aprendizaje
de experiencia para él.
Ese día,
cuando un gran nido de Teimerre atacó y estuvo cerca de hundir el
Plantaginesta, se perdió mucho. Muchas vidas perdidas, muchos heridos, y, más
que nada, luego de ver a las chicas pelear, perdieron el precioso valor del
conocimiento como la ignorancia.
Todo ese
tiempo, fueron protegidos. Sus días de paz fueron pagados con la sangre de esas
hadas. Vivieron pasando por los cuerpos de esas chicas que murieron en docenas
sin pensarlo un segundo. Una combinación de culpa e impotencia se hundió dentro
de sus estómagos. Una vez lo supieran, nunca volvería a ser ignorantes.
Grick ahora
comprendía bien por qué la Guardia Alada mantuvo a las Leprechauns y Armas
Excavadoras en secreto. La fiebre que se llevaba esas emociones, es la mejor.
Incluso él, como alguien siendo protegido, sentía eso. Ni siquiera podía
imaginarse lo que Willem, ese Emnetwyte sin poder quien deseaba proteger a esas
chicas, sintió.
[…Eso es
extraño.] Unas anormalidades llegaron a la vista de Grick mientras veía a la
superficie de abajo.
[¿Q-Qué es
esto? ¿Una Bestia?]
[No.] Grick
sacudió su cabeza. No había trazos de una Bestia. De hecho, parece lo opuesto:
pequeñas piedras apiladas en un círculo, leña quemada, y cajas de madera
esparcidas yacían en las sombras de una peña. [Es lo que queda de un
campamento.] Preservándose bien en las ventosas planicies que no era muy
viejas. [Parece como que alguien olfateo al Shiantor, desapareció y se fue antes
que nosotros. No sé qué Salvadores pudieron haber sido, pero debieron tener un
buen sentido del olfato.]
[¿Qué?] El
Gremain tensó sus pequeños ojos. Su visión no era tan efectiva en las
distancias lejanas como los Borgles. [No crees que ellos se metieron en algo,
¿verdad?]
[Me lo
pregunto.] Grick saco un par de binoculares que colgaban de su cuello y los
tomó. El Gremian se los arrebato sin decir una palabra de agradecimiento y
vieron abajo, casi recostados por fuera de la ventana.
[Las Ruinas
K96 MAL. Rastros de los Emnetwyte bien preservados son muy raros, y algo muy
bueno para los Salvadores… pero…] Grick cruzo sus brazos y frunció sus cejas—o
más bien solo arrugo su frente como no tenía cejas. [Llegar a una oportunidad
así de rápido solo después de escuchar que una Bestia desapareció… se me es
algo extraño.]
[¿Estás
diciendo que los recursos no fueron bien?]
[No, no es
eso… bueno, en realidad…] Grick empezó a rechazarlo, pero, pensándolo, se dio
cuenta que él Gremian tenía razón.
Para los
Salvadores, el solo descender al suelo en sí era una gran apuesta. Cruzar la
barrera desplegada en Regul Aire es un poco costoso. El combustible y comida
necesaria para un viaje de vuelta tampoco salía barato. Si contrataban a
alguien exterior a su grupo, necesitarían tratar con el posible riesgo. Algunos
contratos requerían que los Salvadores entregaran dinero en un oficio especial
preparado para pagarle a la familia del que fallecía en caso que algo pasara.
Claro, incluso
después de desembolsar una gran cantidad de efectivo para bajar, las ganancias no
eran garantizadas. No se sabía qué se encontraría—ese era el romance el cual
los Salvadores veían, pero también era la dura realidad al mismo tiempo.
Algunos viajes rendían espectaculares tesoros, y los otros no rendían nada en
valor. Sin mucho que decir, las estadísticas favorecían al último.
Y debido a
todo eso, todos los Salvadores, incluyendo a Grick, tenían personalidades
peculiares. Podía encontrarse algo bueno… quizás. Algo bueno podía ocurrir…
quizás. Incluso cuando se enfrentaba con tal información incierta, ellos
entusiastamente sintieron la necesidad de bajar y revisarlo por sí mismos.
Cualquiera que se llamara un Salvador tenía un mal hábito, pero…
[Se movieron
rápido. El hecho que bajaron antes que nosotros significa que estuvieron
observando esta área incluso más que los chicos de la Guardia Alada.] Grick lo
dijo.
[¿Hm?] El
Gremian no parecía entenderlo.
[Debió costar
una muy buena cantidad. En este negocio, cuando no tienes la idea de lo que
encontraras, tener los recursos tan de la nada es algo fuera de lo común.]
[¿Hmmm?]
[En primer
lugar, venir aquí luego que la Bestia desapareciera es tan extraño en sí solo.
Es un gran riesgo y sin regreso. Todo lo que lograron fue vencer a otros Salvadores…
ah, lo veo. Incurrieron en todos esos riesgos y costos precisamente porque se
movieron primero. En otras palabras, creyeron que podían recuperar sus
pérdidas…]
[¿Hmmmm?] La
pequeña palma del Gremian le dio un fuerte golpe a la espalda del Borgle.
El impacto
llevo al frente a Grick, casi sacándolo por fuera de la ventana. [¿¡Ow!?]
[Me dejas
atrás y te metes a tu pequeño mundo. Como sea, olvídate de esto. ¿Listo?]
[¿…Listo?]
[Claro que
para descender. No podemos quedarnos aquí y ver por siempre. Volamos por todo
el camino para regresar aquí.]
Ah, es cierto,
Grick lo recordó. Las Ruinas K96 MAL. Un lugar donde muchos Emnetwyte una vez
vivieron, ahora no era nada más que una ciudad fantasma. Tenemos cosas aquí.
[Oh, supongo
que es mejor que revisemos antes de hacerlo. ¿Qué piensa, consejero? ¿Usted
piensa que está bien que bajemos?] El Gremian pregunto.
[Nn… a-ah. Eso
parece. No le veo algún problema ahora.]
[Entiendo.
¡Díganle al encargado de sistemas: retracte el segundo y sexto control de alas
y prepárense para descender! ¡Apaguen el hechizo de reactor ahora, pero déjenlo
listo para la reactivación en cualquier momento!] Gritando a gran voz por las
pipas de transmisión, el pequeño Gremian se apresuró a bajar por el corredor.
Sintiéndose
más bien incómodo por qué le pidieran consejo, Grick se mantuvo en sí. Bajo la
mirada al suelo.
[¿…huh?]
Él vio un
punto rojo. El tensar sus ojos no ayudo de mucho, por lo que se puso su par de
binoculares en sus ojos. Ahora podía ver claramente: era una chica con una gran
pieza roja envuelta en todo su cuerpo.
[¿……huh?]
Grick inclino
su cabeza en confusión. Se quitó sus binoculares, los chequeó para asegurarse
que no estuviesen rotos, luego vio otra vez a la chica que caminaba cruzando la
tierra.
[¿¡¿¡……L-La
chica del cabello gris!?!?]
kutori nota seniolis!!! encontraron a Ren o si que jueliz toy gracias por la traducción muchas pero reketemuchas gracias!
ResponderEliminarGracias papa ta me hacía falta mi droga y encontraron a nephren :)
ResponderEliminarRen querrá irse sin Willem?
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