Episodio 5: Espada Carmesí
El camino, el cual era exuberante con verdor,
había cambiado a uno cascajo y de grandes constelaciones de piedra. Con cada
paso, el dolo estaba en sus piernas. Si él trataba de evitar las grandes
piedras, él se cansaría innecesariamente. Hiro pensó que él sentiría dolor
mañana por seguro.
「Hiro, ¿estás bien? Puedo llevarte en mi
espalda si estás cansado.」
「No, no puede ser posible que una chica me
cargue… también soy un chico, sabes.」
Con un
sentimiento de gratitud hacia ella, Hiro mantuvo sus ojos en la cima. Aunque se
sentía cerca, aún estaba lejos. Pero él podía decir que se estaba moviendo
hacia un cambio de escenario. Además, Liz pedía descansos cortos en intervalos.
Estoy seguro que es por mí causa.
Porque nadie más expresaba su fatiga en su
rostro tanto como Hiro. Él sabía que era un obstáculo, pero él no podía
permitirse quejarse. Los soldados tampoco se quejaban acerca de Hiro como
obstáculo.
Con cada descanso, decían cosas como, 「Tienes agallas.」o「Solo
aguanta un poco más.」
Hiro fue conmovido por la buena naturaleza de
los soldados.
「Esta parte es dura. Hay muchos delante, así
que deberías quedarte cerca de mí.」
「¿Son más como monstruos guiñando el ojo
cuando van mostrándose? 」
「Sí. O realidad grupo de Ogles.」
「¿Es en serio…?
」
「Soy serio…」
Y mientras Liz hacía mímicas a Hiro, un gran
grupo de rocas venían tambaleando en frente de ella.
「¡Se esconden en las sombras de las peñas! 」
Mientras
Tris lo decía, los soldados se movían con rapidez. Hiro no se movió al
instante, pero Liz sostuvo su mano y no mostro un signo de movimiento. El suelo
se sacudió violentamente, y fue difícil mantenerse empinado. Una de las rocas
chocó con la peña. Tris estaba escondido detrás y lo destrozo con un bang. El enjambré
de rocas cayó más allá como estrellas disparadas.
Una gran roca fluyó y se aproximó a Hiro
chocando contra él. Hiro cerró sus ojos mientras pensaba que estaba acabado.
Pero no importa cuánto tiempo pasará, él no sentía dolor. Hiro tímidamente
abrió sus ojos, y vio ante él, que la gran roca fue dividida en dos y empezó a
fundirse.
「Eh, ¿qué es esto…? 」
Hiro lo miró, notablemente confundido. Pero
no era una roca. Usando las rocas fundidas como un punto de apoyo, ella lo
mando a volar arriba con un pesado golpe. Mientras que una gran sombra envolvió
a Hiro y a los otros, eso es lo que pasó. De pronto, la orca estaba engullida
por flamas y explotó. El grupo de fragmentos evitaron a Hiro y se dispersaron
cerca de ellos.
En tanto Hiro se quedó asombrado, Liz le
llamó a él.
「¡Hiro!
¡No te muevas de ese lugar!」
Mientras él miraba en su dirección, Liz fue
corriendo hacia el grupo de rocas. Los soldados se escondieron en las sombras
que parecían calmadas. Cerberus bostezo cerca de Hiro.
¡BOOM!
El sonido de una explosión sacudió lis
tímpanos de un pasmado Hiro. En su periférico, Liz sacudió el suelo, y la se
afinco en frente de una roca.
¡BOOM!
Otra roca explotó. Los fragmentos fundidos en
el aire, y combinándose en el suelo con un sonido zwoop. Hiro finalmente se dio
cuenta que Liz sostenía algo en su mano.
「Oh, ¿está es tu primera vez viendo eso, chico? 」
Un soldado lo dijo mientras palmeaba el
hombro de Hiro. Hiro replicó mientras mantenía la mirada.
「Eh, ¿qué significa eso? 」
「Te refieres a la Espada Espiritual,
Laevateinn.」
Escuchando
las palabras del soldado, su corazón se golpeó duro.
「Ah, sí… creo que esta es mi primera vez.」
Él
sostuvo su pecho mientras se quedó viendo a la chica danzando. Ella sostenía
una espada carmesí en su mano. Una clara, espada carmesí, tan bella como una
paloma de sangre rubí.
La dorada empuñadura brillaba con el sol
bañándolo. Ella corto la última roca para aclararlo, y después termino su
eliminación, ella miro hacia Hiro y le saludo con su mano. Toda su cara estaba
con una encantadora sonrisa, y su reluciente cabello rojo ondeaba en el viento.
Hiro no pudo apartar sus ojos de ella
mientras ella caminaba con la espada Laevateinn puntuando en el suelo. Era una
imagen que no perdería en belleza con cualquier pintura. Otra vez, su pecho
latió rápido. Hiro tomo su pecho y exhalo intensamente.
「¿Qué está…? Qué…」
Su corazón empezó a latir, y él podía decir
que algo dentro fue rasgado. Pero una lejana moza le miraba y le pregunto, 「
¿Estás bien?」, su conciencia fue recobrada.
「¿¡Huh?!」
「¡¿Hyah?!」
Él dejó salir un extraño llanto en lo que
estaba sorprendido, pero eso también sorprendió a Liz y sus ojos se agrandaron.
「L-Lo siento. ¡Estabas siendo genial! ¡Eso es
todo!」
Hiro lo dijo, mientras saludaba con su mano
en frente de su cara una cara de emoción. Liz acerco la cara, y ella lo tomó
por los hombros como si fuera evitar que se escapara.
「¡¿En serio?! ¿Fui genial?」
「Eh, bueno, ¿cómo debería ponerlo…? ¿Mi pecho
está caliente…? Realmente fue bastante de eso.」
「¡Vamos,
me avergüenzas! ¡Dilo otra vez!」
Liz agito
los hombros de Hiro una y otra vez mientras ella se rascaba su cabeza.
「Bien, vamos, chicos~」
「Entiendo. Lleva mis cosas, niño.」
「Las mías también.」
「También las mías.」
「Si gustas.」
「¿También puedes llevar las mías? 」
Los soldados quienes eran tan amables de
pronto cambiaron de actitud de la nada. Una montaña de espadas, lanzas, arcos,
y escudos se apilaron en frente de Hiro. ¿No son esos ítems para salvar sus
vidas? Y Tris, ¿por qué también vas a abordo? Mientras Hiro estaba por expresar
su rechazo, él fue interrumpido por el grito de un soldado.
「¡Es un grupo de Ogles! 」
Todos giraron sus miradas a donde el soldado
lo apunto todo. Un feo Ogle estaba formando un grupo y miro a Hiro y los otros.
En el centro estaba un Ogle especialmente grande, y los otros 7 le rodeaban.
「También hay un Ogle allí. Dios estaría feliz
de estar aquí.」
Liz miro sobre el grupo de Ogles y mostró una
sonrisa serena. Todos los soldados rápidamente retomaron las armas que estaban
apiladas en frente de Hiro.
「¿Un Ogro?
」
「Eso es. Hay uno realmente grande, una de
apariencia grotesca, ¿cierto? Parece que fueron mutados. Son más violentos y
más inteligentes que otros, así que crean grupos y atacan humanos.」
「Puede ser que las rocas que se caían fuera
por…」
「Correcto. Fueron ellos. Tal vez quería
disfrutar la carne de humanos…」
「… ¿Vamos a estar bien con eso? 」
「No es esta nuestra primera o segunda vez que
derribamos a un Ogro…. Dios ha derribado tantos que puedes llamarle 「Ogro」.」
「Wow~…」
Aparentemente, los soldados terminaron de
prepararse para la batalla mientras Hiro habló. La infantería pesada estaba en
frente de Hiro y los otros y crearon un muro, clavando sus escudos dentro de la
tierra.
La unidad de arquería esperaba por la señal
al fondo, flechas colocadas y cuerdas tensadas. Liz los miro con satisfacción,
levantó a Laevateinn en el aire, y la dejo caer.
「¡Unidad de Arquería, Fuego! 」
Incontables números de flechas volaban
directamente hacia el grupo de Ogles. Las flechas perforaron los grandes
cuerpos en un flas. Aunque ellos derribaron a 4 de un solo golpe, dos de los
Ogles llegaron enfurecidos.
「¡Unidad de Arquería, apunten a las piernas! 」
Mientras Liz lo ordenó, le dieron a las
piernas de los Ogles, y los tumbó majestuosamente.
Los muros de escudo detuvieron a los Ogles
que chocaban y las lanzan se extendían entre los espacios abiertos y terminaron
con ellos. Como si escogieran escapar, los Ogles y Orcos restantes trataron de
subir por la pendiente.
「¡Cerberus! 」
「¡Woof! 」
Cerberus saltó el muro y fue tras ellos.
「¡Infantería pesada! ¡Abran el frente de línea!
¡Infantería Ligera, vamos a hacerlo!」
「¡Sí! 」
El muro de escudos se abrió de lado a lado, y
la que lideraba la vanguardia era Liz. Tris y la infantería ligera los siguió
detrás. Acerca de esa vez, Cerberus había derribado a un ogle, y empezó a jugar
con el Ogro.
Cerca de 10 minutos después, la batalla fue
decidida. En cuanto a Hiro tratando de reagruparse con Liz y los otros, la
cabeza de los Ogros rodaron a sus pies. Después de ver algo que no quería ver,
Hiro miró al cielo tratando de no pensar en ello.
El sol en lo alto del cielo. Tal vez era
cerca de mediodía. Liz dijo que se alcanzaría la cumbre cerca de la tarde. Otras
3-5 horas. Ellos deben subir por la montaña.
Bueno, esto esta genial. Sigue así
ResponderEliminar