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Parte 4

En este mundo, no había humano que no pudiera usar magia —
Esta era la dura verdad que todos los niños conocían y era común entre los hechiceros. La magia solo se refería a poderes especiales que se le daba a ser como las hadas.
Los humanos solo podrían usar “herramientas mágicas artesanas” y “usar herramientas mágicas”. Debido a esto, los humanos continuaron fortaleciendo y mejorando las “herramientas mágicas.”
Como un significado literal, los ítems mágicos eran herramientas de magia directa. Aún para los hechiceros, eran incapaces de usar magia sin ítems mágicos.
Herramientas mágicas “artesanales” y “usar” herramientas mágicas dependían de la habilidad. Excelentes usuarias no eran necesariamente excelentes artesanos.

En los países, excelentes artesanos no siempre eran excelentes usuarios.

Aquellos que poseyeran ambas habilidades podían ser llamados “Hechicero”, aquellos más habilidosos en la “Artesanía” eran vistos como “Artesanos de herramientas mágicas”.
Todos los que vivían en este mundo podían usar herramientas mágicas, pero la habilidad cambiaba de persona a persona.
Sin embargo, los “artesanos” eran más bien aquellos que podían usar los ítems mágicos. Habilidad, experiencia, aspiración, determinación, suerte, y maná, todos esos eran componentes importantes.
El abuelo de Selo, Zerdonato era unos de los artesanos de herramientas mágicas.
Aunque él no era conocido en todo el mundo, él creaba excelentes ítems mágicos, porque él fue contratado por Ordoba y se convirtió en su artesano privado.
Dentro de la mansión de Ordoba había tres artesanos, ellos trabajaban en talleres donde creaban herramientas mágicas que solían vender. Aunque la habilidad de su maestro Ordoba no era nada especial, él era un artesano tanto como un hechicero.
El aprendiz farmacéutico Selo se ganaba la vida cultivando las hierbas que necesitaban.
Hasta el año anterior, ellos habían contratado un viejo farmacéutico aparte de Selo. Pero este farmacéutico recibió malas noticias que su familia enfermo y corrió a casa. Debido a esto, solo Selo  había heredado el trabajo.
Él había tomado una gran responsabilidad. Hasta ahora, él estaba agradecido que Ordoba-sama no lo despidiera.
Él sólo era un aprendiz y no un verdadero farmacéutico, él no tenía que haber contratado en primer lugar.
Si al menos pudiera hacer herramientas mágicas… quizás le sería de ayuda a Ordoba-sama.

Él pensaba eso a menudo.

Selo era el nieto de un artesano de herramientas mágicas, pero él no era capaz para la artesanía o usar herramientas mágicas.
Él no podía usar herramientas mágicas que principiantes usaban con facilidad como la “Pode de Iluminación” o “Farol de Noche”. Si estos eran usados por Selo, estos misteriosamente se destruirían.
Él a menudo envidiaba a los niños que podían usar herramientas mágicas, e hizo que toda práctica fuera inútil.
Finalmente, él entendió el duro hecho que “habían cosas en este mundo que eran imposibles”. Debido a esto, Selo siguió los consejos de su abuelo y camino por el camino para convertirse en un farmacéutico.
Habiéndose despedido de Fino y Marill, Selo dejo el camino y busco hierbas mientras caminaba hacia la ciudad.
Misthound era el centro alrededor de la mansión de Ordoba·Misthound·Doriarudo que tenía  “El Campanario de Anulación de Bestias”.
El Campanario de Anulación de Bestias  alzaba la vigilancia de bestias salvajes que se acercaran a la ciudad, causando que regresaran al bosque. En cuanto más se acercaban al centro, el efecto era más poderoso. Además, las bestias salvajes con mayor altura se veían más afectadas.
Habiendo dejado el bosque y regresado a la ciudad, Selo miro hacia el campanario, dejando salir un suspiro de alivio.
Aunque el área cercana a la fuente estaba dentro del área del campanario, hacía que las personas se sintieran salvo cuando estaban en lugares donde podían ver el campanario directamente.
Desde lejos, parecía el campanario de una iglesia, pero ahora está situada en la mansión de Doriarudo.
La campana por sí misma no era grande, uno podría abrazarla con ambas manos. Pero el campanario no sonaba como una campana.
El área no era precisamente un círculo, más bien dependía de una forma geométrica. Uno necesitaría considerar el lugar y la localización geográfica del campanario, y el lugar donde pudiera ser efectivo.

Pero dependía de los instintos humanos, era muy difícil predecir la zona segura.
En los lugares donde no había grandes bestias, el campanario era inservible. Pero la ciudad de Misthound está cerca del denso bosque, las personas no podrían dormí si no tuvieran El Campanario de Anulación de Bestias.
Selo caminaba lentamente por el camino empedrado, uso este tiempo para revisar las hiervas que cultivo.
Las fresas estaban de temporada, pero el número no era mucho. Si él cosechaba muchas, él estaría privando a los niños de la diversión.
También cosechó un poco de hierba Neolamprologus, la dulzura y la textura eran igual de buenas cuando se comían. Comparado con las hierbas, estas también contarían como un tipo de vegetal. Por lo que también podía ser usado como fertilizante.
También cultivo dos lotes de vainilla que podía ser usado como especias, o hacer perfume. Además, también tenían propiedades milagrosas para  aliviar el dolor. Selo preparaba esta medicina para su abuelo Zerdonato.
Aunque él encontró una pequeña parcela de flor de hada, él sólo memorizo el lugar y no las cultivo. Debido a que la flor de hada aún estaba creciendo. Probablemente su número se incrementaría cuando la próxima primavera llegará. Después de todo, esta era una voluble hierba que beneficiaba a la vida.
Selo sólo cultivo por un rato cerca de la ciudad, pero se las arregló para cultivar con plenitud.

“Oh, Selo. ¿Regresaste de cultivar hierbas?”

Quién conversaba con él era un viejo que vivía en una pajarera. Debajo de su calva mostraba una cara llena de arrugas con una agradable sonrisa.
El hombre parecía haber regresado de ir a pescar al lago, traía una canasta que parecía muy pesada.

“En, fui al bosque. Osan, parece que tuviste una Buena pesca.”

“Está bien, es como siempre.”

El viejo replico mostrando una agradable sonrisa. Saco tres peces de la canasta.

“Toma. Es hora de la cena.”

“Wow, gracias! Voy hacer pescado seco a la plancha.”

Hoy en día, Selo estaba viviendo solo en una pequeña cabaña de madera donde se había quedado con su abuelo. Esto era por el contrato del artesano, así que estaba construido dentro del patio de la Mansión de Ordoba, pero él todavía tenía que cuidad de su propia comida y bebida. 

Debido a esto,  consiguió comida que lo hizo feliz en el fondo de su corazón.
El hombre palmeo la cabeza de Selo.

“Me ayudaste a conseguir muchas medicina. Oh sí,  ¿no estabas con la ojou-sama hoy?”

“… En. En realidad, no he pasado mucho tiempo con Fino-sama——“

Él estaba fingiendo ignorancia con el viejo, pero este le interrumpió.

“Mentiras. Estabas nadando en la fuente. No estoy molesto contigo, así que siéntete agradecido.”

Selo se puso nervioso.

El hombre sonrió en silencio.

“¿Las personas en la mansión te advirtieron? El director-sama es muy estricto en esta área. Un aprendiz de farmacéutico y una noble ojou-sama siendo demasiado cercanos causaría problemas para las personas—— pero por ahora. No le diré a nadie, quédate calmado.”

Mirando la espalda del viejo mientras se alejaba, Selo bajo su cabeza.
Muchos adultos no entendían con él estaba dentro de la ciudad. Independientemente si es un adulto o un niño, ellos acostumbraban a levantar unos muros con los nobles.

Pero aún si Fino se unió a los niños —— Selo aún sentía los nobles como “personas diferentes comparadas a él”.

Selo tomo el pescado que recibió en su mano y camino hacia el centro de la ciudad.

La escena en frente de él era la misma.

Las calles empedradas alrededor con edificios de ladrillos perfectamente alineados, los carruajes sin prisa y protegidos por los árboles cercanos en la carretera ——en una ciudad rural, no había nada especial.
La ciudad de Misthound no era muy prospera, pero tampoco era pobre. La población no era mucho y al sur tenían grandes tierras con cultivos.
Las montañas estaban llenas de frutas y vegetales silvestre, por otra lado de las bestias salvaje, también habían peces en la rivera. Ya que el área no permitía fácil acceso a cosas lujosas, el dinero no era muy usado, así que una relajante atmosfera llenaba a la ciudad.
Además de las tiendas donde mostraban las frutas de temporada estaba una tienda de postres que los niños visitaban comúnmente. Los jóvenes magos usaban herramientas mágicas para hacer nieves, luego añadían frutas y el jarabe en la parte superior, finalizando con la venta de postres.
Ya que no era época de té, la tienda no tenía clientes.

“Yo, Selo. Ten un pedazo.”

Alguien lo llamó, así que Selo miró atrás. El joven hechicero, quien era el responsable de resolver los problemas de los niños hace algunos años, tenía una sonrisa en su cara. Habiendo crecido, él heredo la tienda de postres que estaba abierta en verano.
Para los niños, su pequeña tienda era un buen punto de reunión en la cuidad que carecía de emoción.
“No traigo dinero, tal vez la próxima vez.”

“No tienes muchos negocios ahora. Ya que vives en la mansión, no hay muchas cosas en las que gastes tu dinero.”

El joven hechicero lo dijo en broma, y puso la nieve en un contenedor. Una herramienta mágica que podía ser usada para enfriar el agua, pero para restaurar el hielo se necesitaba una mano.

El joven uso la mana para jalar la manecilla hacia Selo.

“Entonces tomalo como un trato. A cambio, quiero preguntarte algo.”

Selo camino hacia allí.

Recibiendo la nieve en una copa, y vertió un poco de jarabe sobre él.

“¿Qué quieres preguntar?”

El joven bajo la voz.

“Habían personas que entraron a la casa de Doriarudo, ¿a qué vinieron?”

“Ah, debes hablar de los invitados. Aunque no sé quiénes sean, Fino dijo que algunos importantes invitados llegarían hoy.”

El aprendiz de farmacéutico Selo no sabía mucho.

Selo uso una cuchara de bamboa para poner la nieve dulce dentro de su baca. El rojo jarabe sabor granada, tenía un poco de acidez.

El joven levantó sus cejas y entonces dijo con una voz baja.

“Hey… esas personas eran de los Caballeros Reales Mágicos. ¿Ordoba-sama hizo algo malo?”

Escuchando a lo que el joven dijo, Selo se sorprendió.

Los Caballeros Reales Mágicos eran escogidos de la mayoría de los hechiceros competentes y caballeros que servían a la realeza.
Ellos eran de la guaría real, y actuaban por el orden público así como también la prohibición a cierto magos. Ellos estaban un paso más allá de los caballeros y hechiceros normales, y eran un pequeño número.

Selo sólo había escuchado de ellos pero nunca los había visto.

 “¿Los Caballeros Reales Mágicos… han venido a la capital Real? “

Debido a que Misthound está cerca de la frontera, si ellos venían de la capital Real, el viaje les tomaría un mes.

Escuchando eso, el joven negó con la cabeza.

“No, ellos son pocos. Debieron quedarse cerca de Lonbordo. Había cerca de 3 carruajes y 30 caballeros… ¿En serio no has escuchado nada de eso?”

Selo asistió.

Ir a Lonbordo a pie toma dos días. Era una gran ciudad dentro de la zona, y era una muy importante fortaleza en la frontera desde tiempo antiguos.

“Fino no parecía saber mucho de esto, y yo no sé más allá. Pero ellos no vendrían a capturar o a investigar a Ordoba-sama, ya que Fino dijo que eran ‘invitados’.”

“Eso es bueno. Pero no soy el tipo de persona que lleva espadas a donde sea. Las personas en la ciudad están inquietas.”

El joven sonrió irónicamente, y palmo la cabeza de Selo.

Escuchándolo decir eso, Selo se dio cuenta que no había muchas personas en las calles. Las personas probablemente les temían a los caballeros y se encendieron en sus hogares.

“Ten cuidado cuando regreses. Los caballeros son violentos. Es mejor no meterse con ellos.”

Selo asistió y le entrego la copa vacía.

De camino a la mansión, él pensó en muchas cosas.

Caballeros Mágicos Reales. Para que han venido…

Él estaba completamente perdido en esto. Hace unos días, los sirvientes parecían estar muy ocupados con algo, pero probablemente era por el número de invitados.
O tal vez estaban tratando a esta ciudad como una parada antes de ir a otro lugar. Selo pensó con una expresión vacía, y rápidamente volvió a la Mansión de Ordoba.
La mansión cubría una gran área, dentro del patio había un huerto. Selo cultivó algunas plantas que  eran más fáciles de encontrar.
Había una que se llamaba árbol Quat, un pequeño árbol que sólo crecía el radio del tronco y nada más. En verano, los árboles daban frutos amarillos.
Las frutas contenían cualidades que eran útiles como un antídoto, y los efectos eran claros. Pero era muy sensible y se marchitaba rápido, así que era difíciles de cultivar. Debido a esto, la fruta se vendí a un alto precio.
 Selo heredo los árboles del antiguo farmacéutico. Hoy, los árboles daban frutos aburridos, pero tal vez porque el suelo no es el correcto, o los métodos de cultivar no eran los mejores, la condición para cultivar los árboles no era la indicada.

Vertí mucha agua… tal vez creo que fui influenciado por la atmosfera…

Selo sentía como que él no era los suficiente maduró como farmacéutico y camino atreves de la puerta.
En el patio ante él estaba un gran número de caballos militares. Justo como el joven de la tienda de postres dijo, el número era alrededor de 30.
 La caballería actuaba como la Centinela intercambiando miradas con él, pero viendo a Selo él sólo era un niño, evitó la mirada a cualquier lada de una forma aburrida.

La sirvienta de la mansión de Kardeno inmediatamente corrió al lado de Selo.

Aunque ella era una joven sirvienta, ella era muy expresiva entre las sirvientas de la mansión, y confiaba en Fino y Orodba. Ella siempre trataba a Selo amablemente y a veces compartía algunas golosinas con él.

La sirvienta bloqueo el camino de Selo.

“Selo, ¿has visto a la ojou-sama?”

Escuchando su pregunta, Selo se sorprendió. Ellos habían ido a la fuente supuestamente para completar el secreto de la mansión.

¿Lo descubrieron? ¿Fino todavía no ha regresado? Esos pensamientos lo hacían sentir incómodo.

Kardena no espero por la respuesta de Selo y continúo.

“Ella regreso hace un rato, pero desapareció después de saludar a los invitados… el director-sama dijo que la encontrará rápido, si la ves, por favor informale.”

Kardena rápidamente termino con su petición y camino fuera de la fuera para buscar en la ciudad.

Viéndola irse —— Selo inmediatamente camino hacia su casa en la mansión.

La casa de Selo era más como una pequeña campaña en las montañas comparada a una casa. Era una cabaña de madera situada en lo profundo del denso bosque del patio.

Regresando a lo de la cabaña, Selo se preguntó.

“Fino, ¿ha regresado?”

Sin respuesta. Pero Selo tenía sus sospechas. 

Él abrió la puerta y entro.

La cabaña ya estaba fría.

Comparada con otras casas en la ciudad, esta era mucho menos espaciosa. Los muros de madera también estaban muy usados y tenía huecos en todas partes.

La cabaña no era grande, pero para Selo era su hogar.

Después de entrar,  puedes ver un cuarto que estaba combinado con el comedor y la cocina, dejando el taller para la mezcla de hierbas y medicinas, y el baño era más pequeño.
El taller era donde su abuelo creaba herramientas mágicas, después que él falleciera, Selo empezó a usar el área.
A primera vista, Fino no estaba en el cuarto. Cada vez que ella estaba a escondidas aquí, ella probablemente tomaría la iniciativa sentándose en la cocina y empezaría a tomar té.

Selo se rasco la cabeza y miró dentro de la habitación.

El sol no llegaba hasta la cama, la manta estaba en vuelta con una forma humana. Si escuchabas cuidadosamente, podrías escuchar una leve respiración.

Él de pronto perdió las fuerzas de su cuerpo.

“… Fino, despierta.”

¿Por qué está durmiendo aquí? Sus acciones eran bastante incomprensibles.

La cobija de la cama empezó a moverse. Fino froto sus ojos y apareció desde dentro.

“En…? Selo?”

Selo asistió. Parece que Fino no estaba del todo despierta.

“Buenos días, ¿Marill ha regresado?”

“… Ahhh, en. Eso ya se solucionó.”

Actuaba como si fuera su propio cuarto, Fino apunto hacia la cocina.

“¿Puedes traerme una infusión de té? Quiero un sabor más ligero.”

“De cualquier manera, ¿por qué estás durmiendo aquí?”

Selo se lo pregunto a Fino mientras seguía su petición, encendió la estufa y empezó a preparar el té.

Fino se estiró y enderezó.

“… En. Después de nadar realmente quieres dormir, ¿cierto?”

“No, no es eso de lo que estoy hablando.”

Si quieres dormir, por qué no lo haces en tu propio cuarto. Es más confortable allí. Fino no tenía que haber venido aquí a tomar una siesta.

“La señorita Kardena está tratando de encontrarte. Además, ¿los invitados de los que estaba hablando no eran caballeros mágicos? Si no regresas rápido, ¿no te meterás en problemas?”

“Está bien aún si no estoy ahí. Papá esta con ellos.”

Fino replicó y frotó de sus ojos.

La relación entre  Fino y su padre adoptivo no era mala Ordoba, pero no era del tipo de confianza biológica entre un padre y una hija. Aunque ella le agradecía por criarla, ella aún lo mantenía distante a su corazón.

“¿Entonces, por qué estás durmiendo aquí?”

Selo pregunto otra vez mientras le sonría.

“En, es porque me pregunta por qué Selo no había regresado, decidí esperarte aquí. Entonces fue como si fuera maldecida, así que caí en la cama y me dormí.”

“Esto no es algo que puedas explicar con un sólo “me dormí”. Ya no eres una niña…”

Selo los dijo sin poder hacer nada a la chica dos años mayor que ella. Aunque Fino lucia como una adulta, pero esas acciones despreocupadas eran peligrosas.

Fino sonrió tímidamente, puso su cara en la cama.

“Eso no es genial. La cama de Selo huele genial. Estoy tentada a cambiar de cuarto contigo.”
Fino dijo a secas cosas que harían que el corazón de las personas se acelerará.

Sabiendo que ella sólo estaba jugando con él, Selo suspiro.

“¿Has visto a los caballeros? ¿Cómo son ellos?”

Ahora fue Fino la que suspiró.

“… Er, el capitán de escuadrón Helmbekt era muy joven, pero se sentía disgustada ——él se mantuvo viendo mi pecho y mi cintura. Él parecía como un chico ocioso…”

Fino rara vez mostraba un obvio disgusto por alguien.

Escuchando a Fino decir eso, Selo la miró.

Arriba de su pecho estaba un collar que Selo le había dado antes. Este era un accesorio normal que él había hecho con su abuelo, el diseño era muy burdo.
Al frente del collar había una pequeña piedra esférica, pero no parecía nada valioso.
En la cintura estaba en una bolsita que contenía un Caballo de Madera Devino y otras varias herramientas mágicas.

“… ¿Selo estás atento?”

“¿Ah?”
Gracias a que Fino notó su mirada, Selo empezó a preocuparse. Pero Fino en realidad miraba al techo.

“Es bastante raro. Por qué los Caballeros Mágicos Reales viniera a esta área rural —— Padre no hizo nada malo…”

Fino se mostró preocupada y ansiosa, entonces bajo su voz.

Selo también sintió un poco de incomodidad.

Los Caballeros Mágicos Reales definitivamente no era un escuadrón que se movería por razones negativas.
Si Mosthound sólo era una para en su viaje así que no era gran cosa, pero si este era el destino, Selo estaba atento a sus objetivos.

“Escuche algo hacer acerca de investigar a papá… pero siento que no es nada fácil.”

Fino respondió bastante pobre, tal vez ella no se dio cuenta, pero “lo siento como” lo hacía parecer poco creíble.

“Si no es tan simple, ¿qué más están haciendo aquí?”

Escuchando la pregunta de Selo, ella forzó una sonrisa.

“No lo sé. Pero eso no nos concierne,  y no nos incumbe. Comparado a eso, Selo ——“

Su voz se volvió acaramelada.

Esto asusto un poco a Selo.

Tal vez ella no estaba del todo despierta, Fino hizo una mirada apasionada a Selo.

“… ¿Q-Qué es esto?”

“¿Puedo quedarme un poco más a dormir? No quiero molestar…”
“No.”

Selo inmediatamente replico.

Él no considero su perspectiva en la mansión, más bien quería salvar su pellejo.

Sólo por un momento —— un pequeño momento, los ojos de Fino mostraron un color peligroso.
Tal vez ella no creyó que sería rechazada inmediatamente, la expresión de Fino se tornó agria y levanto la vox.

“¡Yaa~! ¡Por qué, que quieres decir!”

—— Cuando ella recupero su compostura, el calmado Selo de a poco dio sus razones.

“No, duerme en tu cuarto. Si Fino no aparece al amanecer, toda la mansión se hará un alboroto. Por otra parte, el té rojo ya está listo, date prisa y bebe tu té.”

“Ah, en… entonces no volveré.”

Parecía como si lo hubiera olvidado, Fino se sentó. A la vez, la puerta de la cabaña se abrió.
El sorprendido Selo volteó su cabeza y vio una cara con el ceño, el hombre con físico de guerrero estaba parada en frente de él.

“…¿Padre?”

Fino pregunto rápidamente..


El hombre parado era el indudable maestro de Selo— Ordoba·Misthound·Doriarudo.


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