Capítulo 50: ¿Qué es lo Primero que Harás Cuando Llegues a Casa?

 

[¡Yuya! Desde ahora, llévala con calma conmigo. ¡Quiero decir, cálmate! ¡Me está dando algo!]

 

[Oh… cállate, Shinji. Acabo de despertarme y tu voz está resonando en mi cabeza, así que deja de gritar…]

 

Luego de un viaje de tres horas en bus, llegamos a la escuela a salvo. De inmediato nos separamos en el lugar, pero Shinji corrió a mí y Kaede, quién aún estaba acariciando sus dormidos ojos. Pretendía hacer algo para enojarme, ¿no?

 

[¡Tú… no puedes ir en serio, ¿cierto?! ¡Esto…! ¡No solo puedes hacer eso sin dudar y esperar que nada salga mal! ¡¿Crees que no me estoy volviendo loco por ser tan ingenuo como para no mostrártelo?!]

 

¡Bang! Shinji me mostró la pantalla de su celular con un efecto de sonido que sonaba como algo fuera de un anime. Cuando Kaede y yo lo miramos, vimos una fotografía del bus en el que habíamos estado, con la cabeza de Kaede en mi hombro y yo apoyándome contra ella mientras dormíamos.

 

[Shinji. No es de buen gusto tomar fotos a escondidas, ¿sí?]

 

[¡Cállate! ¡Es una maldad necesaria para que notarán cuán destructivo su comportamiento de “tortolitos” es! ¡¿Qué con esa cara de felicidad?! ¡Ambos están tan lindos! ¡¿Sabes cómo me sentí por estar en un bus diferente al de Akiho?!]

 

No, no lo sé. ¿Cómo se supone que sepa cómo me veía mientras dormía o cómo respiraba en mis sueños? Hey Kaede, ¿qué pasa? Estás viendo a la fotografía.

 

[Higure-kun. Quiero conservar esa fotografía como un recuerdo, ¿podrías enviármela ahora mismo? Yuya-kun se ve tan lindo en la fotografía.]

 

Kaede suspiro satisfecha. Bueno, ciertamente creo que el rostro de Kaede estaba muy lindo en esta fotografía. Y mientras estás en eso, envíamela también, Shinji.

 

[Kuh… ¿de esto son capaces los “tortolitos”? ¡No puedo creer que las fotografías no te molesten, pero más bien muestran cuán cercanos son ambos…!]

 

[Shin-kun. No vale, ríndete. Se convirtieron en dos personas que ya no conocemos más. Son más que una “bakappuru”, son unos “tortolitos”. ¡Oh, yo te lo enviaré Kaede-chan, y tú, Shin-kun, envíaselo a Yoshi!]

 

Palmeé su espalda, sintiendo un poco de pena por sus hombros desplomados. Con un rugido inaudible, Shinji me envió la fotografía. Gracias.

 

[Bueno, bueno. Supongo que es hora que vayamos a casa. vamos, Kaede.]

 

[Sí. Muy bien, Akiho-chan, Higure-kun. Los vemos en la escuela.]

 

Kaede y yo caminamos a casa, mano con mano, recibiendo las palabras “deseo su felicidad” de la antigua pareja existente.

 

[Hey, Shin-kun. Realmente se ven como una pareja, ¿no?]

 

[Eso es, Akiho. Tenía la duda de eso desde que Yuya se confió a mí, pero no creía que cambiaría tanto una vez se confesara y oficialmente se volvieran amantes. Aunque no sé cuánto él ama a Hitotsuba-san…]

 

[También va para Kaede, ¿verdad? Y hay algo que el aura de amorcito de Yoshi. Tan dulce como fresas. ¡Buen trabajo, Shin-kun!]

 

[Gracias. Akiho. Volvamos a casa también.]

 

✽✽✽✽✽

 

De camino a casa. Pensando en qué hacer para la cena de esta tarde.

Por cierto, hay cerdo congelado y algunas sobras de kimchi, así que puedo hacer un refrito de cerdo de kimchi. ¿Qué más debería añadirle a la sopa china? Supongo que era lo que los estudiantes de secundaria revisan cuando cocinan.

 

[Es típico de ti, Yuya-kun, no sales a comer cuando estás cansado. No tienes que forzarte, ¿sabes?]

 

[No, solo pensé que si puedes hacerlo, es mejor hacerlo por ti mismo tanto como sea posible. A penas salíamos a comer, así que hay algunas sobras.]

 

Había estado endeudado. Con el fin de recortar gastos de comida, principalmente cocinaba por mí mismo. Huh a pesar que los padres de Kaede eran ricos, no podían dejarla por su cuenta.

 

[Incluso si el lugar cambia, no cambiarás la forma en la que has estado viviendo. Huh. Como esperarías de Yuya-kun.]

 

[Hey, Kaede. No siento como que estoy siendo alabado, ¿debería estar feliz?]

 

[¡Claro, te estoy alabando! ¡Estoy deseando probar la comida casera de Yuya-kun!]

 

Tratemos de dar lo mejor para vivir a las expectativas de Kaede, ¿no?

 

Fuimos directo a casa sin tomar desvíos. Era bueno estar en casa por los primeros dos días, pero por alguna razón, Kaede quería hacerme esperar. ¿Qué pasa?

 

[Entraré primero, Yuya-kun, por favor espera un poco mientras entres. Sí, cerca de 10 segundos estará bien.]

 

[¿Por qué estás actuando en una forma misteriosa…?]

 

[¡Por favor no entres! ¡Puedes entrar luego de 10 segundos y decir estoy en casa!]

 

Luego de decir eso, Kaede abrió la puerta y corrió dentro de la casa como si huyera. Me preguntaba qué iba a hacer en este corto tiempo. Me sentí emocionado y angustiado.

 

[E-Estoy en casa—]

 

Exactamente 10 segundos después. Como se me pidió, abrí la puerta.

 

[Bienvenido de vuelta, Yuya-kun.]

 

Kaede estaba parada allí sonriendo y sosteniendo sus manos. Ah, ahora entiendo a que se refiere.

 

[Estoy de vuelta, Kaede.]

 

Puse mi equipaje en su lugar, me quité mis zapatos, y me acerqué a ella con mis manos extendidas también, y las envolví con fuerza alrededor de ella.

 

[Ehehe. Quería decirte “bienvenido de vuelta”, Yuya-kun. ¿Fue una mala idea?]

 

[¿Cómo podría serlo…? Estoy tan feliz.]

 

Mientras estaba sintiendo la calidez de mi persona favorita, Kaede de pronto me miró. ¿Qué ocurre? Entonces, me besó más rápido antes que pudiera pedírselo.

 

[Oh, es un bechito de bienvenida. ¡Vamos, vamos ¡Cámbiate de ropa primero! ¡Entonces hagamos la cena juntos!]

 

Kaede corrió al baño, su rostro ojo brillaba. Me quede solo en la puerta, estupefacto.

 

[Besar es trampa, Kaede…]

 

Me prometí regresársela, un día le daría un beso de despedida.