Capítulo 2: El Duque Howard

[¿Eh? Um, er… desde cuando te diste cuenta…]

Luego de bajar de mi regazo, la autoproclamada Ellie me pregunto angustiada. Es divertido verla hacer caras así.

[Desde el comienzo.]

[Hou…]

[¿C-Cómo lo sabías?]

[No, digo… incluso si usas un uniforme de maid, tu abrigo es muy extravagante. Y, más que todo, no te sientes como una maid. Siendo así, debes ser una persona preocupada que quiere inspeccionarme incluso si tiene que ponerse en esas.]

[Como se esperaba de Allen-sama.]

[Uu…]

Su Alteza la duquesa evito mis ojos, avergonzada… Incapaz de soportar la vergüenza más, ella corrió al feudo, dejando a Graham-san y a mí atrás…

[Lo siento mucho. Ojou-sama insistió en venir conmigo mientras lo usa…]

[Está bien, es normal ser precavido con la persona que te enseñará. Aunque, creo que usar un uniforme de maid es algo. Aunque luce linda con él.]

[¿Así es? Siendo así, por favor diga esas exactas palabras a la Ojou-sama en persona. Ella estaría alagada. Ahora, mi Lord ha estado esperando.]

El interior de la mansión no era tan lujoso como pensé. A lo mejor, era muy utilitario. A lo peor, fue mecho muy frugalmente. La buena gracia era que había un calentador funcional dentro. Con una mansión así de grande, ajustando la temperatura a través de la magia sería una molestia.

[Alle-sama. Por favor, por aquí. En cuanto a sus pertenencias— Ellie.]

[¡S-Sí!]

La maid que Graham-san llamó era una chica levemente mayor que Su Alteza, aunque aún da la impresión de una chica joven. Ella llego corriendo a nosotros con una apariencia nerviosa plasmada en su rostro. Ah, si corres así—

[¡Kya!]

[Whoops— ¿Estás bien?]

[S-S-Sí. Y-Y-Yo lo siento mucho.]

[¿Cuántas veces te he dicho que no corras dentro de la mansión?]

Graham-san dijo, viéndose impresionado.

Luego que la real Ellie (quien de hecho se parece a Su Alteza un poco) se parara, le di mi equipaje. Huh, mi bufanda aún la tiene Su Alteza.

[Me alegra que no estés herida. Dejaré mi equipaje en tus buenas manos.]

[¡S-Sí! Puedes dejármelo a mí.]

[Gracias.]

[Hyau. Err, um, eh…]

[Oh. Lo siento.]

Palme su cabeza como el hábito de mis pupilos y mi hermana pequeña. No era bueno. Si mi rival se entera de esto, me llamaría un pervertido otra vez.

Pero no entiendo por qué aún me demanda palmearle, incluso luego de llamarme así. Nos habíamos conocido por un largo rato, pero había muchos otros lados de ella que aún encuentro misterioso.

Graham-san, quien observa mi hábito, me dio una cálida mirada.

[Estoy muy curioso en cómo ese instructor mío me describió, pero… al mismo tiempo, siento como que no quiero escuchar de ello.]

[Dijo mucho de ti, pero… también dijo que eres un “Natural Asesino de Lolis”.]

[¡E-Esa es una falsa acusación! Tengo una hermanita en casa, así que soy más o menos familiar en cómo tratar a alguien más joven que yo.]

[¿Así es eso? Ahora, por favor, por aquí.]

Esa era la cara de alguien quien completamente no me creía…

Ese profesor bastardo. La siguiente vez que nos reunamos, me asegurare que page las deudas que ha puesto en mí injustamente, con intereses.

Graham-san tocó una pesada puerta cercana. [Pasen.] Respondió una profunda voz dentro.

Él abrió las puertas y me señaló solo con sus ojos.

Ya veo. Así que esta es la entrevista final.

[Con permiso.]

[Oh, por fin has llegado. ¿Debería decir gusto de conocerte? He oído mucho de ti de ese tipo, así que no siento que seamos extraños. Soy Walter. Solo por hablar, soy el Duque Howard.]

[Soy Allen. En este solitario día, mi confianza en el profesor ha ido degradante.]

[Hahaha. Así que eres otra víctima, ¿huh? Ese chico ha sido así desde hace tiempo. No puede evitar hablar de quien tiene su interés.]

[Haah…]

[Ahora bien, perdón por hacerte venir tan lejos desde la Capital Real. Estoy asumiendo que has oído de su condición, así que te la dejaré a ti (TL: yo también quiero una loli). Le he consultado a ese tipo, pero te ha recomendado mucho, diciendo que eras el único que podía ayudar…]

[Por favor espera. Siento decir esto, pero no se me ha dicho nada. Se me pidió ser un tutor para la duquesa hasta que se inscriba en la Academia Real.]

Por escucharlo, el Dique se quedo en silencio un rato. Luego, un suspiro se le escapó. Una mano encontró su camino a su frente. Normalmente, le dirías a tu empleado los detalles del trabajo, ¿cierto? Normalmente. Entonces, se giró a mí y habló.

[Déjame patearle su trasero la siguiente vez.]

[Claro. Vamos a invitar también a Graham.]

[Umu.]

[¿Se me dijo la descripción incorrecta del trabajo? También le he cuestionado un poco a Graham en el carro, pero ¿qué hay de sus anteriores tutores?]

[Es cierto que deseo que seas el tutor para mi hija más joven, Tina, hasta que primavera llegue. Sin embargo, la parte de inscribirse a la Academia Real no es del todo correcto.]

[¿A qué te refieres?]

El Duque se levantó de su silla y miró por fuera de la ventana. Viéndolo así, era difícil de imaginar que estuviera cerca de sus 50, la misma edad como el Profesor. Tenía un físico muscular esplendido.

[Mi clan ha estado a cargo del Norte desde la fundación del Reino. Sin embargo, como puedes ver del escenario, es una tierra difícil para vivir para cualquier hombre.]

[Sí.]

[Aún más, este territorio también fronterizo con los países vecinos y ha sido el escenario de varias guerras. Esta también es la razón porque mi Clan Howard es visto como un poderoso clan militar por países extranjeros.]

[Sí.]

[Solo tengo dos hijas… Mi esposa dejo este mundo hace unos años, y no tengo intención de tomar otra mujer como una esposa. El Duque Howard el Militante terminaría en mi generación. Sin embargo, mi hija más grande desaprobó mi decisión y ya dejo el inscribirse en la Academia Real.]

Estoy empezando a ver dónde irá esto. Es decir, el Duque—

[Lo que quiero pedirte, es hacer que Tina deje la inscripción. Es muy desafortunado para ella, pero mi hija más joven— no tiene talento para la magia en nada.]

Profesor. Ha puesto muchos asuntos problemáticos en mí hasta ahora, pero ¿no es mucho esta vez?