Capítulo 5 – La Noche de
Tréboles Blancos y Rojos
Las
crestas mágicas eran grabadas en la piel de los humanos porque el cuerpo humano
era una substancia que podía circular poder mágico más eficientemente. Al
final, los presentes guerreros mágicos no sabían de un medio que fuera más
apropiado que sus propios cuerpos para manifestar magia.
Los guerreros
mágicos circulaban poder mágico en las crestas mágicas las cuales fueron
grabadas en sus cuerpos con su voluntad. La forma dibujada por ese circuito se
volvió un cuadro mágico e hizo que poderes de milagros aparecieran en este
mundo.
Sin
embargo, una aleación la cual era bastante buena para substituir el cuerpo
humano como un medio y manifestar mágica, y extenderse rápida y secretamente.
Su desarrollador fue el Jefe Ingeniero del Tercer Arsenal de la Armada de
Amaddo.
Quique
Albiol.
♦♦♦♦♦
También
un genio indudable, aunque excéntrico.
Si
uno fuera a tomar el mando de todo el gobierno de un país, entonces un profundo
y extenso conocimiento era necesario. La vasta cantidad de libros recolectados
en esa librería ayudaba a su carrera como un político y podía ser llamado su
soporte. Con el fin de convertirse en una Dominas, Karin había leído una gran
cantidad de libros de referencia como se esperaba, pero la cantidad en su
librería personal, la Casa de Rudbeck, de ninguna manera podía ser comparado a
la Casa Valiente.
Karin,
quien estaba viendo al librero como si la estuviera viendo con asombro y
envidia como cuando era chica, pero desde un punto de vista un poco más alto,
oyó el sonido de las puertas cerrarse y vio atrás.
「…Te he estado esperando, Karin.」
Dante
quien había entrado al cuarto mientras jugaba con su curvo cabello rojo con sus
dedos, estaba usando una vestimenta rojo oscuro mostrando su actual estatus.
「Lo siento. Entiendo que estás ocupado convtrabajo.」
「No, no importa.」
「Quiero hablar otra vez contigo antes de volver a mi
país.」
「¿Ya vas a volver a tu país?」
Los
ojos de Dante se abrieron en sorpresa.
「¿No han sido solo tres días desde que viniste? ¿No
pasaste mes y medio o un mes aquí en el pasado?」
「Es diferente a la niñez. Similar a cómo te has hecho
del título de Viceprimer Ministro, también estoy interesada en el título de
Dominas ahora.」
「Ya lo sé… pero
no quiero enviarte de vuelta solo así.」
Dante
se recostó contra su escritorio favorito y abrió sus brazos. Karin pensó que
cada uno de sus actos teatrales fueron exagerados.
「—Lo que te dije antes no fue una broma.」
「Lo siento, ¿qué pasa?」
「Es acerca de mí tomándote como mi esposa. Tú siempre eres
buena en fingir ignorancia.」
「…Lo recuerdo.」
「Es bueno oírlo.」
「Debí haber dicho que no era una pregunta que podía ser
respondida de inmediato」
「¿Me puedes escuchar primero, Karin?」
Dante
abrió el cajón del escritorio y sacó una rama de documentos con finos
caracteres escritos.
「¿Qué es eso?」
「Es el borrador de una petición que intento reportar a
Su Alteza pronto.」
Diciendo
eso, se lo entregó a Karin.
「¿Está bien para mí que lo lea? Soy de Amaddo, ¿sabes?」
「No importa. Más bien, la conversación no puede
proceder a menos que lo leas.」
Ya
que era la propuesta de Dante al Rey de Biranoba, tenía que estar profundamente
conectada a su interés nacional, pero Karin lo reviso como se le dijo.
「¿La institución de entrenamiento de guerreros mágicos?」
「Sí.」
Era
una petición que decía que un lugar como la Academia Mágica en Amaddo debería
ser establecida en Biranoba. El resumen del presupuesto requerido y el programa
para hasta cuando los guerreros mágicos podían ser producidos prácticamente
estaban escritos muy meticulosamente.
「—La Santa Alianza originalmente era de 12 guerreros
mágicos que ayudaron a Redountra a sellar al “Demonio”, pero se derivó de los
países los cuales fueron fundados para rodear la actual “Colina del Sello”. 」
Aunque
podía ser nada nuevo para las Dominas— Dante hizo un prefacio e inició a hablar
con Karin.
「Eventualmente se volvieron reyes, y luego Redountra cayó
en sueño, se mantuvieron alerta para asegurar que el sello no sea deshecho.
Dejaron atrás a 12 Dominas, una para cada uno de los 12 países, así el
“Demonio” pueda ser sellado otra vez en el peor de los casos. Por ello, incluso
si temporalmente nos falta una Dominas, su número continua siendo el mismo
incluso ahora sin cambiar.」
「Eso es… Hasta ahora, hubo varias ocasiones donde un
substituto era necesitado de pronto debido a accidentes imprevistos o muertes
por enfermedad, recuerdo que no hubo momento donde dos o tres Dominas
estuvieran faltando simultáneamente.」
「Sin embargo, ¿qué pasa con los países aliados?」
「……」
Karin
detuvo su mano que estaba girando el papel de fina calidad y miro a Dante con
ojos revueltos.
「Ahora, solo siete de los países que participaron en la
alianza se mantienen. Amaddo, Diruma, Haiderota, Mirzoza, Bito, Picabia y
Garmany; también deberías de saber que fue de los otros cinco países, ¿cierto?」
「A Biranoba también le ha ido bien ahora como un cuasi
signatario…」
「Sí, un cuasi signatario. Aunque, podría ser preferible
que solo como apariencia permaneciera como un país. Incluso si es nuestra
Biranoba o Berdou.」
La
mirada de Dante paso a un cuadro fotográfico que estaba colgando en un rincón
del muro. Sin embargo, no era un cuadro del estatus de la familia de la Casa
Valiente que estaba desplegado por dentro, sino un cuadro de un mapa centrado
en Biranoba.
「—Pero Romarikku, Emelily y también Baragan ya dejaron
de existir en este mundo. Sobre todo, Romarikku y Baragan fueron anexados a
Amaddo y Haiderota, y se desvanecieron de la superficie del mapa.」
「Lo siento… El actual yo solo puede responder con eso.」
「No es como que esté criticando las hazañas de tu
tierra madre en particular. Pero solo quiero reafirmarte que la situación
actual se desvía mucho de cómo la alianza debería ser originalmente.」
Dante
se movió al cuadro del mapa en el muro y dijo eso. El Biranoba en el mapa era
muy pequeño, y siendo presionado por Amaddo y Diruma en su este y oeste, lucía
como si fuera a ser aplastado en cualquier momento.
「Solo con Amaddo y Diruma, poseen cerca de la mitad de
todo el territorio aliado y más aún de cinco Dominas. Esta actual condición
puede decirse no ser muy bien balanceada, ¿cierto?」
「¿No es ese balance bueno si hay una estabilidad debido
a ello?」
「Una situación donde hay una congregación de Dominas no
es deseable, y el poder de Amaddo se hace más fuerte. Por eso, quiero que un
pequeño país como Biranoba posea una Dominas como antes. Y quiero que Amaddo y
Diruma lo aprueben.」
「¿Y estoy aquí para apoyarte?」
「No tiene que ser justo ahora.」
Dante
arrojó el borrador que Karin había regresado al cajón.
「Puede ser luego que hayas terminado de servir con tu
deber de Dominas. Ven a Biranoba y cásate conmigo. Y luego quiero que guíes a
la siguiente generación en la institución de entrenamiento de guerreros mágicos
que creé.」
「…Te estás arrimando al árbol equivocado.」
Aunque
Karin era pariente de sangre de Dante, al final era una persona de Amaddo.
Abandonar Amaddo para vivir por Biranoba— lo cual significaba abandonar su Casa
al mismo tiempo— no era simple.
「…Soy una Dominas también como un Inspector de Alto
Grado de Amaddo, y también soy la hija única y heredera de la Casa Rudbeck.」
「En efecto. Es por eso que dije en su momento, ¿no? Es
posible hacerlo así si das a luz a dos niños.」
「…Lo siento, lo diré claramente.」
Karin
arrastró el chal envolviendo su hombro y le dijo a Dante.
「No quiero dar a luz a tus hijos… Por no decir nada
ahora, sino también en nueve años.」
「Eso es—algo impresionante.」
Dante
abrió bien sus ojos a las palabras de Karin. Peinando su flequillo, un hábito
suyo, tomó un profundo respiro y bajo sus hombros.
「Nunca pensé que sería de tu desagrado.」
「No me caes mal. Aunque, no puedo pensar en ti como mi futuro
esposo.」
「¿Incluso como un compañero?」
「Nací y crecí en Amaddo, no tengo obligación de
trabajar por Biranoba. Además—」
Sería
mejor si (el borrador de dante) fuera para guerreros mágicos ordinarios, pero
si iba a crear a una chica genio que pudiera convertirse en Dominas, entonces
una institución educativa especializada tenía que ser preparada. Además, una
chica talentosa debía ser seleccionada de un gran número de candidatas, y darle
un entrenamiento en su niñez. El presupuesto anual especial que Amaddo invirtió
en el entrenamiento de Dominas con facilidad superaba a los fondos de guerra de
un pequeño país.
Por
eso, para un país como Biranoba que tenía que iniciar el entrenamiento de
guerreros mágicos desde cero, un presupuesto más grande era necesario.
「¿El actual Biranoba tiene el poder nacional para
invertir un enorme presupuesto en entrenamiento mágico…? Este país ciertamente
se ha vuelto rico económicamente, pero ¿los ciudadanos aún accederán a tu idea
cuando oigan que los fondos de guerra subirán tres veces más de pronto? ¿Qué
hay de la familia real?」
「Habrá una recaudación de fondos y obtendré el
entendimiento de los ciudadanos. Incluso si no puedo obtenerlo, su apatía puede
ser suprimida.」
「Lo siento, ¿a qué te refieres con eso?」
「Algo más que esto será considerado un secreto concerniente
al interés nacional de Biranoba— Sin embargo, si aceptas mi oferta, no dudaré
en hablar con libertad sin contener nada.」
Dante,
quien había detenido su mano que estaba tocando su copete y riendo, recobró su
seria expresión de pronto y añadió.
「—También quieres saber lo que estoy pensando, ¿cierto?
¿No viniste desde Amaddo hasta aquí por nada?」
「……」
Karin
frunció sus ojos y pincho la punta del dedo del largo guante que usaba en su
mano derecha. Luego vertió poder mágico en poco a la cresta mágica escondida
debajo de guante.
En
ese momento, oyó el grito de Petra por primera vez en su vida y contuvo su
aliento.
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Como
la mansión de Dante estaba originalmente distanciada de Buruan, tendía a
ponerse silenciosa de pronto cuando el día se ponía oscuro, pero las cercanías
de la Casa Valiente independiente a la residencia eran aún más rústicas. No había
casas privadas en sus alrededores y sin señales de vida excepto la ocasional
fiesta de búhos.
Tarde
en la noche, Valeria quien había salido de la mansión en secreto y llego aquí
mientras es llevada por Bettina, miro arriaba hacia la cima de la colina desde
dentro del bosque y frunció el ceño.
「…Si es desde aquí, seremos visibles por completo por
un rato hasta que lleguemos a esa residencia.」
「Lo he llegado a entender un poco.」
Dimitar
quien estaba remplazando el cartucho trasero de Bettina dijo con sarcasmo.
Aunque juzgando por su expresión, Dimitar probablemente no intento burlarse de
Valeria, pero él solo estaba diciendo la verdad.
Incluso
si era el caso, no cambiaba el hecho que se sintiera ofendida.
「……」
Pasando
por alto el enojo el cual estaba saliendo dentro de ella con un pequeño estornudo,
Valeria miro a la residencia que fue construido en la cima de la colina otra
vez. Aunque su escala era pequeña comparado a la casa principal, si fuera a
considerarse que fue construida para un anciano para descansar, podía decirse que
tiene una extravagante estructura. De lo que Karin había dicho, caminando por el
muro y alrededor del perímetro de esa tierra que le tomó 20 minutos a pie.
También parecía ser un jardín de tamaño justo.
「Incluso si alguien estaba adentro, es ahora que se
vaya a dormir, ¿cierto?」
「Hay una historia de una pareja de cuidador y sirviente
que usualmente se quedan, pero no sé si sea cierto.」
Dimitar
quien había terminado de cambiar el cartucho, palmeó su cabeza y suspiro.
「¿Eso significa que hay alguien más?」
「No tengo una prueba definitiva, pero es probable que
sea así.」
「¿Quién?」
「¿Después de eso te has encontrado en alguna parte con
ese gran hombre que nos saludo?」
「¿Huh?」
「Ese tipo duro llamado Salomon Puyol. El que está a
cargo de la seguridad.」
「Ah… ahora que lo mencionas, no lo he visto para nada.」
「Solo lo he visto a veces, tres durante el día. No lo
veo una vez el día se pone oscuro.」
「¿Hay algo malo con eso?」
「Probablemente es un antiguo mercenario o soldado de
algún lugar, y había obtenido algo de experiencia.」
「¿A-Así es eso?」
「Lo entenderás si lo ves de esta perspectiva… ¿Crees
que es fácil salirse de una mansión con tal hombre de guardia? Fue lo mismo
cuando Rudbeck-geika y yo investigamos la instalación militar. Fue fácil ir y
venir que fue anti climático. ¿Por qué
eso es así?」
「Eso es—」
Incluso
si se le pregunta por qué, solo podía responder que no era posible ya que
habían salido de la mansión así por así. Sin embargo, Dimitar golpeó la nariz
de Valeria quien estaba por continuar con un “¡Mugiyu!” y forzadamente
interrumpió sus palabras.
「¡Bumu!」
「Hay tres posibilidades. Ese hombre dejo la guardia de
la mansión, o no estaba en la mansión desde el inicio—」
「¿Qué hay de la que falta?」
「Te quedarás en espera aquí.」
Dimitar
enrolló su manga derecha sin mencionar la tercera posibilidad.
「—En el peor de los casos, el papel de llevar a Su
Eminencia al hombro, quien sueña con una vejez feliz y escapar, es tuyo.」
「Um~ … Espera—」
「Soporta ese fenómeno físico (salir a orinar) tanto
como puedas.」
「¡N-No me jodas…!」
「Vamos, Su Eminencia」
Dimitar
sin corazón dejo a Bettina atrás quien probablemente había lloriqueado bajo su
visor, y empezó a caminar al frente.
「¡No tomes el mando! Lo dije muchas veces, pero el
superior es—」
「No pierdas el tiempo, superior.」
「¡Esto es frustrante…!」
「Estás siendo ruidosa.」
Hace
poco que termino el bosque y la gentil colina continuaba desde allí. Incluso
bajo la leve luz lunar, era bastante claro que un innumerable número de pétalos
blancos estaban cayendo en la ladera que fue cubierta en un verdor de tréboles
blancos. Excluyendo eso, casi si había arboledas, y no era un lugar para
esconderse en un momento crítico como se esperaba.
「—Hey」
Valeria
le pregunto a Dimitar en voz baja.
「Justo ahora dijiste que hay tres posibilidades. Explica
la última.」
「¿No entiendes…?」
「¿Eh?」
Dimitar,
quien estaba forzando sus ojos y mirando directo a la residencia, giró su
cabeza levemente y miró a Valeria.
「¿De verdad no entiendes?」
「Eso—」
Valeria
quien había pensado “¡Me compadecieron otra vez!” casi grita al instante, pero
dada las circunstancias, también estaba el hecho que ella no entendía, y de
alguna forma restringió su enojo.
「¿Puedes explicarte con detalle para futuras
referencias, Richternach-kyou…?」
「Fun.」
Dimitar
removió el broche de la vaina y sacó su espada.
「—La tercera posibilidad es que haya pasado por alto
nuestros movimientos a pesar de vernos.」
「¿Pasar por alto…?」
「Pensándolo bien, la primera posibilidad no existe ya
que un hombre no escaparía de su trabajo. Por lo mismo, no tiene sentido que la
persona a cargo de la seguridad deje la mansión, así que la segunda también
queda fuera. No se saltó su trabajo ni estaba ausente, aunque no protegía la
mansión. Es decir, deliberadamente creó la oportunidad para que nos movamos con
facilidad.」
「¿Eh…? ¿Puede ser que Dante-san también se ha dado
cuenta de lo que intentamos hacer…?」
「Claro.」
Dimitar
respondió de vuelta.
「—Aunque estaría bien si solo fuera Rudbeck-geika y
Petra, ya que en primer lugar son parientes. Sin embargo, tú, Cosa Rosa y yo
nos aparecimos al mismo tiempo. Si es solo un hombre astuto, de inmediato
habría supuesto que no vinimos por el propósito de turistear. Se nos permitió
movernos con facilidad.」
「P-Permitir movernos con facilidad… ¡¿Estabas
consciente de eso?!」
「Petra y Rudbeck-kyou debieron haberlo notado también. Tú
y la Cosa Rosa parece que no lo notaron.」
Aunque
Dimitar respondió con calma, Valeria no pudo mantener su compostura. Si la
conjetura de Dimitar era cierta— Si Dante fue consciente de ello— Entonces Karin
y Petra quienes se habían quedado en la mansión estaban en peligro. No había
país que tolerara espías extranjeros.
「¡¿Por qué no me dijiste algo si lo habías entendido
todo?!」
「Fue Rudbeck-geika quien dijo que se quedaría en la
mansión… En resumen, ella concluyo que era mejor para nosotros ocuparnos de
esta mansión. Incluso si son capturadas en el peor caso, si son esas dos, no
serán asesinadas.」
「Pero—」
「Tampoco son tan incompetentes y no se dejarán atrapar
fácilmente… Basados en esa premisa, solo podemos tomar acción. Si aún quieres
decir más, regresa a la casa de la Cosa Rosa. Iré yo solo.」
「¡N-No dije que no iré! Para empezar… ¡Dije esta mañana
que dejaras de ir por tu cuenta sin mí!」
「Sí ese es el caso, vámonos rápido.」
Dimitar
cubrió a Valeria con el manto que estaba usando, y además, la llevó en su
espalda.
「¡Hiwa!」
「No hagas ruido por todo, eres muy ruidosa.」
Dimitar
llevo a Valeria en su espalda y corrió al bosque.
Dimitar
cuya habilidad física estaba fortalecida por magia que era más rápida que
cualquier caballo rápido. Difícilmente había persona que pudiera percibir a
Dimitar, quien se había metido en la oscuridad de la noche y estaba corriendo a
gran velocidad— mientras usa un manto negro también— con sus meros ojos.
Dimitar
corrió hasta la colina, se aferró al muro que encierra los alrededores de la
residencia y murmura en un tono muy calmo.
「Es un muro bastante alto... ¿De verdad es una mansión
construida para la recuperación de su Baa-san?」
「Luce perfecto para encerrarte cuando algo sucede. Ya
que está solo en la cima de la colina, es bueno para disponer de un buen punto
de vista de cualquier lugar.」
「Incluso si creo que fue construido aquí con esos
factores en consideración, si es ese hombre, no es nada extraño entonces.」
Dimitar
miro a Valeria sobre su hombro.
「…Oi, trata de poner tus pies en mis hombros y párate.
¿Puedes mirar el interior desde arriba del muro?」
「Eh, ¿eso está bien?」
「Te dije que lo
hagas. No tienes que preocuparte.」
「Sabes… Puedo soportar lo que sea si es por esta misión,
pero aun así, me irritas.」
「Cesa tu irracional falsa acusación.」
「Hai hai… No veas arriba, ¿bien?」
「Tranquila, incluso si te desvistes por gusto y te
subes a mis hombros. En primer lugar, no tengo interés en el trasero o
entrepierna de una pequeña chica.」
「¡No digas entrepierna!」
Valeria
colocó sus pies en ambos hombros de Dimitar y se paró tímidamente.
「Yo…」
Parándose
de puntillas mientras sus piernas temblaban con un “puru puru”, la cara de Valeria
apenas apareció sobre el muro. Luego apretó tus ojos y supervisó el área.
「¿Qué tal…?」
「Puedo ver una luz…」
「¿Hay alguien ahí? ¿Aún no se han dormido?」
「Más bien, hay muchas luces y se están moviendo…」
「Pueden ser los guardias del lugar… Como pensé, es
diferente de lo que oí.」
「Aun así— La Casa Valiente en verdad es rica. ¿No tiene
muchas mansiones así aquí y por allá? ¿Tan rentable es el trabajo de viceprimer
ministro?」
「Quién sabe. Sin embargo, la Casa Valiente es una
Antigua Familia que posee territorio no solo dentro de Biranoba, sino en Amaddo
y Diruma. Si lo manejan bien, el mantenimiento es posible.」
「¿Por qué los nobles de Biranoba tienen territorio en
Amaddo?」
「Cuando
Biranoba cedió territorio a Amaddo, parecían haber evitado que sus propiedades
de territorios sean confiscadas. Por eso, el territorio de la Casa Valiente se
mantuvo dentro de Amaddo como una clave.」
「He— Aunque son parientes, es bastante diferente de la
Casa Karin.」
Valeria
saltó de los hombros de Dimitar con un “hyoi” y suspiro.
「—El Ojii-sama de Karin era una persona con una
preferencia por gastar dinero a manos llenas, y acabo con la Casa Rudbeck en
nada. Karin la pasará mal reconstruyéndola. Eso me incluye, por supuesto. 」
「¿Así es eso?」
「Cuando nos reunimos al principio… cómo debería decirlo,
tuvimos una seria relación porque Karin es así. Como sea, nuestros alrededores
eran todos de rivales aspirando a ser una Dominas— Sin embargo, una vez Karin y
yo nos dimos cuenta que estábamos aspirando a ser una Dominas de alguna manera
liquidamos los créditos de las generaciones de nuestros abuelos que se nos dio,
sentimientos de afinidad brotaron en cambio, y llegamos a buenos términos—」
「Oi.」
Dimitar
interrumpió el comentario de Valeria y miro hacia la mansión.
「Por cierto, ¿es una conversación solo de ti…?」
「¿Eh?」
「Pensé que era información que sería útil para
investigar esta mansión y te escuché, pero es solo una vana conversación,
quédate callada de una vez.」
「¡E-Eso no fue bueno!」
「Tu vida privada no es mi preocupación. Así como tú no
estás interesada en mi vida privada.」
「¡¿Qué con eso?!」
Aunque
Dimitar dijo eso, Valeria de hecho estaba un poco interesada en su vida privada;
más que su vida privada, era la historia de su niñez.
Luego
que completó su primer trabajo en Seriba, oyó de Lucius— la historia donde
Dimitar estaba por ser asesinado por su madre biológica cuando era niño, y
había estado en su mente desde entonces.
Aunque
no pregunto por ello, de acuerdo a los rumores reunidos por el padre de
Valeria, parecía que la madre de Dimitar iba a hacerlo como un doble suicidio
con su hijo. La mansión donde el padre y el niño vivían también fue incendiada;
¿qué tipo de circunstancias fueron para que Dimitar sea rescatado? Luego,
Orvieto tomó la custodia de Dimitar y lo crío junto con Lucius como hermanos.
Si
todo fuera su espíritu de curiosidad, pero Valeria quería saber más del asunto.
Sin
embargo, no había forma que pudiera preguntar tales cosas en esta situación.
Solo podía ser ignorada incluso si preguntaba, y también era irritante
someterse a Dimitar solo para decírselo.
「¡Santo Dios!」
Valeria
con exagero peinó su rubio cabello con matices naranjas, y dijo con cara de
enojo.
「—¡Aunque pensé expresamente en llevarme bien contigo
ya que Lucius-sama me había pedido hacerlo así!」
「Puedes ignorar lo que Lucius dijo. Ese chico es mucho
de esas cosas.」
「¡No me ordenes nada! ¡En primer lugar, no te refieras
a Lucius-sama como ese chico!」
「Está en mí cómo llamar a ese chico, y tampoco hay
necesidad de llevarme bien contigo. Es suficiente si solo damos lo mejor en
esta misión.」
Dimitar
le bajo al enojo de Valeria y miro al muro otra vez.
「—Vamos.」
「¡Hiaa!」
Llevando
a Valeria en su hombro, saltó al muro y yacio en el suelo con un “petari”. Como
la mayoría de cuartos no estaban iluminados, el vasto jardín fue envuelto en
pesada oscuridad de la noche. Aunque los alrededores apenas eran visibles
debido a la luz lunar, nadie pudo notarlos si mantenían su postura baja y
contenían sus alientos.
Mirando
a las luces moviéndose sin rumbo en la oscuridad, Dimitar murmuro en voz baja.
「No estoy seguro cuántos guardias hay, así que forzar
nuestro camino es la última medida. Entraremos desde arriba como la última vez.」
「E-Entiendo.」
Valeria
asintió e inicio a moverse a agachada detrás de Dimitar.
「Es vasto.」
El
edificio no era muy grande, pero había un vasto jardín. Incluso cuando la
persona en recuperación no estaba aquí ahora, un jardinero parecía tenerle
mantenimiento regular mientras una fuerte fragancia a flores salía de alguna
parte.
Una
vez la luz de una linterna desapareció, Dimitar detuvo sus pies, llevando a
Valeria en sus hombros otra vez y saltó.
「…Encontremos la evidencia rápido y salgamos.」
Golpeando
la cima de una estatua que decoró la gran balanza, Dimitar saltó otra vez y se
movió al balcón del segundo piso y fácilmente cogió el cierre de la ventana.
「Tú—」
「Lo dije muchas veces, pero no he robado. Seas tú o
Rudbeck-geika, ¿es el rasgo de una Dominas o es tratar a las personas que son hábiles
con sus manos como ladrones?」
「¿Karin también dijo eso?」
「Más o menos.」
Dimitar
se arrastró al interior oscuro, superviso el área y desfundo su espada por el
momento.
Ese
cuarto el cual tenía una buena vista de su balcón podía ser originalmente el
cuarto de la señora quien se estaba recuperando de su enfermedad. Parecía que
se convirtió en un almacén cuando Dante vino luego de su muerte. Más que una cama,
un escritorio y un gabinete alineados con botellas de sake fueron colocadas en
una condición cuidada.
「…Revisa los cajones de por allá.」
「¿Ha? No hay forma que armamento pueda ser mantenido
aquí.」
「No solo estamos buscando eso, sino pruebas para
localizar el paradero de Nereida... Cartas o algo, quiero documentos que
muestren el enlace de Dante y Nereida.」
「Ha~a… ¿crees que la evidencia puede encontrarse
convenientemente?」
「Lo que pensemos que sea, es irrelevante. Lo que sea,
búscalo. Es nuestro trabajo.」
Valeria
soltó un suspiro mientras abría los cajones de los escritorios en cambio.
「Aunque pase grandes dolores para convertirme en una
Dominas, los trabajos que me asignan solo parecen ser de espía o un lamentable
ladrón.」
「¿Te indigna?」
「No digas algo como “déjalo si te indigna”. No dije que
me indignara.」
「¿Qué es entonces?」
「Es diferente a la realidad, o quizás debería decir—」
「En resumen, como las chicas que asistieron a esa
fiesta, ¿crees que sería bueno si una Dominas le ora a Redountra durante todo
el día?」
Dimitar
quien había investigado bajo la cama con la vaina de su espada mostro una desagradable
sonrisa y se paró.
「…Eres una Dominas como también un Inspector de Grado
Alto de Amaddo, y también se me confió con ambos roles de ser tu Hiera
Glaphicos y un Inspector. En ese caso, tenemos que obedecer las órdenes de
arriba. Es el servicio de la corte.」
「No entiendo el papel de un inspector. En primer lugar,
¿qué implica ese trabajo?」
「Investigaciones internas y externas.」
「¿Investigación? ¿En específico qué?」
「No hay regulaciones específicas. En todo caso, cada
evento que concierna al interés nacional de Amaddo es objetivo de
investigación… Es por eso que puede ser interpretado tanto como uno guste.」
「…Dicho eso, ¿aprendiz de todo?」
「Decir por decirlo, es así, pero solo el Rey y sus
apoderados pueden ordenarles a Inspectores de Alto Grado. Básicamente, no hay
necesidad de seguir instrucciones de personas más que ellos. Deberías actuar
con un poco más de consciencia en la gran autoridad que se les da a los Inspectores
de Altos Grados.」
Habiendo
dicho eso, Dimitar instruyó a Valeria en esto y aquello, y ocasionalmente
golpeaba su trasero. Aunque quería decir “quién es al que le falta
consciencia”, sabía que sería lógicamente refutada si decía eso, por eso
Valeria se mantuvo callada.
「¿Hm…?」
Afirmando
que abrir todos los cajones era una labor inútil, Valeria notó el pequeño
cuchillo que fue colocado en el escritorio junto con una botella de tinta y un
pincel. Su estructura no podía ser descrita como especialmente inusual, pero
algo se sintió fuera de lugar.
「…Ah, ya veo.」
「¿Qué pasa?」
Dimitar
cerró el gabinete de la puerta y miro atrás.
「Ese cuchillo—」
Valeria
recogió el cuchillo con sus dedos y se lo mostró a Dimitar.
「Es bastante simple y plano…」
「…Es extraño.」
「Un. Pensé que sería más llamativo si es usado por
Dante-san…」
「Se aseguraría de usar algo apropiado a su estatus
social.」
De
hecho, los muebles y utilidades que fueron colocados aquí eran solo cosas de
beneficio de un gran noble. La pluma también estaba hecha de colas de plumas de
un raro macho serpentino sagitario.
Comparado
a esos, ese cuchillo era muy— dicho a la buena, simple y plano; dicho a la
mala, era plano. Era inusual como la posición de un noble.
「……」
Valeria
sacó el cuchillo gentilmente y miro de cerca su hoja.
「¿Esta es… una cresta mágica?」
Notando
leves y complejas líneas cruzando la hoja, Valeria murmuro eso.
「Déjame verlo.」
Dimitar
sostuvo el cuchillo que había recibido de la mano de Valeria.
Cuando
Dimitar vertió su poder mágico, la cresta mágica grabada en la hoja del
cuchillo brillo con un ” ¡boya~!”, y una pequeña flama se encendió de su punta.
「Luce útil para encender fuego en una fogata…」
Dimitar
de inmediato extinguió la llama y río.
「Es un artículo básico… Probablemente fue usado cuando
Nereida se promocionó a Dante, ya que es más fácil entender lo que la
ingeniería mágica puede hacer al mostrar un artículo real. Quizás lo engatuso
al decirle que puede crear más cosas como esta y tantas como guste su asiste—」
「Pero ¿no es como evidencia?」
「Busquemos en el sótano.」
Dimitar
desfundo el cuchillo, se lo lanzo a Valeria de vuelta y tranquilamente abrió la
puerta para encarar el corredor.
「Si hay armamento siendo guardado aquí, entonces tienen
que estar en el sótano. O si no hay sótano, estarán en el primer piso.」
「¿Por qué?」
「Piensa en su altura.」
Moviéndose
tranquila y lentamente por el corredor inhabitado, Dimitar habló mientras
descendía las escaleras.
「—Dicho simple, las armaduras y espadas son masas de
metal. Si esas cosas se mantienen en grandes cantidades en ese tipo de cuarto,
el suelo colapsaría desde arriba. En ese caso, tienen que estar en un espacioso
y estructurado cuarto donde su piso, muros, cielo y todo estén cubiertos con
rocas.」
「Eso significa—」
El
primer piso parecía ser parte de la entrada del salón, unos cuartos de invitados
y un comedor que servía también como una sala, pero tanto como podía ver por
ojear, solo fue decorada con unas cuantas armaduras y espadas como piezas de
arte.
「Hay un almacén subterráneo para guardar comida en
nuestra mansión también…」
「Eso supongo.」
Había
una escalera que lleva al sótano de la mansión al costado de la cocina. Sin
embargo, incluso el interior de la mansión estaba completamente limpio, estaba
polvoriento desde ese punto en adelante. Debido a eso, era claro que unas
cuantas pisadas permanecían.
「Parece que a los sirvientes se les prohíbe ir más allá
de aquí.」
「¿Qué deberíamos hacer…?」
「¿Hay un idiota que vendría hasta acá y luego volver
sin revisar nada?」
「¡Ya lo sé! ¡No es a lo que me refiero!
「Estás siendo ruidosa.」
Dimitar
reprendió a Valeria quien había alzado su voz y observo todo el corredor.
No
parecía tener otra escalera que llevará al sótano además de esa. En ese caso,
si los guardias los notaban mientras estaban descendiendo al sótano, se verían
por completo como ratas atrapadas. Si esa salida era incendiada, estaría
envuelta en humo y fácilmente podía volverse una trampa para el inframundo.
Era
molesto admitirlo, pero Dimitar también debió haberse dado cuenta ya que
Valeria lo había notado. Aunque Dimitar usualmente tomaba decisiones rápidas,
el hecho que no intentara descender de inmediato cuando encontraron la escalera
podía ser porque no podía descartar la posibilidad y estaba perplejo.
Valeria
saco el cuchillo que encontró antes, encendió una pequeña flama, tomó la
iniciativa y empezó a descender por la escalera.
「Oi.」
「No tenemos el tiempo para preocuparnos, ¿verdad?
También está el tema de Karin, ¿no es mejor terminar rápido? 」
「…Maa, es mejor que perder el tiempo dudando.」
Aunque
se había decidido, Dimitar murmuro y siguió a Valeria.
*************************
Si
esta mansión fue construida puramente como un lugar para que un anciano
descanse y fue cambiado por consecuencia a un lugar de secreta conspiración,
luego este sótano podía haber sido preparado como un almacén para almacenar
comida y vino de reserva.
Si
la mansión estaba localizada en las afueras de Buruan, incluso si las
provisiones de comida se terminan, de inmediato podían traerlas del mercado,
pero era difícil para esta mansión la cual estaba distanciada de la ciudad.
Este almacén debía ser bastante vasto para almacenar una gran cantidad de
comida para prepararla para el momento cuando algo pasara.
Aunque
para apoyar la conjetura de Dimitar, la escalera rocosa era lo bastante amplia
para que un hombre de gran porte se moviera mientras llevaba un barril de vino
y un saco de vino.
「—Richternach-kyou.」
Valeria
quien había descendido por la escalera antes miró a Dimitar con una expresión
algo tensa.
Frente
a la chica estaba una reforzada puerta protegida con un cuadro de hierro y
ribetes. No parecía tener un cerrojo, sino una pequeña ventana unida con
grilletes de hierro atravesaba la puerta al nivel normal.
「……」
Quizás
Valeria pudo haber recordado el incidente en Seriba. Allí, las crestas mágicas
de Valeria fueron eliminadas, la capturaron y casi era privada de su castidad.
No era extraño que ese miedo el cual había sentido dentro del oscuro almacén sea
como un malestar incluso ahora.
「Puedes volver arriba y vigilar si es que no te sientes
bien.」
「¿Huh?」
「Un trauma mental es algo problemático. Al parecer,
muchos tipos trataron de entrar a la fuerza y cometieron errores.」
「¿A qué te refieres…?」
「¿No te está dando miedo entrar al sótano porque
recordaste el incidente en Seriba?」
Como
la observación de Dimitar había dado el blanco, la cara de Valeria se tensó y
sus labios se agitaron.
「Ya que soy un hombre, solo puedo imaginar los
sentimientos al congelarte del miedo cuando tales cosas aparecen, pero no es
algo vergonzoso. Probablemente sea normal sentirse de esa manera.」
「No quiero tu simpatía…」
「No intento simpatizar contigo. Aunque, si aun así te
llevo, no serás muy útil y solo incrementarás mi carga. Si ese es el caso, no
hay problema en moverme solo.」
「¡Tienes prohibido moverte solo! ¡Lo he dicho tantas
veces, ¿cierto?!」
「Entonces no hagas esa cara de que vas a llorar en
cualquier momento.」
「¡N-No es como que vaya a llorar solo porque sí!」
La
cara de Valeria se sonrojo profundamente y abruptamente golpeó los hombros de
Dimitar con su pequeño puño. No pensó que fuera bueno golpear a una persona
para esconder su avergonzamiento, pero ahora no era malo que pudiera mover su
paralizado pie.
「Te puedes romper el hueso si golpeas con el puño. Si
quieres golpear no importa qué, entonces usa tu palma.」
Cuando
Dimitar había desempolvado el área de sus hombros, tomó el mango circular de
hierro y abrió la puerta.
「No parece que haya alguien adentro…」
Había
un amplio espacio como Dimitar esperaba, aunque aproximadamente la mitad de
ello fue ocupada por cajas de madera que fueron apiladas cerca. Colocado en la
mitad del área cerca a la puerta, había un largo escritorio y un librero que va
desde el suelo al techo que era inapropiado para un almacén de comida.
Caminando
con calma, Valeria prendió una llama en una lampara que estaba colgada en el
muro, y apretó sus cejas mientras se daba cuenta de algo.
「Este escudo—」
Similar
a las pinturas que producían la hermosura de una sala de nobles, este almacén
fue decorado con escudos alineados en intervalos. Los escudos, los cuales
reflejaban la iluminación de las lámparas y brillaban en plata pura, eran
pequeños, pero un patrón familiar fue gravado levemente en su superficie.
Dimitar
golpeo esa superficie con “kotsun” y río.
「Es simple, pero obviamente es una cresta mágica… Y un
gran número de ellas.」
「¿Qué hay de la caja de por allá?」
「Quizás espadas y escudos, supongo. Veré el escritorio.」
Dejando
a Valeria revisar el contenido de la caja, Dimitar empezó a investigar el
escritorio y el librero.
Dentro
del jarrón el cual fue colocado en el escritorio lo único eran remanentes de
una flor marchita con la mayoría de su agua evaporada. En contraste, no había
polvo acumulado en el escritorio o silla. Cuando juntas esos hechos y piensas
en ello, podía haber sido al menos un mes o así desde que una persona entró a
este almacén.
Volteando
las páginas de un libro que había sacado del librero con un “para para”,
Dimitar le pregunto a Valeria.
「¿Encontraste algo…?」
「Espadas y lanzas… y armaduras aquí.」
「Lo encontraste, ¿huh?」
「—¿Eso significa que Nereida hizo su investigación hace
un buen rato?」
「Quién sabe.」
「Digo, no deberían haber tantos tipos de armas y
armaduras incluso en Amaddo, ¿cierto? ¿No le tomaría una razonable cantidad de
tiempo juntar tantas de estas cosas?」
「Es cierto…」
Dimitar
bajo sus hombros y miró a Valeria.
A
los pies de la asombrada chica yace una espada de tamaño corto y la coraza que
al parecer había sacado de la caja. Ambas fueron teñidas con resplandor como
esos escudos que estaba alineados en el muro.
「No estoy seguro si es un adecuado ejemplo ya que no
soy un experto… pero parece que es necesario darles un enchapado con alguna
aleación especial para grabar las crestas mágicas en los escudos y espadas.」
「¿Enchapado?」
「Sí… Es posible dibujar crestas mágicas en la
superficie de esa aleación de la misma forma como se ha hecho en el cuerpo
humano.」
Dimitar
sacó solo la mitad de Jagieruka y le mostró a Valeria la hoja de su espada.
「—En realidad, ayude al Jefe Ingeniero a grabar estas
crestas mágicas. Puedo modificarlas hasta un cierto punto.」
「Entonces, ¿producción en masa será fácil mientras esa
aleación pueda ser preparada?」
「Puede ser no el caso. También hay unos cuantos
guerreros mágicos en este país.」
「Así es eso… ¿la prueba del gravado de crestas mágicas
toma tiempo?」
「Eso es. Hay unos cuantos guerreros mágicos que puede
dibujar a precisión crestas mágicas. No creo que haya ese tipo de valioso
talento en un país con magia sin desarrollar. Es probable que Nereida hubiera
pasado tiempo para completarlos. Aunque es raro que dicha persona no esté aquí.」
「Fu~n」
Valeria
quien se había sentado en la caja saltó con un “hyoi” y recogió una espada.
「—Al contrario, ¿es más fácil de reunir todo esto si es
Amaddo?」
「Sí… Pero eso si las condiciones de la armada
proveyendo un grandioso presupuesto al
Jefe Ingeniero y la cooperación de la Academia Mágica están bien
cimentadas.」
Juzgando
por su apariencia, las crestas mágicas las cuales eran gravadas en las espadas
y armaduras aquí eran más simples cuando los comparas a Jagieruka. La Jagieruka
tenía precisión y complejas crestas mágicas, y varias crestas mágicas podían
ser usadas por la voluntad de Dimitar, pero cada armamento aquí podía solo usar
una cresta mágica. Si Jagieruka era un objeto único hecho a la medida, entonces
sin duda eran objetivos producidos en masa.
Dimitar
siguió revisando el librero y descubrió un manojo de papeles insertados en los
libros, frunció sus ojos.
「No sé si esto es dibujado por Nereida… Pero encontré
los planos de esa persona.」
「¿Planos?」
「Los borradores de diseño de las crestas mágicas.
También hay escritos. Ya sea la caligrafía de Nereida, si las llevamos y
volvemos a mostrárselas al Jefe Ingeniero— 」
Dimitar
extendió la pila de papeles y cosas dentro de su chaleco. Notó cosas como
granos de arena cayendo en pequeños trozos de luz y miro al techo.
「Volvamos…」
「¿Ha?」
「Hay señales que alguien se estaba acercando.」
「¡No jodas! ¿Lo notaron?」
「Quizás la luz de
la lámpara se ha salido del hoyo usado por la ventilación. Escapemos antes que
la escalera sea bloqueada.」
「H-Ho—」
「Síganme…」
Dimitar
recogió la espada y el escudo que yacían, y se dirigió a la escalera.
「¡…! ¡Allí están, agárrenlos!」
Tan
pronto como corrieron por el almacén subterráneo, una voz vino desde arriba de
las escaleras. A penas confirmando a su oponente, Dimitar blandió la espada
mientras concentra su consciencia en su mano derecha.
「Ese tipo de sentimiento, ¿supongo?」
Una
vivida flama surgió del frente desde la punta de la corta espada. Cuando la
lanzó al escudo en su mano izquierda, el violento viento que se produjo avivo
la llama. Se volvió un viento caliente que caía desde arriba y engulle a los
guardias.
「¡Owa!」
「¡Gyaa!」
「Eres una molestia…」
Dejando
de lado a las guardias quienes fueron envueltos por llamas y corrieron tratando
de escapar, Dimitar sostuvo el escudo y corrió por las escaleras con Valeria
sin detenerse. Aunque los guardias parecían estar equipados con esas espadas y
escudos iguales, ¿le tenían miedo al fuego en un espacio confinado o no podían
controlarlas? No usaron magia.
「Esos juguetes eran valiosas piedras antes de ser
lanzadas.」
Derribando
al guardia ante él con su impulso, Dimitar saltó al corredor.
「Di… ¡Richternach-kyou!」
「Si es problemático, está bien no usar el camino del
techo cada vez…」
「No es eso—¡En frente! ¡Al frente!」
Valeria
señaló al otro lado del corredor. Varios soldados podían verse ir contra ellos
y lanzando flechas.
「No uses magia... Preserva tu poder mágico ya que tu
turno ya viene.」
Dimitar
le recordó a Valeria con un murmuro y sostuvo en lo alto el escudo. El viento
el cual brotó una vez reflejo las flechas que fueron disparadas.
「Ciertamente, incluso si una persona ordinaria se hace
capaz de usar magia, los esfuerzos de esa persona necesitan dominarse.」
Dimitar
arrojó la espada corta mientras decía eso con frialdad, y antes que los
soldados pudieran lanzar sus flechas, acortó la distancia y desfundo la
Jagieruka.
********************
Cuando
Valeria recogió la espada corta y se la alcanzo, Dimitar ya había cortado a
todos los soldados.
「……」
Aunque
tuvo varias experiencias cercanas a la muerte en Seriba, tuvo que acostumbrarse
al rojo de la sangre y su olor. Mientras trataba de no mirar a los guardias derrotados
tanto como es posible, Valeria le entrego la espada a Dimitar.
「Um… toma.」
「No la necesito. Solo sostén esto por ahora.」
Dimitar
presionó el escudo contra Valeria en lugar de la corta espada, llevo a la chica
de la mano y corrió fuera de la mansión.
La
profunda oscuridad la cual había envuelto los alrededores de la mansión hace
tiempo atrás, ahora fue expulsada por llamas de antorchas y hogueras, e inicio
a desaparecer. Las oscuras sombras estaban pasado al costado y difícilmente
había lugar para esconderse.
「¡Allí están!」
Los
soldados llevando antorchas notaron que el par había salido de la mansión y
corrieron. Parecía que también estaban equipados con escudos y espadas.
「Nos retiramos.」
「¿Eso está bien? ¡¿Qué hay de la evidencia?!」
Hay
armamento el cual estaba hecho por usar ingeniería mágica. Aunque estaban allí,
no había prueba que era Nereida quien los desarrollo. Tampoco hay evidencia de
Nereida y Dante teniendo una relación de cooperación, mucho menos evidencia de
secreta asistencia de la revuelta de Hokon en Seriba.
「A menos que haya una fuerte evidencia, Amaddo no puede
juzgar a Dante como un criminal. Siendo así, Dante no es una persona de Amaddo,
sino de Biranoba, y también es el Viceprimer Ministro. Por el momento, me di
cuenta que Dante parece ser la mente maestra, sabía que no nos guiamos por
simple evidencia.」
「Espera—」
Dimitar
levanto a Valeria, llevada en su hombro izquierdo en un estado donde estaba
mirando atrás, y corrió.
「Si eres tú, puedes usar ese escudo… Ten cuidado de las
flechas.」
「A-Aunque hay evidencia… ¡¿sabías que era inútil?!」
「Es lo que intento decir.」
「¡¿Y por qué vinimos aquí?!」
「Aunque no puede ser una evidencia, pensé que Dante
sería desafiante y hablaría si le lanzábamos el objeto ante él y lo presionábamos…
Maa, no tenemos que pensar en el uso de la evidencia obtenida. Dije esto muchas
veces, pero nuestra misión es reunir evidencia. No es como si viniéramos aquí
para perseguir y arrestar a Dante.」
Ciertamente,
lo que debían pensar ahora era quitarse a sus perseguidores, regresar a la
mansión de Dante, y juntarse con Karin.
「—No te muerdas la lengua, Costacurta-geika.」
Advirtiéndole
a Valeria, Dimitar evadió el ataque del guardia quien vino a apuñalar con una
lanza, y golpeo el suelo.
「Gugiu—」
Pisoteó
la cabeza del guardia, saltó a la rama de un árbol de naranja, y luego saltó
otra vez al muro desde allí. Cuando los guardias alzaron sus voces de
admiración y sorpresa a esa agilidad, Valeria ya estaba al otro lado del muro.
「Prende el fuego.」
「¿Huh? ¿Qué?」
「Confinaré a tus perseguidores. Si enciendes un poco de
fuego con ese cuchillo y lo avivas, será suficiente.」
「¿E-Eso está bien? Todo el lugar puede volverse un mar
de llamas, ¿sabes?」
「Está bien, así será.」
「¿Por qué tienes que decirlo así…?」
「Hazlo rápido.」
「Hai hai.」
Aunque
Valeria frunció el ceño, sacó el cuchillo, y extendió pequeñas llamas las
cuales salieron de su punta la alfombra de tréboles blancos.
「¡…!」
Cuando
levanto su mirada de pronto, vio muchas luces pasar por ellos de la mansión en
la colina. También oyó los relinchos de los caballos y era probable que los
estuvieran persiguiendo con una gran cantidad de personas. Valeria de prisa
sostuvo el escudo de metal y avivo las llamas las cuales se habían encendido en
el oscuro verdor con un vendaval.
「Buen trabajo… Eso nos comprara algo de tiempo.」
Dimitar
miró al mar de llanas producidas en la retaguardia sobre su hombro, y corrió al
bosque donde Bettina estaba en espera.
「¡Cosa Rosa!」
「¡H-Hai! ¡No me dormí-desu, no me dormí-desuyou!」
Bettina
quien se sentaba en la raíz de un árbol de roble saltó del susto.
「—¿Estás bien con tus ganas de ir al baño?」
「¡E-Está bien-desuu!」
「Bien, volveremos y nos reuniremos con Rudbeck-geika.」
Dimitar
coloco a Valeria a quien estaba llevando en sus hombros en la cabeza de
Bachururu.
「Aunque no es la forma de decirlo, actuar
constantemente como un ladrón es aburrido.」
♦♦♦♦♦
Una
mujer usando una bata blanca miro alrededor del interior del oscuro cuarto y
lentamente se sentó en una silla.
Aunque
el cuarto, el cual fue hecho solo de piedra desde el piso al techo, no era
polvoriento, había una sensación de presión que no podía alejarse. Sin embargo,
sentir calma de eso podía ser una enfermedad de trabajo en cierto sentido.
Luego de mirar al vacío cajón y librero, la mujer tiro del puño de su blanca
bata y pulió el lente de su monóculo.
「Quiero que prepares los mismos libros del anterior
laboratorio…」
「Si tienes una lista, los preparare en seguida.」
El
que respondió así fue una mujer que había cubierto y escondido todo su cuerpo
con una bata y capa negra.
En
un lado estaba una mujer usando una bata blanca y sentada en una silla, y por
el otro lado, estaba una mujer vestida por completo en negro y se recostaba a
la pared. Sin cruzar sus miradas entre sí, la extrema pareja de mujeres
intercambiaba palabras mientras encaraban diferentes direcciones.
「—¿Qué es la otra cosa que necesitas?」
「Dinero.」
「Esa es una seria conversación, Master.」
「Aunque lo estoy diciendo con toda la seriedad.」
La
mujer del monóculo pasó una pluma por un papel blanco y respondió sin parecer
interesada. Jefe Ingeniero— Ciertamente, la apariencia de esta mujer puede ser
apropiada de ser llamada como tal.
「—No puedo realizar el experimentos si no hay dinero. Si
no puedo buscar un metal con mejor eficiencia, no puedo superar a Quique.」
「Tú hiciste a Sorubakken.」
「Eso fue hecho por ti, ¿cierto, Medou? Solo creé su
forma como un guantelete. La esencia de las crestas mágicas fue pensada y
grabada por ti… Si Quique fuera quien te ayudo, Sorubakken sería más eficiente.」
La
mujer del monóculo escribió algo en el papel, lo presionó contra la mujer
vestida por completo en negro— Medou, y sacó un kiseru de su bolsillo de pecho.
Al agitarse levemente, una cresta mágica emergió en la parte de pipa de metal.
「En serio, cuando pienso que Quique había visto las
cosas que puse en Biranoba, siento vergüenza y mi cara me arde de la ira.
Incluso si producen objetos en masa, no quiero pensar que solo puedo crear
tales cosas.」
「Aunque, eres capaz de sacar un fondo substancial de la
Casa Valiente debido a eso. Es probable que no tengas problemas para buscar
fondos por un rato… ¿Así es eso?」
「La lista de libros que quiero ahora. Prepáralos
incluso si tienes que robarlos.」
「Muy bien… ¿Qué más necesitas-?」
「Veamos…」
La
mujer se levantó de la silla y se paró en medio del cuarto vacío. Miro al amplio
muro y lentamente empezó a exhalar humo.
「Lo que sea que Quique esté haciendo ahora, quiero el
objeto. Si es posible, esa enorme espada—」
Medou
se lo pidió a la mujer que estaba dudando en hablar.
「¿Qué ocurre…?」
「Iya… En realidad, creo que mi asistencia puede ser
innecesaria para ti.」
「Qué va.」
「En fin, ¿no eres capaz de hacer esa cresta mágica…? Parece
que aún nadie lo sabe.」
「Es lamentable, pero no está diseñado por mí.」
Medou
bajo sus hombros y agitó su cabeza
「Aún ahora… Solo recuerdo un poco las cosas que muchas
personas han olvidado.」
「Creo que es suficiente」
「Siendo así, trabajaré en tu petición. Puede ser
difícil robar la espada de ese chico.」
La
mujer llamada Medou, quien dijo eso y estaba por irse del cuarto, se detuvo.
「¡Ah, olvidé otra cosa!」
「¿Qué pasa?」
「Pinta este lugar de blanco o algo así.」
「¿El muro?」
「Más que escribir pequeñas notas, creo que no hay problema
con llenarlo.」
La mujer señaló al muro y fumó el kiseru.
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