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Side Story 3: Hermanita

 

[¿Acaso eres idiota, Nii-san?]

 

La táctica del profesor para seguir siendo tutor hizo que tuviera que visitar mi cuarto en la capital la mañana siguiente. Ya que he estado lejos por tanto tiempo, supuse que era necesaria una limpieza. A pesar de que el Duque y Tina me dijeron que me quedara en su mansión, les puse un alto ahí.

 

De ahora en adelante planeo quedarme en esta habitación con la que era familiar. Bueno… debí haberlo imaginado. Mi hermana pequeña vino tan pronto como llego a la capital.

 

[¡¿Me estás escuchando?!]

 

[Lo estoy, Karen. Te he hecho preocupar, discúlpame.]

 

[N-No es como que esté preocupada o algo parecido. Solo sucedió que pasaba por aquí hoy. Si, simplemente sucedió. Por nada del mundo creí que estabas aquí porque la academia había sacado la carta de aceptación.]

 

Sí, de seguro estaba muy preocupada.

 

Había planeado ir con ella de vuelta a casa el invierno pasado si me hubieran aceptado como Hechicero de Corte Real. Le mande una carta explicándole lo sucedido, pero ella debió de estar preocupada. Eso, y que mi cuarto estaba muy limpio. Parecía que ella lo limpiaba regularmente— Aunque, también parecía que había estado siendo habitada…

 

[E-Entonces, pensaba que tu trabajo era solo hasta el examen de admisión ¡Así que, ¿por qué continúas trabajando ahí?!]

 

[Pasaron muchas cosas.]

 

[Eso no explica nada. Tienes la obligación de explicarme absolutamente todo a detalle, todo a un minúsculo detalle.]

[El profesor me tendió una trampa. Eso es todo.]

 

[Lo entiendo. Fufu… Puedo probar nueva magia con él, ¿cierto? Creo que Lydia y Lynne me apoyaran en esto, así que las invitaré.]

 

Una gran sonrisa se veía en su rostro. Que miedo. Caren era una belleza, lo cual hacía que la sonrisa en su rostro se viera más intensa.

 

Esfuércese profesor. Claro que no lo ayudaré en esto.

 

[En serio, ¿por qué sigues metiéndote en problemas? Solo lidiar con Lidya es suficiente… y las chicas a las que les enseñaste esta vez también pasaron con altas notas…]

 

[Son muy brillantes, sabes. Ambas Tina y Ellie.]

 

[Espera un momento.]

 

[¿…?]

 

Gire mi cabeza. ¿Dije algo raro?

 

Caren puso su mano en su frente. ¿Un dolor de cabeza?

 

[¿Qué dijiste?]

 

[Que son muy brillantes.]

 

[Después de eso.]

 

[Tina y Ellie.]

 

[¡Eso!]

[¿…?]

 

[¿Por qué… las llamas por su nombre? Nii-san, solo tienes permitido referirte a mí, Lydia-san y Lynne por nuestros nombres. Incluso en las cartas escribías ‘Su Alteza y su maid’ entonces… ¿Por qué?]

 

Esto está muy mal.

 

Caren era una buena niña y mi apreciada hermana pequeña, pero era muy dependiente de mi de una manera diferente a Lidya. Y estaba especialmente alerta hacia las mujeres.

 

A~ah, sus ojos se pusieron rojos.

Acaricie su cabeza gentilmente.

 

[Ambas son mis estudiantes, ¿sabes? Claro que las llamo por su nombre.]

 

[¿Eso es todo?]

 

[Aunque, ellas no hacen un berrinche por cosas pequeñas, como Caren.]

 

[¡Y-Yo no estoy haciendo un berrinche!]

 

[¿Enserio?]

 

[¡L-La verdad, no!]

 

[Ya veo.]

 

[Ah…]

 

Cuando reitre mi mano de su cabeza, sus orejas cayeron abatidas. Su hermosa cola palteada que estaba balanceándose de un lado a otro también cayó.

Es como un libro abierto, como siempre. Es tan linda.

 

Le di un cálido abrazo.

 

[¡¿N-Nii-san?!]

 

[Solo pienso que Caren es tan linda como siempre.]

 

[L-Linda–]

 

Acaricie su cabeza de nuevo, gentilmente, como si fuera un niño pequeño. Caren estaba tensa al principio, pero su cuerpo se empezó a relajar. Su cola también expresaba su buen humor. Y sus ojos rojos se volvieron normales. Eso es bueno.

 

Lo hice por un rato, y luego me detuve. Caren me miro, con sus mejillas enrojecidas.

 

[No es justo, Nii-san.]

 

[Que puedo hacer, eres muy linda.]

 

[¡A eso me refiero!]

 

[Sí, sí. ¿Cómo está mamá y papá? ¿están bien?]

 

[Sí. Aunque te extrañaron demasiado cuando supieron que no volverías.]

 

[Ya veo.]

 

Yo no estaba relacionado a ninguno de los dos, ni a Caren. Yo era humano, y aparentemente, me recogieron cuando era un bebé. Karen y nuestros padres son hombres bestias – de la raza de lobos.

Se dice que los wolfkins solían ser prevalentes por todo el continente, debido a su gran fuerza de pelea, pero después de luchar galantemente en la Guerra del Señores Oscuro hace 200 años— muchos de ellos se dispersaron.

 

Como resultado, incluso entre los hombres bestia y su pequeña población, los wolfkin son muy raros. Con los guerreros y combatientes muertos en batallas por todo el continente, solo los individuos gentiles y dóciles quedaban. Una de las pocas excepciones era mi hermana pequeña. A pesar de que no se comparaba con Lydia, Karen era fuerte. Su esgrima y magia eran de alto calibre.

 

Si tan solo pudiera ser independiente de su hermano… mirándola ahora, no parece ser que sucederá por un tiempo.

 

[Ah sí, tengo una pregunta. Tina-san ¿verdad? ¿Cómo puede confiar tanto en ti a pesar de que era la primera vez que se conocían? Comprendería si fuera ahora, ya que ayudaste en que la aceptaran en la academia con la nota más alto. Pero, dijiste que confiaba en ti desde el principio, ¿verdad?]

 

[Ahh, acerca de eso. También me lo preguntaba. Así que le pregunte. Y entonces—]

 

Le explique la situación.

 

¿Oh? ¿los ojos de Caren se están humedeciendo otra vez?

 

[Nii-san, iré a ver a Lydia ahora.]

 

[S-Sí. Pórtate bien, ¿sí?]

 

[Hay algo de lo que tengo que hablar con ella.]

 

[Y-Ya veo.]

 

[Incluso si quiere presumir sobre ti, Nii-san, ella no tenía por qué decir cosas como eras una clase de héroe… ¡¡¡Es como si pidiera ser asesinada!!! Aparte—]

 

La mirada de Caren era como dagas.

 

Me atraparon, huh.

 

[No le dijiste a Lydia, ¿verdad?]

 

[Erm.]

 

[¡Dios! ¡La estás consintiendo!]

 

[Pero ¿también te estoy consintiendo a ti?]

 

[E-Eso está bien porque soy tu hermana… Es hora para ajustar cuentas. Nii-san, no te muevas hasta que regrese. ¡Okay!]

 

Después de decir eso, Caren salió del cuarto.

 

Una hora después, Anna-san vino y me invito a ir con ella con una sonrisa irónica.

 

Dios mío, ella todavía es un problema.


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