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Capítulo 2

El Gremio de Aventureros

 

Más de una década había pasado desde la última vez que visité el Gremio de Aventureros. Aunque el interior era más o menos el mismo, ya no se sentía tan espacioso como cuando era niño, y el lugar en sí mismo se sentía más viejo de lo que lo recordaba.

 

[¿Se le ofrece algo hoy, señor?]

 

Mientras miraba alrededor, una pequeña mujer— no, una chica en su adolescencia— me llamó desde donde estaba sentada detrás del mostrador de recepcionista. Se veía que era la única allí; el hombre que me había recibido hace mucho no estaba por ningún lado.

 

[Sí, me gustaría registrarme como un aventurero.] Dije.

 

La chica de inmediato sacó una hoja de papel. [Entonces por favor llena esto con tu nombre y las habilidades que posees. Si no puedes escribir, entonces por favor no dudes en decirlo. Estamos más que felices de hacerlo por ti.]

 

Por suerte, mis padres se habían asegurado que fuera más o menos literario. Acepté la hoja y vi que mi nombre y habilidades eran las únicas cosas que necesitaba escribir, así que fui directo al curro.

 

______________________________________

<Forma de Registro de Aventurero>

Nombre: Noor

<Habilidades Declaradas>

Tipo Espadachín: Rechazar

Tipo Guerrero: Fortalecimiento Físico

Tipo Cazador: Tira Piedras

Tipo Ladrón: Pisada Ligera

Tipo Mago: Pequeña Llama

Tipo Clérigo: Baja Curación

______________________________________

 

Uno a uno, anoté mis rudimentarias habilidades para cada tipo, terminando con seis en total. Eran todo lo que tenía.

[¿Así está bien?] Le pregunté a la chica.

 

[Sí, gracias. Por favor espérame un momento mientras lo reviso— ¿Huh?]

 

Aparentemente confundida mientras continuaba viendo mi forma, la chica tomó un grueso manual postrándose sobre el mostrador del recepcionista titulado “Diccionario de Habilidades.” Entonces, luego de un corto tiempo de examinar su contenido, regresó a mí dudosa.

 

[Um, ¿seguro que lo llenó correctamente?] Ella preguntó. [Si hubiera algo más que olvidara añadir—]

 

[Es todo.]

 

Se pausó por un momento y dijo. [¿Qué?] Me honesta respuesta había convertido la mirada en su rostro de confundida a nerviosa mientras tomaba un pequeño folleto de cerca y empezaba a hojearlo. Por cómo se ven las cosas, estaba estudiando un manual de entrenamiento de recepcionista.

 

[¡P-Perdón por mi rudeza!] Ella dijo. [Entonces, um… ¿es, um… estás consciente de las escuelas de entrenamiento que tenemos aquí en la capital real? Cualquiera es recibido para asistir. Puedes recibir entrenamiento en las seis clases básicas de divisiones por instructores de primera y desarrollar nuevas habilidades para—]

 

 [Sí, las conozco. He entrenado en cada una, y esas son las habilidades que tengo.]

 

[¡¿Huh…?!] Levemente exclamó, pero su sorpresa solo duro por un breve momento. [Perdóneme. Por favor espere un momento.]

 

Fue atrás a hojear su folleto. Luego de revisarlo varias veces en búsqueda de lo que sea que estuviera buscando, me miró con pesar.

 

[U-Um, entonces, siento decirle esto, pero…]

 

[¿No puedo registrarme como un aventurero?] Pregunté. Lo había esperado.

[Me temo que no. No tiene los requerimientos mínimos establecidos por el Gremio. Realmente lo siento…]

 

[No, está bien. No necesitas disculparte.]

 

Ya sabía que mis habilidades no eran suficientes para registrarme como un aventurero. La chica se veía aliviada, pero eso rápidamente cambio cuando escucho mis siguientes palabras.

 

[Aunque me gustaría registrarme como un aventurero. ¿Hay algo que puedas hacer para ayudarme?]

 

La chica miró frenéticamente entre yo y el manual de entrenamiento, sus manos empezaban a temblar. Ya había estado al borde de las lágrimas, pero ahora su cara estaba roja. ¿Mi petición había sido tan mal?

 

[Supongo que no, ¿huh?] Dije.

 

[Um, um, pero, um… ¡P-Por favor espere aquí un momento!]

 

Justo mientras estaba empezando a sentirme peor por ella, se levantó de su asiento y corrió a la parte trasera del Gremio.

 

[¡Muh-Mathderrr!]

 

[¿Qué ocurre, Aria?] Una voz vino desde la lejanía. [¿Huh? ¿Por qué toda tu casa está roja?]

 

[Um, verás, hay un hombre que—]

 

Del sonido de las cosas, estaba explicando mis circunstancias a esta persona “Mathder.”

 

Luego de un rato, un hombre gran de cara sombría salió de atrás. Aunque su expresión era templada, sus mejillas y brazos estaba marcados con grandes cicatrices.

Pestañé. Conocía a este hombre. Aunque había más gris mezclado en su cabello ahora, su cara me pasaba un sentimiento de nostalgia.

 

[Hey.] Dijo. [No puedo decir que aprecio que hagas gala de nuestros bisoños— ¿Hm? ¿Quién eres? No había visto tu cara por estos lares antes.]

 

Parecía que no me reconoce. En efecto, probablemente pensó que era algún tipo sospechoso si ya que la filosa mirada que me estaba dando era para asustarse. Sin embargo, ver una cara familiar me había subido la moral.

 

[Hey.] Dije. [Tiempo sin verte.]

 

[¿Hm? ¿Tiempo sin vernos de qué? No sé quién crees que res, pero—] Se detuvo, puso una mano en su barba, entonces inclinó su cabeza. [Espera. Dame un momento.]

 

Luego de examinarme por un rato, se rostro se ilumino en entendimiento. [Bueno, estaré maldito. Vaya que creciste. Eres ese niño de entonces, ¿verdad? Noor, ¿era?]

 

[Soy yo.] Respondí.

 

Para mi sorpresa, me recordaba. Por nombre, ni más ni menos.

 

La chica recepcionista, quien había estado observándonos nerviosa nuestro intercambio, miraba entre nosotros, con una perpleja expresión en su rostro. [Um, ¿este hombre es conocido suyo?] Preguntó la chica.

 

[Sí. Algo como eso. Puedes dejármelo ahora, Aria. Ve a ver si ya puso la marrana.]

 

[¡V-Voy!]

 

Observábamos como la chica se movía a otro mostrador y empezaba a ayudar a otros visitantes, entonces el hombre regresó a mí, su alegría es completamente rara con su comportamiento de hace rato. [Perdón. El recordar rostros se supone que sea parte de mi trabajo. Dicho eso, no eres nada como recordaba. Si pegaste un gran estirón, ¿eh?]

 


 

[No importa.] Respondí, sonriendo. [Ha pasado una década. Siendo honestos, estoy asombrado que incluso recuerdes mi nombre.]

 

[¡Ha! Claro que lo recuerdo. No podría olvidarlo, aunque quisiera. Nuestro paso en una escuela de entrenamiento es bastante difícil para un adulto, pero un pequeño viene y se va con toda una clase para las seis, ¿y no aprendes una sola habilidad para empezar? Fuiste el primer en lograrlo, y serás el último también. Entonces vas y te desapareces en el aire. No escuché ni una sola palabra de ti de ningún lado, así que me imagine que de seguro te quedaste sin plata. ¿En qué has estado todo este tiempo?] Se pausó, rascando su cabeza. [En realidad, olvídalo. Olvida que pregunté. No quiero entrometerme.]

 

Sonaba curioso con respecto en lo que había estado desde que deje la capital. No tenía razón para mantenerlo en secreto, así que le conté de cómo había regresado a mi hogar en las montañas y seguí mi entrenamiento solo.

 

[¿Qué? No estás diciéndome en serio que pasaste más de quince años entrenando solo para conseguir una habilidad, ¿verdad? Nunca oí de alguien con cabeza dura para—] Detuvo su oración a la mitad, parecía reconsiderarlo. [En realidad, yo haría algo como eso.] Entonces, algo dudoso, continuo. [¿Y… qué habilidad obtuviste?]

 

[No conseguí una una.] Respondí honestamente.

 

Sí, al final, no había aprendido ni una nueva habilidad. Mis instructores habían tenido razón de decirme que no tenía ningún talento.

 

[Bueno. Tiene sentido. Los instructores de la escuela de entrenamiento real no llegaron a donde están solo por influencias. Las personas llaman a esta ciudad la Tierra Santa de Aventureros, y así, son lo mejor de lo mejor. No hay mucho en lo que se equivoquen. Siento decirlo, pero si dijeron que lo dejarás, entonces, bueno… eso es.]

 

[Sí. Pero no. Entrené bastante desesperado a mi propia manera, pero no fue útil.]

 

Hay cierto sentimiento que pasa por el cuerpo de una persona cuando desarrollan una habilidad; lo había descubierto cuando desarrollaba las rudimentarias en las escuelas de entrenamiento. Pero luego de dejar la capital real, nunca lo había sentido otra vez. Es decir, no había desarrollado ninguna habilidad nueva.

 

Aunque, todas las cosas consideradas, estaba seguro que lo había currado bien…

[Bueno, no dejes que te afecte.] El tipo dijo. [No Todo en la vida es color de rosa. Hay muchas cosas que puedes hacer en lugar de ser aventurero. Pero, espera… ya sabes eso. Y por eso me pregunto, ¿por qué viniste aquí? No me digas que esta forma de registro en el escritorio es tuya.]

 

[Sí. A pesar de todo, aun quiero ser un aventurero. Sé que estoy pidiendo lo imposible, pero ¿no hay otra forma de hacerlo?]

 

[Espera. ¿En serio?] Él me frunció el ceño por un momento antes de agitar su cabeza, resignado. [Bien, bien. Aunque tomo mi trabajo en serio, así que estás iniciando desde cero.]

 

Entonces, rascando el cabello en su gris cabeza, el hombre empezó a explicar.

 

[Primero lo primero: aventurarse es un trabajo para aquellos que van por algo de gran riesgo y gran recompensa; esos que están seguros de sus propias habilidades; y esos que son bastante raros y le sacan provecho al peligro. Te registras a cuenta de tu propio riesgo. Harás incursiones en las áreas habitadas por monstruos, emprender reconocimiento de escondites de criminales, y a veces, incluso caza recompensas. Cuando se trata de aventurarse, un rentable trabajo es una peligroso. Dicho de otra manera, para ser un aventurero es vivir con la muerte a diario… pero supongo que ya sabes eso.]

 

[Sí.] Respondí, asintiendo. [Estoy bien con eso.] Estaba bastante consciente de todo lo que me estaba diciendo.

 

[Bueno, en pocas palabras, aventurarse es un trabajo donde metes tus marices en el peligro. Como tal, el interés de proteger vidas humanas, un conjunto de estándares oficialmente reconocidos por todos los gremios fue establecido. Podemos llamar esos estándares “Rangos”, y fueron puestas para que sean menos idiotas que equivoquen mientras tratan de hacer lo imposible y mueran en alguna parte.]

 

Diciendo eso, se retiró y me mostró una lista oficial de rangos desde dentro del escritorio de recepcionista del Gremio.

______________________________________

Rangos Oficiales de Aventureros

Rango S (Platino): Individuos reconocidos por la Asociación Del Gremio de Aventureros al tener una extraordinaria habilidad.

Rango A (Dorado): Individuos reconocidos por instituciones oficialmente designadas por ser excepcionalmente capaces y tener notables logros.

Rango B (Plata): Individuos reconocidos por instituciones oficialmente designadas por ser excepcionalmente capaces y una increíble habilidad.

Rango C (Bronce): Individuos reconocidos por la Asociación del Gremio de Aventureros por ser capaces y una increíble habilidad.

Rango D (Hierro): Individuos que tienen una excelente habilidad como un aventurero.

Rango E (Principiante): Individuos que tienen la mínima habilidad requerida para convertirse en un aventurero.

______________________________________

 

[Como regla general, solo hay cinco rangos de aventurero: de A a E.] El tipo dijo. [El rango S, o el Platino, existe, pero es un honor reservado solo para las personas más excepcionales. No le prestes mucha atención. Ahora, normalmente, el rango de una persona inicia en E y se eleva hacia A mientras completan misiones exitosas y gana reconocimiento por sus habilidades… para que eso te pase, necesitarás primero ser reconocido como alguien quien tiene “la habilidad mínima requerida para convertirte en un aventurero.” Solo entonces podrás convertirte en un Rango E— un principiante.]

 

Su explicación sonaba familiar; vagamente recordaba oírlo de él cuando era niño.

 

[Ahora.] Continuó. [El requerimiento oficial para empezar desde el fondo, Rango E, es tener al menos una habilidad útil. Por hecho, es un requerimiento bastante permisivo.] Él se pausó. [Pero supongo que es un obstáculo bastante grande para ti. Aunque, ya que se pone en casi todos los gremios de cada nación, no solo aquí en la capital real, mis manos están atadas en el asunto de lo que puedo hacer por ti. Lo siento.]

 

Luciendo amable, se rascó su cabeza.

 

[Ya veo.] Dije. [Supongo que no hay nada que pueda hacer.]

 

Quizás finalmente era tiempo para que lo dejará y madurará. Ya lo tenía en mente que así era cómo resultarían las cosas. Siendo honestos, realmente vine aquí para asegurarme de lo que se me había dicho de chico.

 

A pesar de eso, fue un gran golpe. Hasta ahora, siempre habíamos vivido con la vista puesta en convertirme en un aventurero. Sabiendo que era imposible no lo hacía más fácil el cambiar cómo me sentía. Aunque, se le llamaba imposible por alguna razón.

 

[Supongo que realmente tendré que rendirme…] Suspiré, mis hombros se cayeron mientras mi mente divagaba.

El encargado me observó en silencio por un rato antes de hablar otra vez. [Bueno.] Dijo, rascándose su barba. [Si solo quieres ser un aventurero, entonces puede que no estés corto de opciones.]

 

Mi cabeza se levantó. [¿Hay una forma?]

 

[No diría que hay una… pero realmente tampoco puede decir que no hay ninguna.]

 

[Dime. Por favor.]

 

Liberó un pequeño suspiro, entonces dijo lentamente. [Como lo expliqué antes, no reúnes los requerimientos para tomar el rango más bajo de aventurero, Rango E. Pero, hablando estrictamente, en realidad hay un rango más bajo que E.]

 

[¿Más bajo que E?]

 

[No muchos lo conocen, incluso entre nosotros quienes manejan esos asuntos. Es una posición irregular que se llama Rango F, conocido igual como Novato. El principiante generalmente es considerado el más bajo, pero Novato es incluso más bajo. Es un rango especial que solo existe aquí en la capital real. Ya que no tiene estipulaciones acerca de necesitar alguna habilidad, puedes registrarte como un Novato incluso como eres ahora. Aunque—]

 

[Yo… ¡Yo lo haré!]

 

Antes de darme cuenta, me lancé sobre el mostrador de la emoción. Sabía que era infantil de mí, pero, no podía contenerme. Poco como era, se me había dado una nueva esperanza.

 

[Cálmate y escúchame primero.] El encargado me dijo. [La parte importante viene ahora.]

 

[Bien.]

 

[En práctica, el Rango Novato puede también no existir, y hay una razón para eso: habilidades o no, nadie puede registrarse a ello, tú incluido. Pero viene con ciertas condiciones.]

[¿Condiciones?] Pregunté. [¿Qué tipo de condiciones?]

 

[Esa es la esencia de ello. Tienes prohibido emprender comisiones de cacería de cualquier tipo, y juntar comisiones fuera de los límites de la ciudad está fuera de cuestión también. Esas son las condiciones. Después de todo, si no puedes protegerte, incluso reunir materiales se vuelve peligroso. En cuanto a lo que puedes hacer, tienes permitido tomar comisiones varias dentro de la ciudad. Eso es. Es decir, limpiar drenajes, mover la basura en los sitios de construcción, buscar gatos perdidos… Esos son los únicos trabajos que puedes tomar en Rango Novato.]

 

[Comisiones varias dentro de la ciudad…]

 

[Eso es.] Confirmó. [Nada más. ¿Y qué tipo de persona serían tan tonta para registrarse para ser un aventurero, solo para eso? Ya que el Gremio media el trabajo, tomamos parte del pago. Sería mejor que encontraras un trabajo regular. El rango fue inicialmente establecido antes para forzar a los mendigos de la ciudad y similares en trabajos, pero desde que la economía se estabilizó, ha sido un vestigio olvidado que nadie usa más. La ley que lo creo fue establecida hace mucho tiempo; no hay siquiera rastros de estar en uso en los pasados cien años. Para serte honesto, no hay ningún beneficio en registrarte para volverte un Rango Novato. Así que por tu propio bien, solo encuentra un trabajo regular y—]

 

[Estoy bien con eso.] Dijo. [Por favor, déjame registrarme.]

 

[¿Qué?] Se detuvo y me miró. [Espera, ¿no escuchaste palabra de lo que dije?]

 

[Sí. Sin cazar, sin reunir materiales— básicamente, no comisiones peligrosas de ningún tipo que me saque de la ciudad, ¿cierto? Estoy bien con eso, así que por favor déjame registrarme.]

 

El encargado liberó otro suspiro— una largo esta vez— y una vez más rascó su cabeza. [Bien. Te conté de ello, así que cosecho lo que siembro. Te haré tu carta de registro… pero escúchame. Avísame en el momento que te aburras de esto, ¿bien? Un trabajo regular te sentaría mejor, no lo pienses dos veces. Te presentaré a unas personas siempre que quieras. ¿Entiendes?]

 

Habiendo dicho eso, el hombre entró a un cuarto en la parte trasera y regresó con una pequeña caja cubierta de polvo. Entonces, sacó una carta negra desde dentro, la firmó y me la entregó.

[Si lo has entendido, entonces toma esto.]

 

[¿Qué pasa?] Pregunté.

 

[Tu carta de registro Rango F. Servirá como tu licencia de aventurero, ni más ni menos. Conlleva condiciones, claro, pero te las acabo de decir. No vayas por ahí mostrándola, ¿bien? No es algo para andar presumiendo.]

 

[¡Claro, gracias! ¡Juro que te lo pagaré!]

 

Y así fue cómo, al obtener mi licencia de aventurero Rango F, di el primer paso hacia mi tan esperado sueño.

 

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