Capítulo 5 - Es Todo Gracias a la Joyera

 

Capítulo 5

Es Todo Gracias a la Joyera

 

El día siguiente, dos personas más llegaron para observar la práctica de baile luego de clases. De nombre, Felix y Cyril.

 

Cuando aparecieron, las mejillas de Lana se sonrojaron y dio un “Eek.” Las mejillas de Monica se pusieron blancas, se asustó, gritó “Eek” en silencio en su corazón.

 

Neil se veía confundido, Casey se veía tensa, y Glenn, por su parte, sonrió y dijo. [¡Oh, es el presi!] Nada parecía intimidarlo.

 

[¿Q-Qué… e-están, haciendo, aquí…?] Monica balbuceaba con su voz débil.

 

Las cejas de Felix se levantaron en sorpresa. [Te dijo que tenía expectativas en ti, ¿no? ¿Creíste que fui tan frío que te abandonaría luego de eso?]

 

[¡Eso es!] Cyril intervino, lleno de orgullo. [¡Deberías estar agradecido por la humildad del príncipe!]

 

¿No deberían estar haciendo tareas del consejo…? Monica se preguntó para sí.

 

Felix miró a Cyril. [Por cierto, no recuerdo llamarte.]

 

[¡Soy su ayudante, señor! ¡Es natural que deba acompañarlo!]

 

[Pero terminaste todo tu trabajo del consejo por adelantado, incluso antes que te dijera mis planes. ¿Seguro que no pretendías venir a observar la práctica de Lady Norton para empezar, incluso sin mí?]

 

Cyril se sonrojó a la burla de Felix. Su mirada vagaba. [B-Bueno… yo… predijo que lo haría. ¡Soy su mano derecha!]

 

Parecía que ayudante de Felix siempre estaba listo para ventilar sus caprichos. Siendo así, Monica no estaba feliz con esta situación. Su estómago ya había empezado a rugir.

 

Lana agitó los hombros de Monica. [¡Mira! ¿No es maravilloso? El presidente y el vicepresidente ambos están aquí. ¡Justo aquí!]

 

Su emoción probablemente era la reacción normal para una estudiante de la academia— o así lo pensó Monica, hasta que…

 

[El broche del príncipe— ¿es una gema peridoto?] Lana continuó rápidamente.

 

[¿Turmalina? ¿Diópsido? No es que algún taller pudiera haber producido algo así de brillante mientras mantenga su vivido color. Los adornos alrededor también deben ser el trabajo de un famoso joyero. Tengo que asegurarme de recordar esto… Ah, desearía poder dibujarlo… ¡Oh! El sello en el broche de los zapatos de Lord Ashely— ¡Es algún tipo de engravado en los mejores zapatos producidos por el famoso Bart Owen Atelier! Quiero mirarlo más de cerca…]

 

Lana no estaba viendo los rostros de Felix o Cyril, sino a sus zapatos y accesorios. Quizás tampoco era una chica de secundaria normal.

 

Monica miró a Casey. Su usual sonrisa animada se fue, y parecía estar mirando a Felix, su rostro se tensó. Era natural estar nervioso a la repentina llegada de la realeza. La reacción de Casey probablemente era la más sensible.

 

Mientras Monica pensaba en eso, Felix la incitó a ella y Glenn a bailar. ¿Por qué no nos muestras lo que puedes hacer?

 

[¡Entiendo!] Glenn respondió. [¡Monica, muéstrale al presi los frutos de nuestro trabajo!]

 

Sus habilidades no eran para estar orgullosa. ¿De dónde venía esa confianza?

 

Nerviosa, Monica tomó las manos de Glenn mientras Lana se sentaba en el piano y empezaba a tocar. Casey mantenía el ritmo al aplaudir.

 

[¡Bien, a las tres!]

 

[¡E-Está bien!]

 

[¡Uno, dos, tres!]

 

Monica y Glenn dieron un paso al mismo tiempo. Gracias a su intensivo entrenamiento, el inicio del baile no fue malo. Pero entre más pasos tomaban, más sus pies dejaban la sincronización con el otro.

 

Eventualmente, Cyril dijo. [¡Alto!]

 

Ah, lo sabía. Soy tan mala… Monica pensó, agitándose a las palabras que tenía para criticarla.

 

Pero la mirada de los ojos azules de Cyril estaba puesta en Glenn, no ella. [¡Glenn Dudley! ¡¿Llamas a eso liderato?! ¡Necesitas pensar en tu actitud con las señoritas!]

 

Monica no podía creer lo que estaba escuchando de quien tan brutalmente la amonestaba todo el tiempo. Sus ojos se abrieron. Había estado preparada para otra sesión de regaños.

 

Glenn, por otra parte, frunció el ceño ante la crítica, infeliz. [¡Estoy siendo bien amable!]

 

[¡Ni siquiera sabes cómo invitar a una chica a bailar! ¡Quédate allí y observa!]

 

Cyril alejó a Glenn, luego miró a Monica, quien estaba acobardándose del miedo. ¿Esto iba a llevarla a ella y Cyril a bailar juntos? Si piso su pie por accidente, está libre para congelarme viva… Monica pensó, empezando a agitarse.

 

Cyril puso su mano izquierda detrás de su espalda y se inclino hasta la cintura. [¿Me concede esta pieza, mi lady?]

 

[¿Huh…?]

Su elegante reverencia y poco características palabras detuvieron los pensamientos de Monica en seco. Mientras se quedaba allí parada, Cyril gentilmente— como si manipulara delicada cristalería— tomó la mano de Monica con la suya.

 

Mientras Lana empezaba a tocar, Cyril movió su mano al nivel del cuerpo de Monica. Con ese movimiento, Monica entendió que el baile había empezado. E incluso sin Glenn dándole la señal, extrañamente conocía el tempo para el primer paso.

 

Guiada por la mano de Cyril, Monica movió su pie. Estaba tan concentrada en sus pisadas que su coreografía de su parte baja se puso floja; sin embargo, cuando su espalda o brazos doblados, la mano de Cyril gentilmente corregía su postura.

 

Lo mismo iba para su dirección de movimiento, Glenn solo decía, “¡Vamos al siguiente!” o “¡Vamos a golpear la pared, así que por aquí!” para dirigirla, pero Cyril no decía nada. En cambio, usaba la mano apoyando a Monica, sus pies y su mirada para guiarla naturalmente. Era fácil de bailar con él.

 

Cuando la canción terminó, Cyril le dio otra reverencia, como lo había hecho al inicio. Luego levantó la mirada y miró a Glenn…

 

[¡¿Lo viste ahora, bufón?!] Gritó enojado con una mirada de orgullo en su rostro. [¡Así es cómo escoltas a una dama!] Su actitud cambió por completo cuando estaban bailando— ese era el Cyril que Monica conocía.

 

Sin quererlo, murmuró. [Es bueno ver a Lord Ashley actuar otra vez.]

 

[¿Y qué se supone que significa eso, Contadora Norton?] La mirada de Cyril se centró en ella y aclaró su garganta. [Cuando se trata de baile de salón, el hombre— o líder— determina el resultado. Si hace un buen trabajo y baila al ritmo de la música, las cosas más o menos se arreglarán.]

 

[Whoa.] Glen dijo, impresionado. [¡Eso fue grandioso!]

 

[Si vamos a alagarme, cuida un poco más tu vocabulario y encuentra palabras más refinadas.] Cyril respondió. Se veía algo a gusto, pero mantenía su compuesta postura.

 

[Vocabulario, huh…] Glenn dijo, cayendo en el pensamiento por un momento. Luego, compuso su postura, empezó otra vez. [¡Fuiste como, shwwwooo, y luego whoa! ¡Psssht! ¡Eso fue genial!]

 

[¿Sabes qué…? Los modales vienen luego. Necesitas aprender el lenguaje humano primero.] Cyril le frunció la mirada a Glenn antes de darle la espalda a Monica. [Y tú, Monica Norton. Aún tienes problemas de modales que resolver. Primero, necesitas acostúmbrate a ser dirigida. No saltas por cualquier cosa. No te agaches. No bajes la mriada. Mientras luzcas bien, las personas tolerarán un gran número de errores en tu trabajo de pies.]

 

[B-Bien…] Monica había oído el mismo consejo de su profesor y Neil. Su postura era mala. También solía tropezarse y mirar a sus pies. Consciente, se puso recto y reviso sus mejillas en un espejo.

 

Felix sonrió y ofreció una sugerencia. [En ese caso, Dudley debería practicar liderato y Lady Norton debería acostumbrarse a ser liderada. Cyril, ¿te importaría mostrarle a Dudley la técnica?]

 

[Si eso dice…] Cyril asintió, un poco de mala gana. Se movió hacia Glenn y lo dirigió con arrogancia. [¡Whelp! ¡Estoy por ingresar mis técnicas en tu cabeza! ¡Primero, quiero que pienses en mí como una dama y trates de liderar!]

 

[¿Quuu…?] Glenn gruñó. [¿Pensar que eres una dama? Hmm, nop… No pasará…]

 

[¡No siempre consigues lo que quieres!]

 

Cyril lo arrastró, gritándole, mientras Felix le daba una sonrisa a Monica. [Y eso nos deja, Lady Norton.]

 

[S-Sí, um… G-Gracias…] Monica balbuceó, inclinándose una y otra vez.

 

Felix miró a sus dedos, aun sonriendo. [Estoy sintiendo una gran falta de entusiasmo.] Sus labios se quedaron firmes y estiró su brazo tanto como pudo. Logro tocar la mano de Felix con sus dedos.

 

[¡L-Lo siento! ¡Por favor, lidérame!] Temblando, dio medio paso al frente. De inmediato tomó su mano y la acercó.

 

Su mano se movió para apoyar su cuerpo. Tan pronto lo sintió, Monica se tensó. Su jovial rostro cambió de color… no del rojizo sino al pálido. Parecía que estaba por desmayarse.

 

[Actuaste más natural cuando Cyril era tu compañero.]

 

[B-Bueno, eso es… Lord Ashley estaba actuando tan diferente, estaba sorprendida.] Con Cyril, había estado tan impresionada y el baile había iniciado y terminado antes de siquiera notarlo. Sin embargo, esta situación era diferente.

 

Mientras temblaba, Felix le dio instrucciones a Lana. [Lo siento, pero ¿te importaría darnos una canción? Tócala algo tranquila. Y no necesitas aplaudir.]

 

[¡D-De inmediato!] Lana asintió, un poco sin aliento mientras empezaba a tocar.

 

La música había llegado, un poco más leve de antes, y Felix aún sosteniendo la mano de Monica, empezó a mover sus pies. Fue lo mismo con Cyril. No necesitaba contar— se le diría por instinto cuándo empezar. Felix parecía ser habilidoso también,

 

[No te preocupes mucho por tus pies. Si quieres, puedes olvidar que estás bailando.]

 

[¿Huh…? ¿Puedo?]

 

[Sí. Solo camina normal y conversa conmigo. Estás un poco tensa ahora.]

 

La sugerencia de una buena conversación dejo Monica perdida. Ella era terrible al hablar y terrible al pensar en temas de los que hablar. Nunca había logrado una decente conversación con alguien.

 

Mientras Monica pensaba en un tema, Felix acercó su rostro un poco más y miró a sus ojos. [Esta es la primera vez que estoy viendo tan cerca tus ojos. Se ven castaños, pero puedo ver un poco de verde en ellos dependiendo en cómo la luz pegue… Como motas de luz en lo profundo de un bosque.]

[O-Oh, er…]

 

[Y tu cabello castaño es bastante lindo y brillante hoy. ¿Tu amiga lo hizo por ti otra vez?]

 

[No, lo hice yo sola hoy. Um, compré un nuevo peine ahora, así que…]

 

[¿Oh? ¿Qué peine?]

 

[Um, Lana… er, Lady Colette lo escogió para mí. Tiene flores gravadas en el mango…]

 

Monica generalmente la pasa mal haciendo conversación, pero mientras recordaba comprar el peine con Lana, su rostro naturalmente se relajó.

 

Viendo eso, Felix le dio una sonrisa. [Así que puedes sonreír así. Déjame verlo más de cerca.]

 

Con el mirándola de lleno a la cara, Monica se avergonzó. Sus ojos empezaron a vagar. Eventualmente, llegaron a descansar en el broche en la túnica de Felix.

 

Recordó a Lana hablar de eso antes y había tenido razón— de cerca, era un accesorio bastante elaborado. La piedra en el medio había sido cortada a la perfección y brillaba en el cuarto.

 

Las gemas eran los materiales más frecuentemente usados en objetos mágicos. La cantidad de maná a la que podía responder dependía en el tipo de gema, su tamaño, su opacidad y cómo se cortaba.

 

No puedo ver la base de la gema, pensó, pero debió haber usado los métodos más recientes cuando se cortó… Usualmente, un joyero prioriza hacer que el color de la piedra luzca tan fuerte como pueden, y así dejan mucho de la piedra en la base. Pero esta tenía una delgada y vacía base para poder reflejar la luz mejor… Solo podrías hacerlo si el color original de la gema era muy profundo…

 

[Creo que un vestido verde te quedaría.] Felix dijo. [Un verde oscuro, pero no tanto. Y luciría espléndido con alguna flor hermosa en la falda. ¿Tienes una flor favorita?]

58 facetas— probablemente podría usarlo para barreras reflectivas. Las barreras reflectivas no son tíficamente fuertes, se dice que son débiles para rechazar ataques más fuertes de hechicería. Pero si usas este poliedro, puedes incrementar la fuerte de la barrera y su reflectividad…

 

[Si te gustan las rosas, creo que las rosas de otoño te quedarían bien. Las rosas de primavera son pálidas y gentiles, pero aquellas en otoño tiene un color más profundo, y creo que te harían sobresalir más.]

 

Si fuera a desplegar una barrera reflectiva usando este poliedro, asumiendo… el índice de refracción, entonces para un golpe directo, la reflectividad sería…

 

Mientras Monica se perdía pensando en la fórmula mágica de las barreras reflectivas, la canción terminó. Felix dejo de moverse, pero mantenía sus manos en Monica. Casey y Neil, quienes habían estado observando, le dieron una ronda de aplausos.

 

[¡Monica, eso fue increíble!] Casey exclamó. [¡A la mitad, se convirtió en un baile real!]

 

[Sí, Tus movimientos se volvieron más naturales… ¡Es lo mejor que has hecho!]

 

En ese momento, sin embargo, Monica se quedó muda a su alago— su mente estaba llena de ecuaciones y fórmulas mágicas.

 

Felix le ofreció una sonrisa mientras miraba su broche y pensaba en hechicería. [Tenías una tendencia a pensar mucho y ponerte rígida, lo que estaba afectando tu ritmo.] Remarcó. [Con una pequeña conversación, claro, pudiste confiarte a tu compañero sin pensarte las cosas dos veces. ¿Tengo razón?]

 

Fue cuando Monica por fin salió de su ensueño, levantó la mirada, y miró alrededor como si se hubiera despertado de un sueño. [Uh… Um… Yo, er… ¿Qué fue que yo…?]

 

[¡Monica, ese fue un increíble baile!] Glenn gritó, sus ojos brillaban. Había empezado a observarla a mitad del baile. Cyril asintió igual. [No esperaría menos del príncipe.]

 

Aun sintiéndose en las nubes, como si estuviera soñando, Monica puso sus manos en sus mejillas. [¿Yo…baile…apropiadamente?]

[Sí. Bailaste muy bien.] Felix asintió.

 

Las mejillas de Monica se pusieron rojas mientras ponía una gran sonrisa. [¡El corte en la gema de tu broche reflejaba la luz tan brillante con sus 58 facetas, empecé a pensar en su reflectividad y dejé de pensar en cosas innecesarias!]

 

Un pesado silencio cayó sobre el cuarto.

 

Los ojos de Monica, sin embargo, seguían brillando como los de un niño inocente.

 

El siempre afable Neil abrió su boca, dudoso y dijo. [U-Um… ¿Eso no significa que estabas pensando en cosas innecesarias…?]

 

[Oh…] La sonrisa de Monica se congeló. Lenta— muy lentamente— se giró a Felix.

 

Estaba sonriendo. Pero una oscura luz se vio en lo profundo de sus ojos azules. [Supongo que mi conversación no te importo tampoco. ¿Es cierto, Lady Norton?] Preguntó.

 

[¡No! Um, yo, er, lo que digo es, b-bueno…] Monica balbuceó, de inmediato empezando a jugar con sus dedos. Eventualmente hizo puños sus manos, miró al cielo, y gritó. [¡La razón por la que fui capaz de bailar tan bien fue gracias a… su broche!]

 

[¡¿Al menos podrías decir que fue gracias al príncipe?!] Cyril gritó, sus palabras resonaron por todo el salón.

 

Y así fue cómo Monica aprendió a sumergirse en sus propios pensamientos para pasar las clases de baile.

 

Cuando llego la hora del examen, Glenn Dudley y Monica Norton tenían expresiones tensas. Pero una vez la música empezó, tomaron el primer paso con ligereza que habría hecho dudar a cualquier acerca de su actuación.

 

El liderato de Glenn fue un poco forzoso, pero era claro que estaba poniéndole el empeño requerido a su compañera. Y ya que Monica se tropezaría antes, ahora estaba tomando los pasos apropiadamente y la lideraba, aunque algo de incomodidad se sentía.

Eventualmente, la canción terminó, y el rostro de Lindsey puso una sonrisa. El pensamiento de decirle las siguientes palabras la llenaron con dicha y orgullo de un profesor.

 

[Felicitaciones. Ambos han pasado.]

 

Glenn y Monica— y sus amigos, quienes habían estado observando desde el pasillo— liberaron gritos de dicha.

 

Lindsey sonrió a sus estudiantes y dijo. [Han hecho un excelente trabajo echándole ganas.]

 

✽✽✽✽✽

 

La Academia Serendia estaba amueblada con múltiples cuartos de té. Uno de ellos era privado, solo para uso de unos selectos, y dentro, una fiesta de té ahora estaba en marcha. Su anfitrión eran Bridget Greyham, secretaria del consejo y noble hija del Vizconde Shaleberry.

 

Y solo había invitado a una persona: el presidente del consejo y segundo hijo del Reino de Ridill, Felix Arc Ridill.

 

[Lady Norton pasó su examen de baile de salón.] Felix dijo casualmente mientras ponía en sus labios el té negro que ya había preparado para él.

 

Bridget regresó su copa a su lugar y desplegó su abanico. [Es maravilloso oírlo.]

 

[¿No querías que fallara?]

 

[¿Por qué estaría feliz que un miembro del consejo fallara en una clase?] Respondió. Era la forma correcta para responder a la pregunta. Bridget, una de las tres chicas más hermosas en la academia, libero una pequeña sonrisa por sus hermosos rasgos mientras miraba a Felix. [Hablando de baile… Eso me recuerda. ¿Recuerda cómo solíamos practicar juntos cuando éramos jóvenes?]

 

[Sí, claro.] Felix respondió. [Tengo buenos recuerdos de ello.]

 

[Era un mal bailarín… Pisó mis pies muchas veces. Y se disculpaba constantemente. ¿Recuerda?] Manteniendo su boca escondida detrás de su abanico, movió sus ojos para ver a Felix— casi como si estuviera disfrutando su reacción.

 

Él le dio una sonrisa, como si se avergonzara de sus glorias pasadas. [Sacar los viejos tiempos de pronto… ¿Qué se te metió?]

 

[Oh, pero vivo de los recuerdos del pasado como cualquier persona.]

 

Una fiesta de té con un hermoso príncipe y una señorita— era una bella vista, como una ilustración en una novela. Aunque parecían estar disfrutando de la conversación, una tranquila batalla estaba armándose bajo la superficie.

 

Bridget Greyham era una chica inteligente. No era alguien que Felix pudiera deslumbrar con sus miradas y posición o someterla a su voluntad.

 

[Siempre has sido astuto.] Comentó.

 

[A mi padre no le gusta eso de mí. Dice que prefiere a una mujer más mansa y divertida… ¿Piensas de la misma forma?]

 

[Me gustan las mujeres listas.]

 

[¿Oh? Estoy honrada.] Bridget le dio una risa ruidosa y fingida, luego le ofreció una sonrisa que cualquier otro se habría enamorado de inmediato. Pero sus ojos ámbar eran fríos. Ella era demasiado lista para aceptar innecesarios halagos.

 

Felix levantó su copa a sus labios otra vez mientras Bridget, pareciendo haber recordado algo, dijo. [Oh sí. Me pregunto— ¿La Contadora Monica Norton se incluye en su lista de mujeres listas?]

 

[¿Qué crees? Me gustaría oír tu opinión.]

 

Bridget bajo sus largas pestañas y pensó por un momento, escogiendo con cuidado sus palabras. [Desde mi perspectiva, la chica tiene las cualidades de un erudito por naturaleza. Si se le da el equipo necesario, se emocionaría. Pero es una mala oradora y no es hábil al negociar. Si piensa tan bien de ella, señor, ¿no había otras opciones disponibles para usted que asignarla a ella al consejo estudiantil?]

 

Realmente es una mujer lista, pensó. En momentos así, Bridget era capaz de entender la razón desde un punto lógico más que uno emocional— un objetivo punto de vista más que uno subjetivo. Estaba haciendo un objetivo comentario que Monica no era para el consejo estudiantil.

 

Los labios de Felix se levantaron levemente, sus ojos azules se fruncieron lentamente. [Cuándo la ve, piensa, ¿por qué no puede hacer algo tan simple como esto…?]

 

Bridget tampoco lo negó o confirmó, en cambio se mantuvo en silencio, tratando de medir las verdaderas intenciones del otro.

 

Feliz le dio una cálida sonrisa. [Es como ver a mi pasado yo, ¿no?] Pero aun su hermoso rostro y amigable sonrisa no fueron capaces de penetrar la sonrisa de hierro de Bridget. Regresó su copa a su taza y se paró. Aún temprano, pero su reunión había sido larga. [Muchas gracias por el té. Y por el buen rato con tu compañía, Lady Bridget.]

 

[Y digo lo mismo… Esto valió la pena. Gracias, Su Alteza Real.]

 

Sonriendo, Bridget era una noble perfecta sin fallas.

 

Mientras se alejaba del cuarto de té, Felix suspiró rápido… Como es usual, no puedo bajar mi guardia con ella, pensó. Quizás le di demasiado esta vez. Pensándolo, se le dio por ver por la ventana— y lo que vio afuera hizo que sus ojos se abrieran. [Eso es…]

 

Atrás de la escuela, Glenn estaba trabajando duro. Solo a la vista, estaba reuniendo grandes piedras. ¿Para qué estaba haciendo eso?

 

Felix había mantenido su guardia cerca del estudiante transferido. Las personas habían estado hablando acerca de un joven mago derrotando al dragón de tierra que había atacado la ciudad de Craeme. Los rasgos del mago igualaban los de Glenn, probablemente había sido quien lo hizo.

Y se había transferido aquí para matarme u observarme… pensó.

 

También había estado cauteloso de cualquier conexión entre él y Monica, ya que se habían transferido al mismo tiempo. La razón por la que se había ofrecido a ayudarlos con la clase de baile fue para que pudiera observarlos juntos.

 

Los había observado a los dos todo el tiempo que los había ayudado, pero no había sido capaz de conseguir algo. Por el momento, parecía que no tenían conexión.

 

Probablemente debería continuar siendo cauteloso con Dudley en el futuro…

 

Mientras lo pensaba, observando a Glenn por la ventana, Monica, Neil, Lana y Casey llegaron. Al parecer, todo el grupo de baile de salón estaba ayudando a Glenn.

 

Primero, pusieron una reja de hierro sobre las piedras que Glenn había reunido. Prendieron fuego por debajo y rápidamente empezaron a alinear tiras de carne encima.

 

Oh, wow…

 

Felix había estado planeando en volver al dormitorio, pero cambió de plan y rápidamente se dirigió al jardín trasero.

 

✽✽✽✽✽

 

Luego de pasar el examen de baile, Glenn había sugerido tener una pequeña fiesta de celebración. [Conseguiré todo lo que necesitemos— ¡El lugar y la comida!] Exclamó, tocando su pecho. Todos los demás habían pensado que sería una fiesta de té, pero en cambio, aseguró un lugar afuera, detrás de la escuela, y preparó una gran cantidad de carne. Lo que vino después fue obvio.

 

[¡No podemos tener una celebración sin carne!] Glenn dijo, empezando a parrillarla.

 

Casey le ayudó, sus movimientos eran rápidos un concisos. [Tienes razón.] Dijo, asintiendo. [La carne es obligatoria.] Ella lo cortó en dos hábilmente, era difícil creer que ella era una noble.

Por sorpresa, Lana estaba entusiasta con el prospecto— o al menos interesada en ello. Como la hija de un mercante rico, observó con curiosidad mientras Glenn y Casey se ponían a trabajar.

 

Iba contra las reglas de la escuela, pero ya que Lana no estaba para detenerlos, Monica y Neil— los dos miembros del consejo probablemente irían con el grupo— solo podían quedarse en silencio y observarlos.

 

[Parece que es bastante fácil hacer esto.] Lana dijo, mirando a Glenn. [Por cierto, ¿de dónde sacó toda esa carne?]

 

Glenn sonrió. [Hehehe. Pasa que vengo de una familia de carniceros. Solo tome un poco de casa… er, digo… ¡Hice que me enviaran un carruaje aquí!]

 

Al parecer, solía usar su magia de vuelo para volar y conseguir la carne de su familia. Su maestro le había prohibido usar hechicería sin supervisión, pero parecía que había estado haciendo lo que quería cuando quería.

 

Confundida, Lana preguntó. [¿Eres de una familia de carniceros? ¿Te inscribiste aquí para convertirte en el asistente de alguien?]

 

Cualquiera que pudiera pagar la cuota de inscripción podría en la Academia Serendia, incluso si no eran nobles. Recientemente, se había vuelto un tipo de símbolo de estatus para traer sirvientes para educación avanzada, así que no era inusual.

 

Pero Glenn agitó su cabeza. [Soy aprendiz de mago. Y mi maestro de pronto me dijo, “Ve a la Academia Serendia.” También paga por todo.]

 

Casey, quien había estado alineando brochetas de carne en el asador, lo miró, con ojos abiertos. [La cuota de inscripción para esta academia es bastante cara. Tu maestro debe ser algo— me imagino que es una figura famosa.]

 

[¿F-Famosa? No sé a qué te refieres, en serio, pero mi maestro es bastante fuerte— nunca había visto nadie tan fuerte.]

 

[Cuando dices fuerte… ¿Te refieres a alguien como el Mago Artillería, o quizás la Bruja Silenciosa, quien mató a ese dragón negro?]

 

Glenn volteó la brocheta de carne. [¡Ninguno! Oh, la carne se ve bien. ¡Sip! ¡Aquí va!]

 

Moviendo el fuego un poco para ajustar el nivel de la llama, les entregó a todos brochetas de carne. Tomando una para sí, la levantó al cielo.

 

[Bien, ahora que todos tienen uno…] Dijo. [¡Es tiempo de celebrar que Monica y yo pasamos el examen! ¡Comamos…!] Abrió su boca y se tragó la carne.

 

Monica siguió, dudosamente poniendo la carne en su boca. El perfecto cordero dorado tenía un poco de olor, pero las especias añadidas lo hacían fácil de comer. Nunca le había gustado mucho el cordero, pero tenía que admitir que era delicioso.

 

[Yo, um… No se me da mucho el cordero, pero… esto es, um, fácil de comer.]

 

Oyendo los leves halagos de Monica, Glenn se puso rígido. [Heh-heh. Usé una especia secreta pasada en la familia Dudley. ¡La vendemos en tiendas también, así que véanlo cuando puedan!] Añadió, haciendo un poco de promoción, digno de su linaje mercante.

 

Neil, con tono serio, añadió. [Se ha puesto más fácil conseguir sazonadores ahora, ¿huh? Aunque aún depende en la región que estés.]

 

Lana dejó de comer la carne en su brocheta e intervino. [Creo que es parcialmente debido a que la ciudad del Dóle del Sur está expandiendo sus puertos… Pero mi padre dice que el Imperio aún está sin asentarse luego del cambio de liderato y que algunos mercantes están esperando ver cómo resultan las cosas. Se quedan en un puerto en este reino cerca del Imperio.]

 

Neil asintió en acuerdo. [Dependiendo en las nuevas medidas políticas del Imperio, hay una posibilidad que los mercantes vengan todos a la vez. Oí que el actual emperador está poniendo muchas políticas progresivas en efecto.]

 

 

Mientras escuchaba, Monica pensó. Ahora que el Imperio había removido su ban en la magia de curación, muchos magos estaban cruzando la frontera. Los mercantes podían decidir seguir su ejemplo ahora. Y cuando las personas se reúnen, el negocio prospera. El Imperio probablemente vería más desarrollo en marcha.

 

Por otra parte, el Reino de Ridill estaba lidiando con las confrontaciones entre los nobles centrales, quienes estaban desesperados por mantener el status quo, y los nobles en el país. Además, los nobles estaban divididos entre tres facciones— cada una apoya a cada príncipe.

 

Pero… yo no tengo interés en conflictos políticos.

 

Como uno de los Siete Sabios, a Monica se le había concedido el derecho de tener audiencias con el monarca gobernador con el fin de hablar con ellos directamente. Pero el poder político y el estado del reino no estaban en su lista de preocupaciones.

 

¿Me pregunto qué es lo que Mr Louis quiere de mí…?

 

Si quería asegurarse que el segundo príncipe estaría a salvo, había un gran número de capaces candidatos para el trabajo. Aunque a propósito envió a la inepta y tonta Monica para hacerlo. ¿Por qué?

 

Él no… no quería enviarme aquí porque soy inútil, porque causaría la caída del segundo príncipe, ¿verdad…?

 

Que no pudiera negar del todo la posibilidad era lo que hacía Louis tan terrorífico. Mientras pensaba en eso tranquila, la retorcida sonrisa en los apuestos rasgos de su colega, la grasa de la carne se deslizaba sobre su mano.

 

Nerviosa, lo limpió con un pañuelo mientras Lana sonreía y decía. [Deberías sostener la brocheta horizontalmente cuando la comes. De esa manera, la grasa no te caerá.]

 

[B-Bien…] Monica inclinó su brocheta horizontalmente.

 

Casey, quien los había estado observando, lamió la grasa de sus dedos y dijo. [Sabes cómo comer brochetas, ¿huh, Lana? Me imaginé que se te haría desconocido cosas como esta. No era una noble rural como yo lo soy, ¿cierto?]

 

[Mi tierra tiene muchos festivales, así que estamos bien acostumbrados a comida que puedes comer mientras caminas. Aunque la mayoría de personas criadas en la capital no son así, supongo.] Lana miró a su brocheta. [Hay puestos de castañas asadas y puestos de jugos de fruta en la capital, pero no encuentro mucho de brochetas. Apuesto que una tienda de brochetas sería bastante popular… pero hay muchas restricciones para empezar negocios y abrir puestos abiertos en la capital, así que…]

 

Lana no solo era experta en lo más viral— ahora estaba muy metida en cosas mercantiles. Esas eran el tipo de inesperadas facetas que una persona nunca llegarías a ver a menos que la oportunidad correcta salga.

 

Casey era del tipo cuidador, algo como una hermana mayor. Siempre estaba velando por esos a su alrededor, y siempre muy considerada. Glenn era un poco despreocupado, pero tenía buen poder de observación. Neil será fácil de dejarse llevar por el momento, pero era sincero, el tipo de persona de corazón.

 

De vuelta a cuando había asistido a la Institución de Entrenamiento de Magos Minerva, Monica había rechazado contacto con otros y nunca trató de saber de ellos. Pensaba que no había razón para hacerlo, que era inútil. Esa vez, nunca había imaginado que llegaría el día cuando estaría afuera cocinando carne detrás del edificio escolar con un grupo de personas.

 

La carne está… bueno… El rostro de Monica puso una sonrisa. Mordió la carne, un feliz sentimiento en su corazón.

 

Terminando a un paso dos veces más rápido que el de Monica, Glenn empezó a cocinar más.

 

Los ojos de Neil se abrieron. [¡Glenn, ¿aún estás comiendo?!]

 

[¡Esa no fue suficiente comida!]

 

[¡Pero ya estoy lleno!] Neil exclamó, sosteniendo su estómago.

Glenn jadeó. [¡Tienes que comer más o no vas a crecer grandotote y fuertotote!]

 

La luz dejó los ojos de Neil. [Me llamaste indirectamente una ardilla, ¿verdad? Lo hiciste, ¿verdad?]

 

Ya que Glenn era más alto que los otros chicos de su edad, Neil era más bajo del promedio. Neil normalmente era cordial, pero ahora se le acercó a Glenn, su expresión era blanca. Glenn se agitó.

 

Ese es un nuevo lado para Neil también. Monica estaba observando su intercambio con una sonrisa, cuando oyó una voz.

 

[Hey, parece que todos se están divirtiendo.]

 

El grupo de inmediato empezó a hablar y se giró a ver a la fuente de la voz. Y allí estaba, sin compañía: el presidente del consejo Felix Arc Ridill.

 

Los ojos de Lana y Casey se abrieron. Neil se puso blanco y dijo. [¡Presidente! Esto es, um, verá…]

 

Mientras Neil se agitaba, Felix bajaba sus cejas y liberaba un suspiro de decepción. [En serio… ¿dos miembros del consejo estudiantil, rompiendo las reglas a plena luz del día?]

 

Un hombre, sin embargo, blandió su brocheta y objetó— Glenn Dudley, el hijo de carnicero. [¡No hay reglas contra cocinar carne en el jardín!]

 

[Cualquier fogata fuera de las áreas designadas requieren una petición hecha para el consejo estudiantil.]

 

[¡Ya que está aquí, no hay problema! ¡Presidente! ¡Por favor, permita esto!] Glenn siempre hacía lo que gustaba, pero este era un nuevo nivel. En realidad era refrescante.

 

Felix mantuvo al resto del grupo a su vista ya que se veían en suspenso. Luego, abrió sus brazos, puso su mirada en Glenn. [Necesitas enviar la papelería un día antes.]

 

[Ah, mierda. Ya veo. ¡Oh! ¿Le gustaría uno, Presidente?] Glenn preguntó, ofreciendo una brocheta a Felix.

 

¡No tiene sentido del miedo! Monica pensó mientras ella y los otros jadeaban.

 

Felix la miró por un momento… luego dijo. [Claro. Comeré una.] Y tomó la brocheta.

 

Tranquilamente, Neil prácticamente temblaba. [¡¿Se la está comiendo?!]

 

Felix mordió la carne en la brocheta. No la sostuvo verticalmente o no se lleno de grasa en sus manos como Monica lo hizo.

 

[Está bueno.] El príncipe dijo. [Muy bien sazonada.] Mientras todos los demás se veían en puro desconcierto, les dio un guiño. [Ahora soy un cómplice. Mantendrán en secreto mi pequeña rebeldía, ¿verdad?]

 

Nadie iba a ir contra la palabra de la realeza. Todos asintieron. Glenn rio. [¡Hay mucho de dónde eso vino! ¡Nos ayudó con el baile, así que considérelo un agradecimiento! Oh, cierto— ¿debería llamar al vicepresidente?]

 

Neil agitó su cabeza como loco. [¡M-Mejor no!]

 

Monica afirmó. Si el sensible y gruñón Cyril Ashley estuviera presente, de seguro se alocaría y empezaría a gritar en lo inexcusable que era. O quizás vería a Felix comer la brocheta de carne y dudaría.

 

Como sea, Monica estaba divirtiéndose, y no quería terminar. En secreto lanzó un hechizo sin cántico para alterar la dirección del viento, manteniendo el humo de la carne cocinándose lejos del edificio escolar.

 

✽✽✽✽✽

una vez la fiesta secreta detrás de la escuela se terminó, Monica regresó a su ático en el dormitorio de chicas para encontrar a un gato negro y una maid sentándose en el suelo y leyendo juntos.

[Bienvenida, Bruja Silenciosa.]

 

La maid cerró su libro, luego se reverenciaba una y otra vez. Ella era Rynzbelfeid, apodada Ryn, el espíritu contratado por el Mago Barrera Louis Miller. Como un alto espíritu de viento, era particularmente adepta a la magia de vuelo, así que había estado actuando como el punto de contacto de Monica durante su misión encubierta.

 

Parecía muy pronto para su reporte regular. ¿Su presencia significaba que una emergencia salió? Monica trató de ocultar la tensión lavándose.

 

Nero, quien había estado leyendo un libro a la par de Ryn, cerró la cubierta con su pata frontal y miró a Monica. [Parece que te trajo un presente.]

 

[¿Un presente?] Monica preguntó.

 

[Sí.] Ryn dijo. [He venido trayendo un regalo del mi maestro dirigido a la Bruja Silenciosa. Por favor, acéptelo.] Ella recogió un objeto envuelto en papel que había colocado cerca del muro y…

 

[Durururu…] Con una maravillosa lengua trabada, hizo un extraño sonido. ¿Estaba tratando de imitar un tambor?

 

Monica estaba confundida, pero Ryn continuó, con expresión pasiva. [Pa-pa-pa-paan.]

 

Primero un tambor, luego un falsete de trompeta. De haberlo hecho una pequeña, habría sido adorable. Pero una hermosa maid produciendo esos sonidos en un tono monótono era surreal.

 

[Um, er, ¿Miss Ryn? ¿Qué… qué fue eso?]

 

[Leí en un libro que los humanos tocan instrumentos en situaciones como esta. Sin embargo, debido a mi falta de habilidad, reproduje sus sonidos oralmente.]

 

 

Estaba hablando de ceremonias hechas en castillos. Monica nunca había oído de alguien tocando instrumentos durante una conversación regular. Y era bueno que no hubiera llevado uno— si hubiera hecho un tambor y sonado una trompeta, no habría pasado desapercibido.

 

[D igual, aquí tiene.] Ryn entregó el paquete envuelto en papel ataco con un listón rojo.

 

[Uh, bien… Gracias…]Muy dudosa, Monica desató el listón. Dentro, encontró un vestido azul y una túnica blanca.

 

El vestido no era del tipo extravagante que usaría para un baile, sino uno para uso diario. Ambos tenían un diseño simple y sin adorno, pero Monica estaba agradecido con ello.

 

[¡Wow! Um, ¿realmente está bien que… tenga esto?]

 

[Sí. Lord Louis me dijo: “Supongo que puedes decirle que es una recompensa por capturar a Victor Thornlee. Tienes que saber cuándo presionar y cuándo alabar. Hahaha.”]

 

¿Se suponía que dijera la última parte? Monica logró una sonrisa, luego sostuvo el vestido nuevo y la túnica para cubrir su cuerpo. Eran del tamaño perfecto.

 

Quizás lo usaré la siguiente vez que vaya de compras con Lana en la ciudad. Pensó, inclinándose ante Ryn. [Um, yo… Gracias. Le escribiré una carta de agradecimiento a Mr Louis, así que por favor espera un momento.]

 

Luego de colgar el vestido y túnica, tomó asiento en su escritorio y saco sus instrumentos de escritura.

 

Quería expresar su agradecimiento por el vestido a Louis que se lo había dado. Desde que llego a la academia, Monica tenía el pequeño objetivo de llegar al punto donde pudiera decir gracias.

 

Mientras Monica luchaba por escribir sus pensamientos, Ryn llegó a su par y dijo. [De acuerdo al anterior reporte, parece que experimento una incursión de algunos individuos pretendiendo ser parte de una compañía comercial.]

 

[S-Sí…]

 

[Ante esta situación, a Lord Louis le gustaría que enviara un plan de seguridad para el día del festival escolar con su regular reporte programado.]

 

[¿Un…plan… de seguridad…?]

 

Podía pedirlo, pero Monica sabía absolutamente nada cuando se trataba de seguridad. Tendría problemas con un simple plan.

 

Los ojos verdes de Ryn observaron a la chica y su agitada expresión de cerca. [Por ejemplo.] Sugirió. [Si fueras un asesino, ¿cómo abarcaría el matar al segundo príncipe?]

 

[¿Si fuera un asesino…? Hm…] Monica cerró sus brazos y pensó en la pregunta del espíritu.

 

Nero tomó la oportunidad para saltar al escritorio y decir. [Si Monica fuera un asesino, no necesitaría darle muchas vueltas. Ella solo sacaría un poderoso hechizo de ataque en la academia desde lejos y se acabaría en un instante.]

 

[Nero, así no es cómo funcionan los asesinatos.] Monica dijo, agitada por la sugerencia de su familiar. Entonces repitió lo que Louis le había dicho antes. [Mira, esta escuela tiene una barrera defensiva alrededor. No puedes atacarla del exterior.]

 

[¿Es cierto?]

 

[Mm-hmm. Mr Louis tiene una barrera alrededor de básicamente cada importante edificio en el reino, así que no tendríamos que preocuparnos de un ataque exterior.]

 

Louis Miller era conocido como el Mago Barrera. Como su nombre implicaba, técnicas relacionadas a barreras eran su área de experiencia. La escala, fuerza, precisión y duración de sus barreras estaban más allá de lo que cualquiera podría lograr. Esta academia, también, se jactaba de una gran barrera la cual Louis le había puesto su tiempo y trabajo.

 

[Creo que probablemente es una barrera de rango amplio y defensa a gran escala con una fórmula de detección añadida. Normalmente está inactiva, pero cuando siente un ataque del exterior, de inmediato se levanta. Probablemente está escondida en secreto, el dónde será difícil de encontrar.]

 

Pero la barrera tiene su debilidad— ya que podía lidiar con ataques del exterior, no podía responder a aquellos creados en el interior. Una vez en la academia, un criminal también podía reescribir la fórmula de la barrera e inutilizarla.

 

Sintiendo la preocupación de Monica, Ryn dijo. [No será un problema. Nadie podría reescribir la barrera en primer lugar.]

 

[¿P-Por qué… no?]

 

[En otro momento, Lord Louis estaba reclinándose en su silla y dijo lo siguiente.] El espíritu se paró y replicó el comentario de Louis en su propio tono monótono. [Mis barreras defensivas tienen trampas instaladas. Si alguien quiere reescribir una, son bien recibidos a intentarlo. Hahaha.]

 

Mientras Ryn reproducía esas palabras, Nero frunció sus ojos y gruñó. [¿Qué está haciendo ese chico, incluyendo una barrera con trampas mortales?]

 

[Al parecer, hubo un incidente en otro edificio donde un intruso intentó reescribir la fórmula mágica. Así, Lord Louis decidió ponerle una trampa que se activaría cuando alguien trate de reescribirlo.]

 

Eso es muy propio de Louis. Monica pensó con una sonrisa.

 

Nero la miró, asombrada. [¿Un asesino barrera? Nunca oí tal cosa. Vaya, los Siete Sabios son una panda de maniáticos. ¿Eh?]

 

[Haaah…]

 

Monica no tenía respuesta para eso.