Capítulo 1
Nunca Sabrás lo que la Vida te Deparará
[Hey, Yuya. ¿Dónde está tu padre
ahora?]
Fue un día durante el invierno de mi
primer año de secundaria-
Yo, Yoshizumi Yuya, sentado en la sala
de mi casa estaba enfrentando a un grupo de hombres de mala cara usando trajes
negros y lentes de sol con cicatrices en sus mejillas. Para los exteriores,
parecía como una panda de personas peligrosas.
[Ni idea. Acabo de llegar a casa hace
un momento. Todo lo que encontré fue
esto en la mesa…]
Entregue una nota de la mesa a la
persona que parecía el jefe de grupo de miedo. Luego de quitarse sus anteojos
de sol y terminar de leer la nota, sus hombros empezaron a temblar.
Oh, de verdad parece estar enojado
ahora.
[Ese bastado… ¡Por fin se huyó…!
¡Incluso dejo a su hijo solo! ¡Qué bastardo!]
“Nunca sabrás lo que pueda pasar en
la vida”. Eso es lo que mi padre solía decir.
Solía ir por la última moda esperando
hacer una fortuna, pero siempre estaba un paso atrás. Así que, para el momento
que inicio, los caros objetos ya estaban fuera de moda y al final se quedó con
nada más que mercancía sin vender junto a muchas deudas.
¿Qué fue la última cosa que intento?
Creo que fue Tapioca, pero honestamente no quiero recordarlo.
Para tal falla como mercader, mi madre
amaba a ese inútil hombre que no poseía ningún talento en negocios. Mi madre
tenía cara de bebé que parecía que nunca envejecería. Incluso cuando caminaban
juntos, eran confundidos como hermano y hermana varias veces. Ella era hermosa
y también buena cocinera, y como su hijo, me sentí orgulloso de mi madre. Es
por eso que una vez le pregunté por qué se casó con tal inútil persona. En
ese momento, respondió tímidamente:
[Bueno, ¿no crees que es bueno ver a
alguien quien es estúpido, sino también está trabajando duro en su propia
estúpida forma? Tu madre ama a tal hombre.]
El amor te hace ciego, así es como iba
el dicho. Cuando veo que las personas estaban trabajando duro, no tengo nada
más que respeto por ellas. Pero en el caso de mi padre, realmente rebasa los
límites. Quería predicarle que las personas deben aprender de sus errores.
Pero la única persona a la que
realmente necesitaba decírselo era a mí mismo.
No le dije nada a mi padre, quien
empezó un nuevo negocio y falló, llevando deudas, y también a mi madre, quien
lo apoyaba y lo alentaba. El resultado era el desastre que era ahora
mismo.
[Taka-san. ¿Cuánto dinero mi padre te
presto esta vez?]
[¿Oh? No, no te culpo por no saberlo.
Eso es… Bueno, cerca de 30 millones de yenes. Tu padre siguió prestando dinero,
prometiendo pagarlo, y por eso la deuda ha crecido desde entonces.]
Mientras decía eso, Taka-san y sus
hermanos bebieron su té. Oh, olvidé mencionarlo, pero no estoy asustado
de estas personas. He conocido a Omichi Takashi, alias Taka-san desde que
estaba en primaria. Era un hombre fuerte y tenía un duro trabajo, pero ha sido
bueno conmigo. Es como un hermano mayor para mí, a pesar de nuestra diferencia
de edad.
Aunque, una deuda de cerca de treinta
millones de yenes… Incluso con el dinero que he ahorrado en mi cuenta personal
de los regalos de Año Nuevo y mi trabajo de medio tiempo en verano, usarlo
sería una gota en una cubeta. Y ese trabajo solo era para el verano, así que no
estoy trabajando ahora. ¿Qué haré ahora?
[Mierda. Kotaro, bastardo. Finalmente
dejaste atrás a Yuya y huyó al extranjero. Y lo que es más, ¿dejaste el resto a
los abogados? ¡Bastardo ¿cuánto puedes subestimar a las personas antes que
estés satisfecho?!]
Cuando llegué a casa, no encontré a mi
madre allí y las luces fueron encendidas, como normalmente deben estar. Cuando
entre al cuarto preguntándome por qué, había una carta en la mesa, dicho eso:
— ¡Yuya! ¡Sé que es repentino, pero tu madre y padre han decidido irse
al extranjero! ¡Al parecer, Japón parece ser demasiado pequeño para nosotros!
¡Dicho eso, vamos a ganar el premio gordo en los casinos en las Vegas,
así que por favor espéralo! ¡No te preocupes, tengo un amigo abogado que se
encargará del resto! ¡Bye! —
Para ser honesto, dudé en las palabras
de mi padre, pero debió haber sido serio porque las pertenencias de mi padre y
madre faltaban en la casa. ¿Qué se supone que haga ahora solo? Cuando estaba perdido en qué
hacer, Taka y sus amigos llegaron, creando esta situación.
[Aunque naciste de tal pareja, Yuya,
creciste bien. ¿No es un milagro? No, ¿quizás es gracias a mí?]
[Haha… Bueno, al menos descubrí que mis
padres eran las peores personas a mi alrededor. Pero ¿qué tienes planeado hacer
ahora, Taka-san?]
[Ah, acerca de eso. esta vez, incluso
mi jefe no lo dejará pasar, y ya no puedo ayudarte con la situación. Tengo que
llevarte conmigo.]
Taka dijo eso con una triste mirada en su cara. Y sus hermanos también alejaron
sus cabezas.
Ya veo, tengo que lidiar la deuda ahora
en lugar de mi inútil padre y probablemente es demasiado ahora mismo. ¿Mi vida
termina aquí?
[Despreocúpate, Yuya. He persuadido a
tu padre para que te deje quedarte conmigo. Haré todo en mí para que estés
seguro de vivir apropiadamente, relájate.]
[¡Eso es, Yuya! ¡Lo mejor para ti es
permanecer como eres, un estudiante normal de secundaria!]
[¡No puedes ser como nosotros, Yuya!]
Taka-san mordió sus labios y dijo eso
con una determinada apariencia en su cara. El resto de sus hermanos siguieron,
apretando sus puños y animándome. Sus caras no me dan miedo. Bueno, tienen
caras de miedo, pero eran personas muy buenas. Quizás era también por eso que
mi padre se dejaba llevar con ellos.
[Bien. Perdón por hacerlo así, pero te
vendarás conmigo, Yuya. Te honraré con mi perfecta dogeza.]
Es genial que me estén dando ánimos con
una mirada determinada, pero esa frase se ve bastante lamentable, Taka-san-
mientras me paraba con una sonrisa incómoda y me dirigía a la cocina a lavar
los platos que habíamos usado…
Ding-dong. Ding-dong.
El timbre anuncio a un nuevo visitante.
¿Quién podría ser? Es demasiado temprano para el recolector del periódico. ¿Un
testigo de Jehová? No, me les he escondido muchas veces. He pagado las cuotas
públicas, ¿y quién puede ser?
Ding-dong. Ding-dong.
Luego de dos o tres veces, el intervalo
entres los timbres gradualmente se acortaron. Con eso, luego de varios
timbrazos, el coro del siguiente sonó también. Era tan ruidoso que Taka y yo
tuvimos que cubrir nuestros oídos. No tuve más que responder.
[¡Sí, sí! ¡Ya voy! ¡¿Quién es?!]
Abrí la puerta del frente, estando un
poco frustrado de eso. Parándose allí era…
[Hola, Yoshizumi-kun. Vine a ayudarte.]
La chica el frente de mí tenía largo y
liso cabello negro claro que me recuerda al cielo nocturno. Sus ojos eran como
perlas, tan redondas como un gatito. No estaba mal compararla con modelos a
menudo vistas en revistas, parecía como una diosa fuera de una famosa pintura.
[¿Hitotsuba Kaede?]
Hitotsuba Kaede. Probablemente no hay
un solo estudiante en la Secundaria Privado Meiwadai que no conozca su nombre. Si
la hay, están viviendo bajo una Piedra o son unos tontos.
La princesa de nuestra escuela, quien
había ganado el Gran Prix en el concurso Señorita Nacional de las Secundarias
para Chicas y había sido votada como la chica más linda de secundaria en Japón,
estaba parada allí sonriendo.
Incluso al inicio, Hitotsuba-san era la
chica más bella en la escuela, con apariencia madura y proporciones que iban
más allá de cualquier estudiante, junto con su ocasional sonrisa descrita como
la sonrisa de una diosa, cautivando a hombres y mujeres. También era uno de
esos que la admiraban. Solo la admiraba, digamos. No es que me guste ni nada.
Pero ¿Hitotsuba-san incluso sabe quién soy? Estamos en clases diferentes y
estoy seguro que nunca hemos hablado.
[¿Ocurre algo, Yoshizumi-kun? Tu cara
está roja. ¡¿Puede ser que quizás tengas un resfriado?! ¡Eso es terrible!
¡Necesitas ir al hospital de inmediato—!]
[¡No, está bien! ¡No tengo fiebre!
¡Estoy perfectamente bien!]
[¿Así es eso…? Pero en caso, lo
revisaré.]
“¡Gyah!” Dejé salir un grito, pero fue
uno sin sonido.
Eso fue porque Hitotsuba-san se quitó
sus guantes que estaba usando y puso su hermosa mano, la cual estaba tan limpia
como fresca como la nieve, en mi frente. Mi temperatura corporal. Puedo
sentirme quemarme, no solo mis mejillas, sino todo mi cuerpo.
A ella no le importo mi nerviosismo.
Luego de un rato, asintió con su cabeza. Era un lindo gesto en sí mismo, pero
con sus mejillas infladas, su poder destructivo era potenciado.
[Hm… Tu frente está un poco caliente,
¿no? Es mejor que vayas a un hospital…]
[¡No, está bien! ¡Es solo tu
imaginación! ¡Mira, estoy seguro que es porque estaba en un cuarto caliente
hasta ahora! Más que eso, ¿por qué viniste a mi casa? ¿A qué te referías con
ayudar?]
[¡Oh, eso es! Yoshizumi-kun, ¿puedo
entrar a tu casa?]
Quería declinar amablemente. Había un
número de hombres ya en el cuarto incluyendo a Taka-san, quien estaba todo
vestido emanando una aura dominante y presión. Sabía que se veía del miedo al
exterior, pero por dentro era un hombre amable. Sin embargo, si alguien como
Hitotsuba-san fuera a encontrarlos por primera vez, puede asustarse. Es por eso
que quería detenerla de entrar con todas mis fuerzas, pero…
[Hey, Yuya. ¿Tienes vistas? Lo siento, diles
que vuelvan luego. Estamos por irnos.]
Qué mal momento. ¡Por qué vino a la
entrada en este preciso momento, Taka-san! ¡Estaba por pedirle que se vaya
porque no quería que Hitotsuba-san te viera! ¡Ni a tus hombres! Estaba por
pedirle que se fuera porque no quería que se reuniera contigo.
[¡¿E-E-E-Ella es Hitotsuba Kaede-san?!
¡Wow… es más linda de lo que se ve en internet!]
Uno de los hombres de Taka-san estaba
respirado profundamente al momento que vio a Hitotsuba-san. Las fotos y vídeos
que posteaba en las redes sociales durante el concurso fueran tan lindas que
causaron un gran furor en X, incluso convirtiéndose en artículos de noticias
centrales. “¡Una Angelical Chica de Secundaria Aparece!” Así que no es sorpresa
que los hombres de Taka-san supieran quién era Kaede-san.
[Hey, ¿conoces a esta Ojou-chan?]
[¡¿No lo sabes, Taka-san?! Ella es
Hitotsuba Kaede. ¡Ella es la chica hermosa que fue escogida como la más linda
chica de secundaria en Japón!]
Uno de sus hombres empuño sus puños y
explicó con una intensidad que parecía que estaba por golpear a Taka-san. Mientras
la tensa atmósfera se apaciguaba, Hitotsuba-san, el tema de todo esto, no
mostró miedo frente al cara dura de Taka-san y sus compañeros, y con una
sonrisa de diosa dijo.
[Justo en el momento. Quería hablarte,
Omichi Takashi. No, sería mejor llamarte Omichi-san, ¿el segundo al mando del
Clan Haratsu?]
Ella de inmediato tiro una bomba en
nosotros. ¡¿Cómo llego a saber acerca del clan que Taka-san estaba
afiliado e incluso su posición en ello?! ¡No se supone que sea parte de tal
sangriento mundo! Incluso Taka-san, quien había sido amable, ahora
tenía una pista de instinto asesino en sus ojos. La miro con tal instinto, cual
nunca había estado dirigido a mí.
[¡Ta-Taka-san! ¡Cálmate! ¡No hagas tal
cara de miedo! ¡Cuando trabajaste en la venta de Yakisoba en el festival,
¿olvidaste a esa chica que vio tu cara de miedo y huyo llorando?! ¡Dijiste que
ibas a ser un chico bueno luego de eso!]
[Perdón, Yuya. Esa fue una historia
diferente a la de aquí… Hey, señorita. Parece que estás usando el mismo
uniforme que Yuya… Dime, ¿quién eres?]
Mi hermano mayor Taka-san, quien fue
tan amable conmigo hasta hace un momento, había desaparecido, y parado allí
estaba Omichi-san, el joven líder de la pandilla. Le cuestionó a Hitotsuba-san
con la misma presión que solía tener con mi padre cuando le estaba gritando.
Pero no se asustó en nada y respondió:
[Mi nombre es Hitotsuba Kaede. Oh, no
necesitas recordar mi nombre. En efecto, no creo que incluso puedas recordarlo,
así que por favor olvídalo de inmediato.]
[¿Oh? ¿Me estás tomando el pelo?]
[Bueno, ¿sobre qué debería decirte
entonces…? Luces como una persona con solo una célula en tu cerebro, a quién le
creerías si fueras a ver a las personas así se asustarían. Oh, no lo digo por
ser grosera. Pero, comparado contigo un organismo de una sola célula fue
bastante irrespetuoso para todos los organismos de una sola célula que existen
en este mundo. Lo siento por eso. Además, esa corbata tuya se ve del orto.]
¡Por qué te estás riendo y sacando
mierda, Hitotsuba-san! ¡Taka-san ha sido un buen trabajador, así que es bueno
que incluso se volviera en el número dos en su grupo a su edad! Pero por favor
no me preguntes qué tipo de trabajo hace. No quiero saberlo tampoco.
[Haha… ¡Por cómo te miras, tienes una
lengua bastante venenosa! ¿Así que no eres una conocida de Yuya? Puedo
castigarte en varias formas, ¿sabes? ¡Pero, toleraré tus palabras por esta
vez!]
[Hey, Yuya… Crees que también soy un
idiota, ¿verdad? Puedo verlo en tu cara.]
¿Realmente eso es? No no, no me estaba
burlando de ti, Taka-san. De hecho, te tengo mucho respeto.
[Huh… Hitotsuba Kaede era tu nombre,
¿huh? Has estado tirando mucha mierda, pero aún no has respondido mi pregunta.
Te preguntaré otra vez. ¿Quién rayos eres?]
[Hitotsuba Yoichiro. Ese nombre debería
serte familiar, ¿cierto?]
Bueno, ese nombre no me sonaba. Tenía
una corazonada de lo que el padre de Hitotsuba y otros estaban relacionados a
ella, pero Taka-san parecía saber qué tipo de persona era. Su cara, la cual
había estado roja con enojo y frustración, estaba sorprendido, gradualmente se
puso azul.
[¡El Director de la Oficina de
Investigación Criminal de la Agencia de la Policía Nacional! ¿Tu padre…?]
[No, Yoichiro-san es mi tío. Pero como
mi padre, me ama demasiado. Estoy segura que estaría dispuesto a abusar de su
autoridad un poco si se lo pido.]
[¡Espera! ¿Qué quieres de nosotros?]
[Es simple. Solo deja a Yoshizumi-kun.
Claro, no te estoy diciendo que sea gratis. La cantidad que los padres de
Yoshizumi-kun te prestaron, 39,067,977 yen incluyendo intereses; serán
transferidos a ti después. Así que no te involucres con Yoshizumi-kun otra
vez.]
Hey, hey, hey. ¡Estaba escuchando
tranquilamente, pero la historia se estaba poniendo más y más seria! ¿Puede ser
posible que el tío de Hitotsuba-san sea una persona muy importante en la
Agencia de la Policía Nacional y Hitotsuba-san quería encargarse de toda la
deuda que mi padre adquirió? ¡Por cierto, ese número me suena! ¿Fujisanroku Omu
Naki? ¿Y los pies del Monte Fuji, gritos?
Estaba tan confuso que no podía pensar
en nada más. Solo pensando en ello. ¡Justo cuando estaba en desesperación
porque mis padres habían huido al extranjero y habría empezado a trabajar para
un yakuza a la edad de 16 con el fin de pagar la deuda, una compañera mía quien
había sido votada como la chica de secundaria más linda en Japón llego, y con
una cara fría, fue directo por la cabeza del chico, y sobre todo, ofreció
liquidar la toda deuda por mí! ¿No estarías también asustado?
Pero no se acababa aún. Era porque
alguien más apareció.
[Hey, Kaede. ¡Te dije que no te
adelantaras sin mí…!]
Sin el timbre sonando, abrí la puerta
otra vez y fue recibido por una hermosa mujer quien parecía como una versión
adulta de Hitotsuba. Podía haber estado en un apuro, porque incluso estaba en
medio del invierno, su frente estaba cubierta con sudor.
[Mis disculpas. Mi hombre es Hitotsuba
Sakurako. Soy la madre de Hitotsuba Kaede, y soy una abogada.]
Hitotsuba Sakurako, era la madre
Hitotsuba-san, era alta, mujer delgada, levemente más alta que Hitotsuba-san.
Su rojizo cabello café estaba recortado hasta sus hombros. Tenía una hermosa
cara con cejas bien definidas, las cuales le daban la apariencia de una diosa
de guerra quien trajo la victoria para sus aliados más que una diosa de la
belleza.
[Omichi-san, el joven líder de clan
Haratsu-gumi. Parece que has estado llevando algunos negocios sospechosos.]
Su expresión era calmada. Pero el tono
de su voz sonaba tan filosa como una espada como si nadie pudiera escapar de la
invisible hoja que apuntaba a sus gargantas. Incluso yo, quien no estaba
directamente involucrado en el incidente, podía sentir la presión, así que
Taka-san, quien estaba directamente enfrentándola, podía sentirse aterrado.
[¿Q-Qué se supone que significa? Solo
queremos el dinero que prestamos. Pero fue su padre quien huyo al extranjero
sin pagar lo que le préstamos. Y aunque, no somos responsables, no nos quedó
más opción que demandarlo por el pago, ¿cierto? ¡¿No debería ser de esa
manera?!]
Huh, ¿sorprendentemente parece que
recupero su compostura? No, no hay forma que sea Taka-san. Viendo de cerca. ¡Hay
sudor en su frente y las esquinas de su boca están temblando! Es la prueba
definitiva que está fingiendo.
¡Fue como el momento cuando Taka-san
estaba llevando un puesto de yakisoba a la buena, y pensó que estaba sonriendo
mientras entregaba los bienes, pero lucía como un Hannya a los niños! ¡Se
asustaban y lloraban, y se sintió tan triste luego, que tuvo que contener sus
lágrimas!
[No es lógico. De hecho, el negocio de
préstamo de dinero que estás haciendo está fuera de toda ley. No necesitas
hablar de los montos de interés o algo así, ¿verdad? Eres consciente que estás
rompiendo la ley, ¿cierto?]
[¡Ha! ¡Cómo puedo prestar dinero si le
temo a eso! ¿Y qué vas a hacer con nosotros, abogada? ¿O vas a decirle a los
jefazos en la policía en el departamento de policía? ¿Qué vas a hacer?]
Oh. Taka-san hizo su postura final. Ya
que estoy seguro que su corazón se aceleraba, y que estaba sudando frío, esa
fue una impresionante hazaña para él. En mi corazón, derramé una lágrima para
Taka-san y le aplaudí.
Pero para la madre de Hitotsuba-san,
Taka-san no era más que un enclenque al inicio de un juego. Era como un enemigo
del tutorial con el que nunca perdería.
[“Mi papá es el chico más genial en
Japón, huh”. Eso es lo que tu hija dijo. Es linda, ¿no?]
¡Sin incluso dudar, al instante entrego
un golpe letal a su enemigo! Dándose cuenta de lo que acaba de decir, la cara
de Taka-san mostraba señales de impresión. Hice lo mejor para contener
mi risa.
[Mi papá trabajo duro cada día para mí
mamá y para mí. Deja la casa temprano en la mañana y viene a casa tarde por la
noche. Pero nos da un buen beso de despedida y de buenas noches en nuestras
mejillas, con mi mamá, directo en los labios. “Oh vaya, ¿no es eso algo
demasiado para tu hija de primer grado?”]
[T-Tú… tú… ¿c-cómo descubriste eso—?]
[Besarte frente a tu hija… me preocupa
que será de ella en el futuro…]
Como si se sumara al golpe de su madre,
Hitotsuba-san libero su propio golpe al corazón. Este dúo de madre e hija de
hecho es de miedo.
Taka-san se alejó de ellas; su boca se
abrió como un pescando buscando oxígeno.
Eso es, Taka-san amaba a su hija,
Rika-chan. También estaba enamorado de su esposa. Bueno, ¿cómo sé eso? Es
porque he estado en la casa de Taka-san unas cuantas veces. No, Rika era
muy linda. Sería popular en el future, estoy seguro de eso.
[Pero Omichi-san. Para tu esposa, junto
a tu cariñosa hija, solo te has descrito tu trabajo como un simple asalariado.
¿Qué pasaría si conocieran la verdad?]
[Ah… Eso… bueno… ¡¿Eso está mal?! ¡Mi
esposa e hija no tienen nada que ver con esto!]
[Ese es mi punto. La deuda dejada por
los padres de Yoshizumi Yuya-kun debería ser pagada por sus padres. Yoshizumi
Yuya-kun no tiene responsabilidad de ello.]
No sabía mucho de leyes. Pensé que si
mis padres le causaban problemas a Taka-san y los otros, entonces yo, como su
hijo, debería ser el que limpie su desastre. Además, Taka-san ha sido muy
amable para mí. Era como un hermano mayor para mí.
[Pero no sería conveniente para ti o tu
jefe, así que hagamos un trato.]
Con eso dicho, la madre de
Hitotsuba-san sacó un sobre de la bolsa que sostenía. Taka-san la recibió y
reviso su contenido con una apariencia cautelosa. Luego de una miradita, una
expresión de sorpresa podía verse en su cara.
[¿Estás… loca? Digo, no solo eres una
abogada cualquiera, ¿verdad?]
[No, solo soy un abogado, ¿verdad? Es
solo que me empleador es muy rico.]
La sonrisa de la madre de Hitotsuba-san
lucía muy hermosa, pero el resplandor y la belleza se sentía como una rosa con
sus espinas. Ese tipo de rosa que podía resultar fatal para una persona cuando
la toca sin cuidado. Era la primera vez que había visto tal retorcida sonrisa,
y luego rascó su cabeza unas veces, Taka-san levanto su mano en rendición.
[Está bien. Si está bien contigo, el
trato está sellado. Nunca tocaré a Yuya otra vez. Lo prometo.]
¿Qué? Taka-san, ¿a qué te refieres? ¿La
entera cantidad de 3607977 yenes adeudada sería pagada con el contenido de ese
sobre? ¿Algo así? Eso me asusta.
La deuda dejada por mi inútil padre era
bastante grande. ¿Qué estaba dentro del sobre de Hitotsuba Sakurako que
erradico la deuda entera? Estaba muy curioso, pero Taka-san rápidamente lo
metió dentro de su bolsillo sin mostrarlo. ¿Podía ser eso? Era de esos cheques
que ves en viejos dramas.
[¿Has confirmado que el contenido por
completo compensa la cantidad que ese hijo de puta de Yoshizumi Kotaro te
debe?]
Wow, acaba de llamar a mi padre hijo de
puta frente a mí. Estoy seguro que era un hijo de su putisima madre sin excusa,
pero la madre de Hitotsuba no dudo en decir palabra. ¿Ella de casualidad lo
conocía?
[Sí. He recuperado por completo la
cantidad que le presté a ese idiota. Es por eso que, estoy realmente feliz por
ti, Yuya. Puedes vivir una vida honesta desde ahora. No termines como un
idiota, ¿bien?]
[Claro, no me volveré como mi padre.
Pero Taka-san, ¿qué pasa? ¡No puedo comprender lo que pasa para nada!]
Mientras me estaba sintiendo agitado,
la hija del dúo levemente apretó mi mano. Estaba sorprendido a su accionar, y
cuando miré a su cara, la vi sonriendo gentilmente. Mientras me hacía calmar,
mi corazón empezó a latir más rápido. ¿Cómo no podía estar nervioso
cuando la diosa que admiro sostenía mi mano y me sonreía?
Pero ¿no la mano de Hitotsuba-san se
sentía más fría de cuando había tocado mi frente más antes? Pero ¿era mi
imaginación que ella estaba temblando y sudando un poco?
[Yoshizumi-kun. Te hablaré de
ello cuando el trato esté hecho, no te apures. Está bien. No hay ni un solo
demerito para ti.]
[Huh, vamos a dejar a los jóvenes fuera
de esto. Eso es, Omichi-san. Si no te importa, ¿te gustaría un poco de té?
¿También te gustaría hablar con los otros miembros de la Asociación de Víctimas
de Yoshizumi Kotaro? Claro, mis subordinados que esperan atrás estarían felices
de unirse también.]
[Me rehúso. Es obvio que si me
involucro más con ustedes, solo voy a terminar en problemas. Vamos a casa.
¡Hey, chicos! ¡Nos vamos de aquí!]
Taka-san gritó, llamando a todos
quienes estaban esperando en la sala. Incluso con sus lentes de sol, podía
sentir su perplejidad, pero Taka-san no se molestó en explicar nada mientras
dejaba la casa con ellos. Justo antes de irse, volteo su espalda a mí y me dijo
sin darse vuelta:
[Yuya… este es el fin de mi relación
contigo. No te volveré a ver otra vez. Es por eso que deseo que tengas un buen
futuro. ¡Adiós!]
Con esas palabras, Taka-san desapareció
en la ciudad levemente iluminada mientras ondeaba su mano. Estaba tratando de
sonar genial, pero ya sabía dónde vivía. Por algo, su esposa incluso me había
pedido ir y comer su comida. Podemos encontrarnos cuando sea.
[Bueno. Esto también va para mí. Te
dejaré el resto a ti, Kaede.]
[Sí. Gracias, mamá.]
[Está bien. No es algo que valga la
pena mencionar, Kaede. Más importante, Yoshizumi Yuya. Perdón por asustarte.
Ese puto, no, tu padre me pidió que acabara todas sus deudas por ti, así que
por favor no te preocupes por tu futuro. No será lo mismo de antes, pero aún
podrás vivir una vida de secundaria normal.]
Estaba curioso acerca de las palabras
“no será lo mismo de antes”, pero antes que pudiera preguntarle de eso, la
madre de Hitotsuba-san ya había dejado la casa. Además, mi mano aún estaba en
el agarre de Hitotsuba-san, pero ¿no estaba su mano temblando con locura? ¡Sus
piernas también estaban agitándose como un ciervo recién nacido!
[¿Qué ocurre, Hitotsuba-san? ¡Estás
temblando mucho! ¡No parece que estés bien!]
[¿De qué estás hablando, Yoshizumi-kun?
No estoy temblando… para nada. No es como que quisiera que vieras que casi
estaba temblando cuando me paré frente a ese tenebroso Oji-san y tampoco era
razón para que lo agitará más de lo que debía. ¡No es que el miedo que sentí en
ese tenebroso momento volviera a mí cuando estuviera sola contigo, y nunca
sentí como que iba a colapsar!]
Su mirada estaba dirigida a la
distancia y su expresión era una rígida, pero soltaba palabras a la velocidad
de la luz, por el miedo.
Ella estaba hablando con una expresión
engreída, pero sus ojos andaban dando vueltas. Su cuerpo se agitaba como si
estuviera experimentando un terremoto. Sí, era claro que ella no estaba
bien. Sin embargo, podía entender sus emociones. En el pasado, también solía
asustarme de Taka-san. Suspiré y envolví mis brazos alrededor de ella.
[Hitotsuba-san. Voy a servirte algo de
té, ¿así que por qué no vas a la sala a descansar un rato? Me contarás toda la
historia, ¿cierto?]
[Sí, sí… Claro. Te lo explicaré todo.
Con el trato hecho, la deuda que tus padres te dejaron ha sido pagada, pero con
una condición.]
Huh, no sonaba tan terrible—
[La condición era… que tuvieras que
vivir conmigo.]
[¿Perdón…?]
¿Huh? ¿Vivir juntos? ¿Yo y
Hitotsuba-san? ¡Estás de joda, ¿cierto?! ¡Si ese es el caso, seré asesinado no
solo por todos los chicos en la escuela, sino por sus fans por todo el país!
[No te preocupes. Te lo explicaré con
lujo de detalle. Así que vayamos a la sala rápido, ¿está bien? Yuya-kun.]
Hitotsuba-san dijo mi nombre con una
sonrisa de diosa. Su sonrisa era tan adorable que no pude evitar admirarla y la
habría punteado en 99/100. Por tristeza, sus piernas que aún estaban temblando
del miedo de alguna manera arruinaron su encanto, lo cual de otra forma habría
ganado todos los puntos.
✽✽✽✽✽
Tomé la temblorosa mano de
Hitotsuba-san y la invité a la sala, haciendo que se siente en una silla. Luego
de recibir el té y tomar un descanso, mientras esperaba en hablarle.
[Ahora Yuya-kun. Déjame explicarte la
situación en la que estás ahora. Siendo honesta, esta situación puede ser
resumida en palabras.]
Tragué saliva y esperé a las palabras
de Hitotsuba-san.
[Yuya-kun, te has vuelto mi propiedad.
Es todo.]
[Sí. Lo entiendo. No vas a explicarlo
¿verdad? ¿Está bien?]
[Pensé que no había punto en sacarlo
así que solo lo tuve corto y simple. ¿Estuvo mal?]
[¡Claro que sí! ¿Cuándo me volví tu
propiedad? ¡No es como que te acabaras de comprar una mascota! ¡Por favor
explícame en una forma que pueda entenderlo!]
[Mascota. Eso es, Yuya-kun ahora es mi
mascota. Sí, está bueno. Eso suena maravilloso.]
¡No estaba dispuesta a explicar la
situación y no quería escucharme para nada! Con sus brazos cruzados y sus
mejillas rojizas, estaba perdida en su propia imaginación. A pesar de su
actitud, era un crimen ser tan bella porque incluso esa impropia postura podía
resultar en una pintura. Hice unos sonidos adrede para llamar su atención
mientras tomaba té.
[No, Pochi. No deberías beberlo así… Lo
siento, Yuya-kun. Me he estado imaginando cosas un poquito. ¿Dónde lo deje?]
[Creo que estábamos en el punto donde
me volví la “propiedad de Hitotsuba-san”.]
[Ah cierto. Estaba por decirte del por
qué Yuya-kun se volvió mi propiedad. Es porque tu padre imploro por ayuda a mi
madre.]
¿Por qué mi padre se lo pediría en
especial a la madre de Hitotsuba-san? Hitotsuba-san me lo aclaro.
Para resumir, mi padre, el pendejo de
mi familia, y la madre de Hitotsuba-san, la diosa de la guerra, fueron a la
misma primaria, básico, secundaria. Había oído de los errores de mi padre en su
trabajo, y cerca de un mes atrás, de pronto recibió su llamada. El mensaje que
pudo determinarse en un: “Por favor ayúdame”.
[Primero, mamá iba a reusarse. Eso dijo
ya que no importaba cuán podrida la relación entre ellos fuera, aún era su
propia culpa por sus tontas acciones. También añadió que la madre de Yuya-kun
era igual de culpable por seguir animándolo sin detener sus desastrosos
errores.]
Ese bastardo padre mío estaba lunático.
No puedo creer que enviaría un repentino SOS a su amiga de la infancia quien
ahora tenía una familia que cuidar. Cuando vuelva del extranjero, voy a
golpearlo hasta que me sienta satisfecho.
[Sin embargo, tu padre al parecer dijo
entre lágrimas, “solo salva a mi hijo.” Dijo, “Yuya no ha hecho nada malo, a
diferencia de mí, él tiene talento. No quiero arruinar su futuro.” Es lo que
supuestamente dijo mientras lloraba.]
[…]
[Bueno, aun así, mi madre no tenía
obligación a hacerlo. De hecho, solo añadió más leña al fuego.]
Tiene sentido. Desde la perspectiva de
la madre de Hitotsuba-san, soy un completo extraño. Tratar de ayudar al sacar a
tu hijo es una simple excusa que tan tonta como mala. Usa tu cabeza
un poco más, padre idiota.
[Y, estoy segura que una persona
brillante como tú, Yuya-kun, se está preguntando por qué mi madre decidió
ayudar. La razón, claro, no es otra más que esta: ¡Hice una egoísta petición!]
Sacando pecho con un “ehem,”
Hitotsuba-san puso un rostro triunfante. Sus pechos, su aparente tamaño a
través de su suéter, se balancearon levemente. Sobre todo, arqueó su espalda,
enfatizándolos más, y no sabía a dónde ver. Alejé la mirada
un poco y dije.
[Err, ¿tu egoísmo, Hitotsuba-san? ¿Cómo
eso llevo a ayudar a mi padre? Tu madre no tomaría cuidado de la deuda de
alguien más solo porque eres egoísta, ¿verdad?]
[Nunca en mi vida he sido egoísta, y
siempre he sido una buena y obediente chica. Mis padres y abuelos se
regocijaron de oír que su única hija había sido tan egoísta por primera vez en
su vida. Casi querían hacer arroz rojo por la ocasión.]
¿Se acaba de alabar como una buena y
perfecta chica? Pero aunque ese no era el punto más grande que le molestaba.
¿Acaba de decir que su madre estaba llorando de felicidad por su egoísmo? No
puedo imaginarme a una digna persona tipo diosa de la guerra llorando de gozo.
[Había dos cosas que pedí. La primera
fue que quería que mi madre te ayudara, Yuya-kun. Era natural ya que no has
hecho nada mal. Realmente no me importa que les pase a tus padres, pero no
puedo pasar por alto el hecho que ibas a sufrir por eso.]
No era seguro por qué Hitotsuba-san se
preocupaba por mí. Pero ya que no podía descubrir la razón, siempre era bueno
saber que alguien se preocupaba por ti.
[Y la segunda razón resulta de mi
egoísmo. En toda mi vida he tomado una decisión basada solamente en mi egoísmo
excepto por esta vez donde quería que te volvieras mi propiedad. Después de
todo, dije que quería vivir contigo.]
[¡Bien, esa parte es imposible de
entender! ¡Eso ya ni siquiera es egoísmo! ¡Solo dejaste la parte de la
confesión, la parte de la propuesta de matrimonio, y todas las otras partes y
solo le dijiste a tus padres que querías vivir conmigo! ¡¿Por qué harías eso?!]
[Porque… quería estar contigo,
Yuya-kun…]
¡Sí, era un juego tonto! ¡Si la diva
Hitotsuba Kaede, quien era como la manifestación de una diosa, estaba
jugueteando con sus dedos y curvo su boca en una forma vergonzosa, cualquier
hombre se enamoraría de ella de inmediato! ¡La destructiva lindura de esta
belleza podía incluso terminar en una guerra!
[Entonces… todos se emocionaron de mi
decisión egoísta y mi primer amor. Mi padre preparó un cheque, mi madre
contacto al padre de Yuya-kun, y… todo fue decidido así.]
Mientras me preguntaba si debería
mencionarle sus palabras “mi primer amor”, Hitotsuba-san me entrego un pedazo
de papel. Era un tipo de promesa, con el nombre de mi padre y su sello personal
al fondo. El contenido era…
Uno: Le doy permiso a Hitotsuba Kaede
de vivir con Yoshizumi Yuya. Dos: Cuando Yuya tenga 18 años, accede a registrar
su nombre y volverse en el hijo político de la familia Hitotsuba. Finalmente,
luego de iniciar la convivencia, cualquier contacto de los padres de Yoshizumi
Yuya hacia él estarán prohibidos para siempre. Que… ¡¿QUÉ MIERDA ES ESTO?!
¡Claro que estaría gritando luego de
leer tal promesa!
¡Resulto que no solo me estaba mudando
con Hitotsuba-san, sino también cansándome el siguiente año! ¡Me volví el
cuñado de su familia! ¡No habría manera que mis padres fueran a aprobar eso!
¡Oh cierto, ya lo aprobaron con la carta luego que fuera firmada por ella!
Puedo imaginarme a mi perro padre
firmándolo con una sonrisa en su rostro, y mi mamá sonriendo inútilmente y
diciendo cosas despreocupadas: [Ahora Yu-kun será feliz.]
[No te preocupes. En cuanto a mí, voy a
apoyar a Yuya-kun, pero creo que ya tienes una gran voluntad que no me
defraudará. Luego de volverte mi esposo, trabajarás junto a mi padre y
eventualmente serás el director del Grupo Hitotsuba. Está decidido.]
¿Qué pasa con ese padre e hija? ¡Mi familia
era una cosa, pero la familia de Hitotsuba-san está en otro nivel! ¡Permitieron
que yo, un mero estudiante de secundaria a quien nunca habían conocido, se case
con su única preciada hija, y ahora han decidido hacerme el siguiente director!
No importa cómo lo vea, parece que les falta un tornillo.
[Tus padres y los míos, ambos nos
bendijeron con su permiso. Y Yuya-kun. Por desgracia, no tienes el derecho a
rechazarlo. Si te rehúsas… sabes lo qué te pasara, ¿cierto?]
Ah. Entiendo a lo que te refieres.
Estoy seguro que me harán trabajar como un esclavo laboral del Grupo Hitotsuba.
O seré forzado a trabajar tras bambalinas como en el mundo del manga. Infierno
espérame, donde no podré ver el sol hasta que muera.
[Hm… Como se esperaba de ti, Yuya-kun.
Tienes un buen sentido del humor. Si te rehúsas, te quedarás a mi lado por el
resto de tu vida como mi mayordomo personal. Ya que serías mi mayordomo, no te
besaré, ni te dejare hacerme cosas sucias. Experimentarás un infierno donde no
serás capaz de tocarme incluso si yo fuera a exponer mi inofensivo cuerpo.]
Esto también sonaba como un infierno,
pero un tipo de infierno diferente. Nunca pensé que llegaría el día que oiría a
Hitotsuba-san hablando de besar y acciones indecentes, pero el hecho que su
rostro estuviera rojizo sugería que ella se estaba presionando mucho. Pero,
caer al amor prohibido mientras se sirve a la señorita como un mayordomo, ¿huh?
No suena nada mal.
[¡Oh, no no! ¡No me gusta el amor
prohibido! No es algo malo, pero… después de todo… aún prefiero… el amor puro…
quiero estar contigo en público…]
Qué con esta chica, es tan linda. En la escuela, Hitotsuba-san
siempre se ve digna, virtuosa y genial, pero ahora, se venía basta linda y
pura.
Se veía como una chica que ama los
mangas shoujos. Su apariencia y comportamiento no cuadraban, si ese es el caso,
¿eso no me hace uno de los pocos hombres que conocen el verdadero rostro de
Hitotsuba Kaede?
[Bien. Tomaré esa oferta. No es que
haría todo lo posible por rehusarme, y es una oferta milagrosa para mí. Sería
un milagro para mí el vivir con alguien como Hitotsuba-san y casarme contigo.
¿No es un sueño hecho realidad? ¿No es grandioso?]
Traté de actuar lo mejor posible.
Rápidamente me tomé todo el té de mi taza hidratando mi seca
garganta. Trajo un sentido de calma a mi latiente corazón.
Oh no, ¿qué acabo de decir? Deje que mi
impulso se apoderara de mí, y he accedido sin pensar el ser su esposo luego de
vivir con ella. Pero está bien. Puedo vivir con una mujer
extremadamente hermosa como Hitotsuba-san, casarme, y eventualmente volverme un
director. Así que estaba bien. No será solitario para nada.
[¡Yuya-kun! ¿Qué te ocurre? ¿Te duele
en alguna parte?]
[¿Eh…? ¿Qué ocurre, Hitotsuba-san? No
siento dolor en ninguna parte.]
[Entonces Yuya-kun, ¿por qué estás
llorando…?]
Toqué mi mejilla. Mis dedos se
sintieron húmedos y fríos. Extraño, ¿por qué estoy llorando? Ahora que
he sido liberado de mis estúpidos padres, ¿por qué duele tanto que mi pecho se
siente que va a partirse? ¿por qué…?
[Es duro quedarse solo. Está bien. Está
bien, Yuya-kun. Estaré a tu lado. Siempre estaré a tu lado.]
Antes de saberlo, estaba siendo
abrazado por Hitotsuba-san. Gentilmente acarició mi espalda como si estuviera
cuidando de un niño pequeño y me llamó. El sonido de su voz estaba lleno de
compasión. No pude evitar poner mis brazos alrededor de su cintura y abrazarla.
[Debe haber sido duro para ti. Seamos
felices desde ahora en adelante, Yuya-kun.]
El abrazo de la diosa se sintió tan
relajante. Desearía quedarme así para siempre.
[Cuando estés listo, por favor empaca
tus cosas. Acabaremos con esta casa.]
Estaba en un estado de relajación hasta
que sus palabras me regresaron a la realidad. Espera, ¿esta casa va a
desaparecer? ¿Lo dices de verdad?
[Limpiaremos la tierra y
reconstruiremos la casa para rentarla. El ingreso de la renta también irá a
nuestros bolsillos. Pero nuestro nido de amor estará bien. Ya lo he preparado.
¡Por fortuna, mañana es sábado y la escuela no está en sesión, vamos de compras!]
Sollocé y asentí. Hitotsuba-san sonrío
y palmeó mi cabeza. Ya no qué está pasando.
Parecía que la sangre de mis padres
realmente recorre mi cuerpo, y pude haber tomado una importante decisión por el
impulso que afectaría mi vida.
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