Full width home advertisement

Post Page Advertisement [Top]

 

Tocino, Ensalada, y Jugo de Naranja

 

[¡Argggggh…!]

 

Gruñendo como un oso lastimado, Tiat detuvo sus pies.

 

[¡¿Qué diablos con esta ciudad?! ¡En serio!]

 

Olvidando perder de vista a Feodor, no sabía cómo regresar ahora. La persecución que había iniciado tan prometedora había llegado a un final patético.

 

Comparado a las otras ciudades en las que había estado, las calles de metal de Lyell y máquinas no eran fácil de navegar. Los caminos se alzaban libremente y se sumergían, se desvían este a oeste, y había tres callejones y rutas en las que no podías pasar sin usar laderas o puertas hidráulicas. Algunas veces incluso había disparos de vapor de lugares aleatorios en las paredes para obscurecer tu visión. Aunque Lyell era— al menos— bastante inadecuada para seguir a alguien.

 

A pesar de todas las dificultades, se había imaginado que Feodor se había dirigido en dirección al segundo distrito sureste, el que se llama la “Segunda Apertura del Museo Conmemorativo de Pozos de Minas Distrital”. Y… eso fue.

 

[¡Ugh!] En su irritación, se golpeó en un muro cercano. Hizo un sonido sólido, su puño dejo un pequeño hoyo. Parecía que había incinerado inconsciente un poco de Venom.

 

¿Debería darme prisa y volver al camino por el que llegue…? No, incluso si inició ahora y conozca al camino, no llegaría allí antes de que el comedor cierre.

 

Tiat miró alrededor. No es sorpresa, este lugar no era conocido. Mientras corriera por ahí, solo pensar en perseguir esa espalda, se las arreglaría— aunque en una ciudad como esta, es probable que hubiera lugares similares adonde sea que vayas— para terminar en un callejón sin salida con ninguna persona a la vista. Un poco de nerviosismo agitó su espalda; no podía evitar preguntarse si era algo inseguro estar en esta área. Sería un fastidio si es atacada por un ladrón o algo…

 

Oh espera, claro que no pasará en una ciudad desierta como esta, en especial no ahora. E incluso si soy atacada por personas normales con cosas como cuchillos y pistolas, estoy bastante segura que puedo encargarme. Aunque…

 

De ponto, sintió un leve toque en su hombro…

 

[¿Eres tú, Ritie?]

 

[¡¿Qu—?!]

 

Una sorprendida Tiat saltó, gritando sin más.

 

Gruño, gruño, rujeeee. El asombro había despertado su estómago, el cual había estado en silencio hasta ahora, y emitió un indescriptible sonido. Asustada, Tiat trató de esconderlo con sus manos, pero el sonido no regresaría una vez se ha escapado. Sobre todo, aún estaba saliendo insatisfactorios rugidos y gruñidos. Grrrrr.

 

Se giró lentamente. Parándose allí estaba una mujer de apariencia sorprendida. Sus rasgos sin marcas de inmediato sobresalieron a Tiat. La mujer era mucho mejor que ella. Aunque entre las mujeres adultas que conocía, ella era la más joven que ellas. ¿Quizás estaba en sus casi treinta? Tenía un brillante cabello plateado y profundos ojos purpuras. Ya que Tiat la conoció por primera vez, no se sintió así. Quizás alguna vez, en algún lugar, una vez se había encontrado con alguien con un aire similar.

 

[Oh vaya… mis disculpas. ¿Te asuste?]

 

[¡U-Uh, no! Eso es—]

 

GRRRRRRR, el estómago vacío de Tiat la cortó ruidosamente antes que pudiera encontrar las palabras para una buena respuesta.

 

________________________________________

 

Cerca de cinco minutos luego, Tiat estaba sentándose en una mesa cerca de la ventana a una corta caminata de donde había estado antes y olía algo delicioso.

[Recientemente, me he acostumbrado a venir a esta tienda en la mañana. El propietario incluso fue lo suficientemente amable para informarme que continuarán haciendo negocios hasta que la entrega de ingredientes se detenga por completo.]

 

[Whoa…] Sin pensar, Tiat dejo mostrar sus emociones. Frente a ella estaba un tocino bien hecho, huevos bien fritos, una fría ensalada crujiente, una canasta llenada al borde con fresco pan horneado y mermelada charreando como gemas.

 

Si esto no fuera llamado desayuno, nada puede ser. Era algo a lo que nunca había esperado que sus ojos vieran en el comedor militar— el desayuno de más alto estima.

 

[Espero que le quede a tu paladar.]

 

¡Claro que lo hará! ¡Al fin que, huele tan bien! ¡Taaaan bieeen!

 

[De verdad me disculpo por lo de antes. Te confundí por el hijo de un conocido.]

 

[¡N-No, no, no! En cuanto a mí, ¿te he mostrado una… desagradable escena? ¡D-De verdad lo siento!] Ella inclinó su cabeza repetidamente.

 

La mujer elegantemente río. [Es lo mismo, una disculpa por sorprenderte. ¿Debemos comer antes se enfríe?]

 

Woooow. De alguna manera, cada cosa que hacía se veía de un adulto.

 

[S-Sí. Lo siento, muchas gracias. ¡Entonces, comamos!]

 

Para Tiat, un “adulto” significaba ser como Kutori. Pero por algo, la mujer frente a ella se sentía como un “adulto” en un sentido diferente a la hermana mayor que había conocido. Ella misma no estaba segura qué le daba ese sentimiento.

 

[Un, discúlpame. A quien mencionaste antes, esa persona Ritie…]

 

 

Tiat cortó su tocino y lo puso en un pedazo de pan junto con una rebanada de huevo frito, luego lo introdujo en su boca. Era totalmente delicioso. Sintió la verdadera sensación de comer el desayuno crecer dentro de ella. En su corazón, se disculpó con Collon, Panival, y Riel. Estoy creando todos estos buenos recuerdos sola. Lo siento.

 

[Ahem, si nos confundimos, ¿significa que ella luce como… er, se parece a mí?]

 

[Ah… No lo sé, ves. Pero ciertamente debe lucir como tú.]

 

[¿Debe?]

 

[Han pasado varios años desde la última vez que nos reunimos. Estoy segura que la chica que conocía ha cambiado bastante. Es solo un poco más joven que yo, su altura y demás deben haber crecido significantemente.]

 

Eso es… ¿cómo decirlo? Dejando cualquier parecido que podamos tener, ¿no es eso un asunto completamente diferente?

 

[Fue tu abrigo.] La mujer delicadamente lo señaló. [Ritie tenía, digamos, circunstancias únicas respecto a la familia en la que nació, y se convirtió en una chica que nunca salía sin su abrigo con capa cuando estaba fuera de casa. No me he encontrado con ella en un rato, pero había oído que fue vista en esta ciudad. Viéndote desde atrás, había pensado por un momento que tú podías ser ella.]

 

Su voz de alguna manera parecía muy solitaria.

 

[L-Lo siento…]

 

La mujer agitó su cabeza gentilmente. [No hay necesidad para eso. Fui yo quien se confundió. No hiciste nada mal. Por otro lado, pude haberte invitado a esta tienda, pero ¿estuvo bien? Estabas buscando a alguien, ¿verdad?]

 

Oh sí… Algo como eso, supongo. [Más que siguiendo, buscando, pero está bien. Cuando me llamaste, lo había perdido de vista igual.]

 

[Un chico, ¿entonces…?]

 

[Sí.]

 

[¿Tu cariñito?]

 

[No.] Reflexivamente dijo antes de haber pensado en ello. [Alguien que odio. Los sentimientos son mutuos.]

 

[¿Así es?]

 

[Es bastante desagradable, ves…] Se pregunto si era algo que debía compartir. No era como si le estuviera hablando al Primer Oficial. Pero por algo estaba dispuesta a hablarle a la mujer de ello. ¿Quizás debería preguntarle a alguien que no tiene ninguna conexión con ella o Feodor?

 

Así que ocultando todas las partes acerca de la milicia, hadas, ser armas, y demás, ella con cuidado le explicó a la mujer que había un trabajo difícil que alguien tenía que hacer. Eventualmente, fue decidido que ella y las otras serían quienes lo hagan, y le había tomado a todos algo de tiempo aceptar ese hecho.

 

[Y no creo que le haya sentado bien… Dijo que deberíamos parar, y si nos rehusábamos, entonces se entrometería.]

 

[¿Oh?] La mujer miró a Tiat, esparciendo algo de mermelada en su pan. [¿No significa eso que él las ama?]

 

Urgh— Tiat masticó su comida. [¡N-No es nada como eso! ¡Solo está siendo raramente terco!]

 

[Me pregunto… Incluso si dice que será tu enemigo, ¿no es porque quiere protegerlas? Ah, los torpes y sencillos caminos de los chicos jóvenes. ¿No encuentras algo amargo en eso?]

 

¿Aunque no es algo como eso? Quizás no lo había explicado lo suficientemente bien, porque no había forma que estuviera cerca de ser como un hermoso cuento de hadas como la mujer lo describió.

 

[Como sea, debido a cuán terco es, está tratando de tomar todas las innecesarias cargas.]

 

[Eso, llevas razón.] La mujer sonrió. [Estoy segura que el chico también te ha dicho lo mismo, ¿verdad?]

 

Tiat no respondió.

 

[¿Tengo razón?]

 

Sí. Mordiendo sus labios, Tiat asintió sin ganas.

 

[Entonces el sentimiento es verdaderamente mutuo. Oh, es muy amargo…]

 

[P-Pero realmente no… es así…] No había fuerza sobrante en la objeción de Tiat.

 

La mujer levantó dos dedos y juguetonamente los entrelazaba. [Ya debes saberlo, chocando de frente entre sí como lo hacen, es porque cada uno tiene sentimientos por el otro. Si, por ejemplo, un lado se hubiera desviado, entonces su relación no habría procedido al punto que está ahora.]

 

[¿Así… es cómo es?]

 

[Sí, absolutamente. Puedo verlo así, pero ¿creerías que soy una especialista en leer los corazones de las personas? Créeme.]

 

[Una especialista… ¿eres una profesora? ¿O quizás una doctora?]

 

[Oh no, no es eso. Más que esas profesiones, lo que hago es un poco más práctico, pero…]

 

La mujer dejo a medias la oración, sus ojos filosamente se concentraron fuera de la ventana de la tienda al otro lugar del callejón. [Me disculpo, pero parece que debo irme ahora.]

 

[¿Muh?] Tiat estaba a la mitad de su ensalada, así que no pudo dar una buena respuesta.

 

[Algunos negocios urgentes salieron. Me ocuparé del pago, así que no necesitas preocuparte por eso.]

 

[Muh, eh, eh—]

 

[Muy bien. Cuida de ese chico por mí, ¿bien?]

 

Tiat no tuvo tiempo para decir algo mientras la mujer se paraba rápidamente e iba a hablar con el propietario. Luego de unas palabras, le entrego una servilleta de seda y dejo la tienda. Tiat miró atrás a la mesa. Al parecer la mujer había acabado su plato de comida en el momento en el que habían estado allí.

 

Trago. Ella se trago lo que estaba en su boca. [Se ha ido.]

 

La mujer había sido como el viento— de pronto, solo se había ido de la nada. Ni siquiera le había agradecido por la comida.

 

Sobre todo, se había olvidado de pedirle su nombre, sin mencionar darle su propio nombre. Ahora se dio cuenta que, era demasiado tarde.

 

¿Feodor y yo tenemos… mutuos sentimientos?

 

Una vez más, no podía ver más que un sinsentido. No importa cómo lo vieras, la sola idea era de mal gusto.

 

Al mismo tiempo, había partes que podía aceptar. Dejando de lado sentimientos como “gustar” o “desagradar”, los dos indudablemente se estaban viendo de frente.

 

Me pregunto por qué.

Pensó en su primer encuentro arriba de ese abandonado teatro. Había sido justo después que las cuatro Leprechauns llegaran a la isla flotante, habiendo sido confiadas con una misión la cual fue asumida para resultar en sus muertes.

 

Por un capricho, se había separado de Lakish y las otras para vagar por la ciudad sola y encontrar ese lugar. Pensó que podía tratar de ver la ciudad que iban a salvar desde un lugar alto a camino de sus vidas. Siendo así, era un lugar excepcionalmente bueno. Había sido capaz de revisar las tranquilas calles debajo de ella, la ciudad de Lyell la cual estaba muriendo. Se había llenado de emociones grises, ni soledad o insatisfacción.

 

Eso fue cuando el chico apareció.

 

[Sabes, es peligroso aquí.]

 

Esas tontas palabras acabaron con su solitario mundo. Ese gris escenario, en ese momento, había tomado un poco de color.

 

Incluso ahora, podía recordar un poco la forma en la que se sintió entonces. Preparada para la muerte, existiendo con el pensamiento que estaba medio muerta, había sido regresada a la realidad. Ella bromeó un poco, y accidentalmente mostró algo de su terquedad. Había recordado que aún estaba viva.

 

En realidad, había sido solo un momento, pero lo sintió que prácticamente había sido salvada. Si pensaba en lo que ocurrió después, sus recuerdos con él siempre eran coloridos con nuevas y frescas experiencias. El tiempo pasado con un chico como él— En primer lugar, estar alrededor de un hombre de la misma edad que ella— era la primera vez.

 

Ah cierto. Para ella, Tiat Shiba Ignareo, él era la persona con la que había tenidos muchas primeras experiencias. La primera persona a la que le había dado su corazón, el primer chico con el que se había peleado, la primera alma que había entendido sus verdaderos sentimientos, el primer compañero de entrenamiento con el que había ido en serio, la primera persona sin remedio a la que se había fijado, y en cambio, también estaba concentrada en ella. En efecto, si había alguien que podía llamar su primer amor, sin duda sería—

 

[¡No, no, no…!]

 

¡¿Por qué tiene que ser así?! ¡Está mal! Nosotros no… no somos así…

“Cuida a ese chico por mí, ¿bien?”

 

Las palabras que Tiat había oído cuando la chica se estaba yendo de pronto salieron en su mente. ¿Qué implicaba eso? ¿Y de quién se trataba?

 

¿Era la chica de la hablaron antes, Ritie, quien ella llamó “ese tipo” con tanta familiaridad? Pero no había razón para que Tiat se reuniera con ella, e incluso si se le dijera cuidar de ella, no había nada que pudiera hacer.

 

¿Entonces era Feodor a quien Tiat había sacado en la conversación? Pero no, también era imposible. Después de todo, su nombre no había salido, antes que nada.

 

[Espera… ¿Huh?]

 

Feodor tenía cabello gris y ojos purpuras. Como la mujer. Por un instante, Tiat se preguntó, Quizás, solo quizás, había alguna conexión entre los dos. Pero…

 

[Ahaha… de ninguna manera, ¿cierto?]

 

Se río para sí y decidió olvidarse de eso.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bottom Ad [Post Page]