Capítulo
5: Un Incidente en la Capital Real
[¡¿El país demoniaco al norte está
moviendo ficha?!]
Había una agitación en el Castillo de
Calvania, y Alvin ahora estaba en el medio de la planta en una mesa en el salón
del consejo militar. Estaba enfrentando a sus vasallos, los capitanes de los
Caballeros Mágicos de Calvania, y los oficiales del Cuerpo General Real quienes
fueron convocados con urgencia. Todos estaban en un estado de pánico por lo que
el mensajero tenía que decirles.
[¡Sí, señor! ¡En el norte del reino
demoniaco de Dachnesia, una fuerza de alrededor de 2000 caballeros fantasmales
de pronto apareció! ¡Cruzaron las montañas del Palacio de la Muerte al norte,
irrumpieron por las fortificaciones fronterizas y están avanzando en la Capital
Real a una velocidad alarmante! ¡Se espera que lleguen a la capital dentro de
días!] El mensajero dijo, y su reporte fue enviado al cuarto en desorden.
[¡¿Caballeros fantasmales?! ¡¿La
vanguardia de los soldados malditos quienes sirven al rey demonio?!]
[¡Eso es absurdo! Había oído que la
Orden Oscura de Opus había reanudado sus actividades en el viejo país
demoniaco, pero nunca me imaginé que empezarían a moverse dentro del reino de
Dachnesia.]
[¡Pero ¿por qué los caballeros
fantasmales ahora mismo?! ¡Esos espíritus malditos de caballeros muertos que no
aceptan las órdenes de nadie más que el rey demonio!]
[¿Pueden ser ciertos los rumores que un
sucesor al rey demonio ha aparecido realmente en el reino demoniaco?] Mientras todos
se confundían y enfadaban, el líder de las Doncellas del Lago y actual líder,
Isabella, habló con decisión.
[Chicos, por favor cálmense.] Ella dijo
firmemente. [Descubrir la verdad detrás del reino demoniaco y la Orden de Opus
será para otra ocasión. Justo ahora, nuestra principal prioridad es lidiar con
esta repentina crisis.] Ella miró al ministro de guerra y preguntó. [¿Qué
porción de nuestra milicia puede responder de inmediato a esto?]
[Sin tomar en cuenta las mínimas
defensas de la Capital Real, tenemos 2000 caballeros mágicos y cerca de 10000
soldados regulares.]
[Con la fuerza de los caballeros
fantasmales, soldados normales sin espadas mágicas son inútiles. Tomando eso en
consideración, apenas podremos darles marcha atrás con toda nuestra fuerza. Que
se les pida a todos los miembros de la Orden de los Caballeros Mágicos
prepararse para la batalla de inmediato.] Isabella dijo, rápidamente dando
instrucciones a todos.
[Parece que no tenemos más elección que
ir a la guerra esta vez. Claro, preferiría que no.] Dijo un enorme hombre de
mediana edad de apariencia arrogante quien se estaba sentándose en la silla del
jefe en al consejo de guerra. Él era el Duque Durande, líder del primer grupo
de los caballeros mágicos de Calvania comúnmente conocidos como los Caballeros
Rojos.
[Sí, claro. Considerando la habilidad
de lucha de los caballeros fantasmales, los únicos que pueden competir con
ellos son los caballeros mágicos. Los que están al centro de esta batalla, y
los que soportan el ataque de su asalto, seremos nosotros.] La fascinante mujer
con lentes con una expresión satisfecha añadió. Ella era la Duquesa Ortol, el
capitán del segundo grupo de caballeros mágicos comúnmente conocidos como los
Caballeros Azules.
[Así que quienes inevitablemente derramaran
sangre serán— Digo, es natural que nosotros los caballeros, los escudos del
reinado, debería cargar con el dolor del país en su tiempo de crisis.] Un
hombre rubio de buena apariencia y edad indeterminada dijo mientras palmeaba su
cabello. Él era el Duque Anthalo, el capitán del tercer grupo de caballeros
mágicos, los Caballeros Verdes. Esos tres eran los actuales líderes de las tres
familias mayores ducales que, junto con la Familia Real, eran la columna
vertebral y guardianes del reinado de Calvania.
Oyendo tales palabras de ellos en un
momento como este, Isabella les frunció sus ojos y dijo. [¿Qué están tratando
de decir?]
[No, es solo… estamos siendo forzados a
resistir mucho para esta guerra. y creo que sería justo si la Familia Real nos diera
algo de consideración o trato favorable como recompensa en el futuro.] El Duque
Anthalo dijo. El cuarto de inmediato se movió mientras los tres duques estaban
tratando de aprovecharse del caos más allá de su interés en el reino.
[El rey es el comandante supremo de la
Arma Real de Calvania, incluyendo a los caballeros mágicos. Creo que es
perfectamente natural desplegar tropas de acuerdo al decreto real, ¿no crees?
Isabella dijo.
[Sí, es cierto. La familia real nos
otorgó y garantizó nuestras posiciones y territorio. Es perfectamente natural
que lo demos todo por el reino.] El Duque Anthalo.
[Pero por desgracia, el actual líder de
la Familia Real, el Rey, está ausente. Desde luego, hay un sucesor.] El Duque
Ortol, mirando a Alvin, quien estaba sentándose en el asiento de más grande
posición. Todo lo que Alvin podía hacer era quedarse en silencio y mirar.
[Eso es. Nosotros somos caballeros
leales a la Familia Real y Su Majestad el Rey.] El Duque Ortol añadió.
[¿Cómo se atreven a usar la sofistería
así de sin vergüenzas? ¿Están tratando de usar esta crisis nacional para
afirmar sus propias posiciones e intereses en el reino?] Isabella dijo con algo
de enfado.
[No, nada como eso. Es solo que es…
injusto que seamos los únicos que sangremos. El rey y sus vasallos también
deberían compartir la carga, ¿no?] El Duque Anthalo preguntó.
[Te pondrías a salvo mientras que nos
haces enviar a nuestros caballeros y nos observas sufrir, ¿cierto? No tiene
ningún sentido.] El Duque Durande dijo.
[Solo queremos saber cómo es que la
Familia Real va a recompensárnoslo.] El Duque Ortol dijo, Isabella apretó su
puño en frustración. Así era el tipo de país que era Calvania. El rey en efecto
era el comandante supremo de las fuerzas armadas del reinado, pero por alguna
razón, no había caballeros mágicos que el rey pudiera comandar directamente.
La Academia Real Mágica de Caballeros
de Calvania era extraña, en que estudiantes de la clase Durande, clase Ortol y
clase Anthalo usualmente fueran incorporados directamente en los Caballeros
Rojos del Duque Durande, los Caballeros Azules del Duque Ortol, y los
Caballeros Verdes del Duque Anthalo luego de la graduación. Es por eso que, a
la sugerencia de Auld, el anterior rey, Alvin estableció la clase Blitze para
formar caballeros mágicos que pudieran ser comandados directamente.
[Hm, sí. Cuando superemos esta crisis,
qué tal—]
[Así que básicamente…] Mientras el
Duque Anthalo estaba por demandar un tipo de concesión de Isabella, quien no
podía decirle nada de regreso, un joven caballero quien se paraba allí como una
sombra detrás de Alvin, levantó su voz. [Si Su Majestad, Alvin, envía a su
caballero personal, entonces no hay problema, ¿cierto? En ese caso, iré.] Era
Sid, un caballero que recientemente había despertado del letargo de mil años de
muerte y estaba bajo el mando del Príncipe Alvin. Él era el legendario Sid el
Bárbaro, se dice ser el más fuerte caballero de la era legendaria, y los altos
mandos del reino ya estaban al tanto de su presencia. Justo ahora, sus palabras
habían tomado la atención de todos en el cuarto.
[Sir Sid… ¿Sid el Bárbaro participará
en esta guerra?]
[El rumor dice que se las apañó para
derrotar a un Kirimu solo en el mundo de las hadas.]
[¡Tonterías! ¡Ni un caballero de la era
legendaria podía hacer eso!]
[Ni siquiera sabemos si es un caballero
de la era legendaria en primer lugar.] Tales murmullos podían oírse entre los
vasallos y oficiales militares en el cuarto.
[¡Hahaha! ¡Sin sentidos!] El Duque
Durande azotó su puño en la mesa y miró a Sid. [¿Si vas? Idiota. ¡¿Qué
diferencia podría hacer un solo caballero?!]
[Increíble. Deberías pensar en cuánta
fuerza militar estamos enviando allá antes de hablar.] El Duque Orotol añadió.
[No solo puedes igualar la fuerza de
dos mil caballeros mágicos.] El Duque Anthalo dijo. Los tres duques tomaron
turnos para ridiculizar a Sid cuando, al final, él habló.
[Soy el más fuerte.] Sid dijo,
completamente sin inmutar.
[¿Qué?]
[¿No pudiste escucharme? Dije que
incluso con todo tu personal de dos mil caballeros mágicos, yo soy el más
fuerte.] Por un momento, se mantuvo en silencio, y entonces todo el cuarto
estalló en risas.
[Hahaha. ¡Menudo estupidez!]
[¡Parece que a los caballeros de la era
legendaria les gustaban las bromas!]
[¡¿Quizás deberías de llamarte el Bufón
en lugar del Bárbaro?!] De cara a toda su emoción, Sid simplemente rascó sus
mejillas, molestó.
[Digo, estaba diciendo la verdad, pero
da igual, supongo.] Cambiando de tema, Sid luego se dirigió a los tres ducados
y dijo. [Bueno, como sea, lucharé por la Familia Real. Si puedo hacerlo mejor
que sus caballeros, ¿qué tal si cesan dejan esas sus viles negociaciones? Al
fin que, si todos sangramos por igual, tiene sentido, ¿cierto? Me refiero,
digan lo que quieran, pero todos somos amigos que luchan bajo la misma bandera
para proteger al mismo país. ¿Qué tal si nos llevamos bien?] Sid dijo sin
miedo. Mientras, los duques, quienes ahora sintieron que él era más que solo un
simple bufón, fruncieron sus expresiones.
[Bien.] El Duque Anthalo respondió
tranquilamente. [Así será, si no solo eres un bocón y en realidad logras
cumplirlo en el campo de batalla.]
[Bueno, tengo tu palabra.] Sid dijo y
luego volvió a Alvin, quien había estado observando como procedía. [Hey,
Alvin.]
[¿S-Sir Sid?]
[El resto depende de ti. ¿Qué harás?
Aún no te he jurado mi lealtad, pero al menos quiero ayudarte.] Sid dijo y miró
directo a Alvin. un caballero solo dice la verdad. [Si me lo ordenas, iré y
conseguiré los resultados en al campo de batalla que silenciarán a estos tres
molestos duques. Sin embargo, si no crees en mi fuerza, y no quieres avergonzarte
por fallar, y no quieres perjudicar tu posición en el futuro, entonces deberías
rehusarte.] Sid dijo, y Alvin se mantuvo en silencio. [¿Y qué harás?] Preguntó
y miró a Alvin con una sonrisa agria como si se estuviera burlando de ella.
Por un momento, Alvin cerró sus ojos y
guardo silencio. Luego los abrió y declaró. [¡Creo en ti! ¡Este es un decreto
real! ¡Sir Sid, ve contra la invasión del reino demoniaco y satisfáceme con tus
hazañas en el campo de batalla!]
[Hmph. Estás empezando a sonar más como
un rey, ¿verdad? Eso es bueno.] Sid dijo y sonrió a la orden de Alvin. con eso,
la tormentosa y caótica conferencia militar, llena con varias agendas y
turbulencia, llego a su fin.
[Así que ese es el peligro que en el
cual la capital se encuentra.] Alvin dijo, les había explicado la situación a
sus compañeros. Todo estaba en remota mansión frente al jardín en el nivel más
bajo del Castillo de Calvania. Habiendo escuchado la historia de Alvin, todos
se vieron entre sí.
[A-Así que de eso se trataba.] Christopher
dijo.
[Sabía que había mucha tensión en el
castillo esta mañana.] Thedore dijo, él y Christopher, ambos gruñeron mientras
sudor aparecía en sus frentes. Los otros estudiantes tenían una mirada similar
en sus rostros, todos se asustaron.
Sid luego habló para añadir a la
historia de Alvin. [Los caballeros mágicos dejarán atrás una mínima defensa en
la capital, y todas las tropas entrarán en batalla para interceptar la armada
del reino demoniaco, el cual se está acercando del norte. Los escuderos de la
academia de caballeros— ustedes chicos— formarán pelotones, con el instructor
de cada clase funcionando como el comandante, y proveer apoyo trasero para los
caballeros mágicos defendiendo la Capital Real.]
Sid movió su mirada para ver a Alvin,
quien tenía una soberbia expresión en su rostro. [Sin embargo, ya que iré a las
líneas frontales como caballero luchando por la Familia Real, el comandante de
la clase Blitze serás tú, Alvin. En el improbable evento que las líneas
frontales sean traspasadas y las fuerzas enemigas invadan la capital, el
destino de las vidas de tus compañeros estará en tus anos. ¿Puedes hacerlo?]
Sid preguntó.
[¡Sí, yo me encargo!] Alvin respondió,
asintiendo firmemente.
[Buena respuesta.] Sid dijo y asintió
en satisfacción mientras revolvía su cabello. Alvin sonrió por un breve momento
antes de tener una expresión de ansiedad den su rostro y bajar la mirada.
[¿Qué ocurre?] Sid preguntó.
[Perdón que las cosas resultaran de
esta manera.] Alvin dijo, con su rostro lleno de arrepentimiento.
[¿A qué te refieres?]
[Debido a mi posición y egoísmo, tienes
que ir a los frentes de línea, Sir Sid.] Alvin le dijo a Sid mientras él lo
vía. [Siendo francos, soy… La Familia Real es odiada por los tres duques. Como
un caballero bajo mi mando, probablemente no recibirás ninguna asistencia en al
frente, Sir Sid. Le he pedido a Isabella que te ayude, pero…] Alvin se detuvo
mientras Sid oía en silencio. [¡Claro, sé cuán fuerte eres, Sir Sid! Y estoy
tratando de no tener dudas. ¡Pero no hay garantía que pueda pasar en el campo
de batalla, ¿cierto!?]
[Sí, tienes razón. Mi memoria está
confusa, pero recuerdo pensar “no hay forma que muramos en una batalla como
esta”, una y otra vez lo hicimos. Perdí a muchos de mis compañeros de armas
así.] Sid dijo, y su confesión llevó a Alvin a un fuerte silencio.
[Estoy preocupado. ¡No puedo evitar
pensar en que algo te pasara, Sir Sid!] Alvin dijo, y Sid se quedó en silencio.
[Tengo un mal presentimiento acerca de esto. Es un terrible sentimiento como
que algo te pasará en esta batalla, y desaparecerás.] Alvin dijo, y Sid se
quedó en silencio. [Si fueras a desaparecer, Sir Sid yo…] Alvin empezó a decir,
pero recibió un golpe en la cabeza de Sid. [¡Ow!]
[Un comandante no debería airear sus
preocupaciones en frente de sus subordinados. Justo cuando pensé que habías crecido
y hecho más un rey, tomas un paso atrás.] Sid dijo, pero tenía una gentil
expresión en su rostro. [Relájate, no voy a morir en un lugar como este.
Además, no dejaré que mueran chicos. Son solo dos mil caballeros fantasmales,
¿cierto? No dejaré que uno solo pase la línea frontal.] Sid dijo y le dio una
sonrisa a Alvin mientras la mirada de frente. [Aún tengo mucho que quiero
enseñarles chicos como caballeros. Y no solo estoy hablando de fuerza bruta.]
[S-Sir Sid…]
[Es por eso que no importa que pase,
sobrevivan. Y si algo sucede, no duden en llamarme. Estaré allí de inmediato y
me asegurare que estén protegidos. ¿Entendiste?] Sid dijo.
Alvin tomó las manos de Sid y las puso
en su pecho. [Creo en ti, y te deseo buena suerte.]
[A ti también.] Sid dijo, él y Alvin se
vieron entre sí con la luz de la confianza en sus ojos.
[Alvin…] Mientras, las orejas de Tenko
caían, y sus hombros se desplomaron mientras los miraba con tristeza.
Dos mil tropas de la armada real, con
los caballeros mágicos de Calvania como su fuerza principal, salieron de la
Capital Real. Su destino era el norte, donde una horda de dos mil caballeros
fantasmales del reino demoniaco se estaba acercando. Basados en la velocidad de
su avance, el punto estimado de contacto sería las Planicies de Fabome. Con la
caballería como la fuerza principal por ambos lados, se esperaba ser una
batalla de gran escala que sería decidida por la maniobrabilidad.
Con el ataque enemigo, la Capital Real
de Calvania se lanzó a un torbellino por primera vez en una década. En la
capital, en preparación al improbable evento que la línea frontal fuera tomada
por las fuerzas enemigas, a las mujeres y niños se les dio prioridad y fueron
evacuados al Castillo de Calvania. Aquellos entre los estudiantes
experimentados de la Academia Mágica de Caballeros con espadas de altos rangos
fueron a las líneas frontales como miembros de la Orden de Caballeros Mágicos.
Todos los otros estudiantes fueron divididos por clases en pelotones que
asistían al cuerpo de defensa de la Capital Real con las seguridad y
evacuaciones en la ahora tumultuosa capital. Entre esos pelotones estaba Alvin
y los otros estudiantes de la clase Blitze. Aunque como un miembro de la
Familia Real, Alvin aún era un escudero que aún había sido nombrado caballero.
Como tal, las órdenes de los caballeros experimentados eran absolutas, y Alvin
estaba en guardia bajo su dirección mientras tanto. Durante la evacuación, una
mujer de edad usando un bastón se le acercó a Alvin.
[P-Príncipe…]
[¿Qué ocurre, señora?]
[Lo oí… Oí que un terrible enemigo se
acerca.] La señora dijo.
[Sí. Sin embargo, los caballeros mágicos
de Calvania están enviando a todas sus fuerzas para luchar, así que por favor
no se preocupe.]
[Oh ya veo. Lo siento, pero aún tengo
miedo. ¿Cree que viviremos para ver el mañana?]
[No…] Alvin se quedó sin palabras y
avergonzado de no ser capaz de responder de inmediato.
[Oh, ¿p-por qué está pasando esto? ¡Si
solo el anterior rey, el Señor Auld estuviera vivo!] Oír a la señora decir el
nombre del padre de Alvin lleno su corazón con una amargura que era difícil de
contener. Claro, la señora no estaba diciendo el nombre del antiguo rey con
malicia. Solo estaba preocupada, y Alvin sabía por qué estaba pasando. Alvin
también era inexperto como un rey y aún no había aprendido a ganarse la
confianza de las personas. Sin embargo, Alvin no se desalentaría. Colocó sus
manos en los hombros de la señora y le habló con sinceridad.
[No se preocupe, señora. El orgullo del
reino, los caballeros mágicos, yo protegeré la Capital Real y a las personas
que viven en él con nuestras vidas.]
[Oh, Príncipe Alvin…]
[Así que por favor, póngase a salvo,
por favor evacue. Todo estará bien.] Alvin dijo, calmándola una y otra vez.
Alvin tomó la mano de la mujer y la acompaño.
[Phew, parece que la evacuación va bien
hasta ahora.] Alvin dijo y miró alrededor mientras resguardaba el camino
principal con el pelotón Blitze. En el camino principal, los ansiosos
ciudadanos caminaban por él en una larga línea hacia una locación altamente
resguardada en la capital, el Castillo de Calvania, mientras estaban siendo
protegidos por el cuerpo de defensa de la Capital Real. Todos tenían
expresiones inquietas en sus rostros, y Alvin se preocupo porque los disturbios
iniciaran mientras observaba sus alrededores.
[Alvin…] Tenko dijo mientras caminaba
rápidamente a Alvin. Ella estaba regresando de revisar una disputa entres
ciudadanos en el lado opuesto de la calle. [¿Cómo están las cosas?]
[Sin problemas. ¿Qué hay de ti, Tenko?]
[Sin problemas.
[¿Y cómo está tu espada mágica? Fue
bastante mal dañada por el Kirimu del otro día.] Alvin dijo, y Tenko
parcialmente desenvaino la punta de su katana. Su espada mágica, la cual había
sido partida en dos, ahora estaba completamente reparada sin ningún rasguño por
encima.
[Durga, el Titánico Herrero quien
trabaja en el castillo, la reparó para mí. No creo que haya problemas cuando
luche con ella.]
[Y, terminaron a tiempo. Es bueno
oírlo.] Alvin dijo, sonriendo con alivio. [De acuerdo a Sir Sid, si seguimos
consumiendo nuestra Voluntad en regulares bases, nuestra cantidad de maná total
incrementará, y nuestras espadas mágicas se harán más fuertes en el camino.]
[¿Está bien eso?] Tenko murmuró en
silencio. Alvin miró alrededor una vez más. Christopher, Elaine, Lynette,
Theodore y Flora fueron asignados a diferentes trabajos, pero no había nada
particularmente urgente. Mientras Alvin observaba a sus compañeros, Tenko de
pronto habló. [Aunque, las cosas se han alocado bastante, ¿huh, Alvin?]
[Tienes razón.]
[Aunque, estará bien.] Tenko dijo. Ella
hablo como si estuviera malhumorada. [Después de todo, el más fuerte caballero
de la era legendaria está luchando en la línea frontal.]
[¿Tenko?] Alvin dijo, algo se sentía
raro con sus palabras. Parecían tener un significado escondido detrás de ellas.
Por un momento, hubo un incómodo
silencio entre las dos hasta ahora, eventualmente, Tenko habló. [¿Puedo hablar
contigo de algo?]
[¿Qué pasa, Tenko?] Alvin dijo,
inclinando su cabeza con curiosidad, y entonces empezó a regañarla.
[Alvin, ¿no ha estado bastante cerca de
Sir Sid últimamente?]
[¡¿Qué?! ¡N-No lo creo!] Alvin dijo
mientras levantaba su voz y apartaba la mirada. Tenko se acercó y tomó la mano
de Alvin.
[¿Tenko?] Jalando la mano de Alvin,
Tenko se la llevó a un desierto callejón.
Tenko habló en una silenciosa voz para
que nadie cerca pudiera escuchar.
[Entiendes, ¿cierto? Eres una chica. Si
dejas que se acerque demasiado y lo descubre, ¿qué harás?] Tenko dijo, y la
expresión de Tenko se tensó por una razón que Tenko no entendía. [Escucha. Por
favor no bajes tu guardia. No puedes bajar tu guardia con él. Claro, puede ser
increíblemente fuerte, pero… eso es.] Ella se acercó a Alvin y continúo
hablando con furia.
[Él es el legendario Bárbaro. Es el
hombre que llaman cruel, inhumano, y una desgracia para la caballería. Puede
estar actuando como un caballero por ahora, pero no se sabe cuándo mostrará su
verdadera naturaleza. Si descubre que eres una mujer, lo usará para hacerte
diferentes cosas horribles. ¡Demandará que uses tu cuerpo para satisfacer sus
vulgares deseos!]
[¡S-Sir Sid nunca haría algo como eso!]
Alvin protestó, en viva sonrojes. [¡Sir Sid no es alguien que haría ese tipo de
cosas! ¡A pesar de cómo se ve, es más sincero y gentil que nadie más!]
[¿Cómo puedes estar tan segura?]
[U-Um, bueno…]
[¡No puedes confiar en Sir Sid! ¡Absolutamente
no!] Tenko tomó los hombros de Alvin y habló como si estuviera rogando. [¡Yo
soy quien va a protegerte! ¡Hice una promesa! ¡Incluso si significa dar mi
vida, lo haré! ¡Te protegeré! Así que no dejes que alguien como él…]
Alvin no podía evitar darse cuenta del
extraño comportamiento de su amigo. [Hey, Tenko… ¿qué ocurre?] Alvin pregunto
gentilmente, tratando de calmar a Tenko.
[No puedo culparte que no te agrade Sir
Sid, pero se siente que estás muy molesta… o preocupada por algo más.]
[E-Eso no es…] La observación de Alvin
de inmediato puso nerviosa a Tenko.
Alvin sabía que estaba en lo correcto
por la forma en que las orejas de Tenko caían y su cola se encogía cuando era
atrapada en momentos como este. [Hey, ¿Tenko? Si hay algo que te preocupe,
¿podrías contármelo?] Alvin se lo preguntó con calma a Tenko. [Hemos sido
mejores amigas desde que éramos niñas, ¿cierto?]
[A-Alma…] Tenko miró a Alvin como si
estuviera aturdida. Había usado el nombre real de Alvin. Solo podía ser usado
cuando estaban juntas. Sin embargo, luego de un rato, Tenko regresó a sus
sentidos. [No, Alvin. No es nada. No hay nada raro.] Ella respondió, con sus
ojos caídos.
[Tenko.] Dándose cuenta que su amiga de
la infancia no tenía nada que decirle, Alvin murmuró su nombre con tristeza.
[Nuestros superiores se molestarán si
nos alejamos de nuestros puestos por mucho tiempo. Volvamos.] Tenko dijo y
estaba por irse.
Sin embargo, justo entonces, la niebla
cayó por el área. [¿Qué? ¿Niebla?] Alvin dijo. Envolvió toda la capital y
rápidamente se volvió más espesa. [Esto es extraño. Temprano en la mañana es
algo, pero ¿que esté tan nubloso así de repente a esta hora del día?]
[Tienes razón. Es extraño.] Alvin y
Tenko inclinaron sus cabezas a este extraño y raro fenómeno. De pronto, hubo un
fuerte ruido. Desde lo profundo del callejón trasero en el rincón sur de la
Capital Real, un extraño ruido como un latido pasó por la capital.
Mientras, en las Planicies Fabome, al
norte de la Capital Real, los dos mil caballeros fantasmales quienes cruzaron
las Montañas del Palacio de la Muerte y los dos mil caballeros que venían del
sur estaban viéndose entre sí. Los caballeros fantasmales del país demoniaco se
montaban arriba de los caballos conocidos como corceles fantasmales, y sus ojos
carmesís brillaron dentro de sus capuchas. Buscaban destruir todas las cosas
vivientes. Eran del tipo de formación densa sin espacios que se vuelve una sola
masa mientras pisotean todo lo que este al frente. Cuando consideras la
habilidad de lucha de cada caballero fantasmal, no era una estrategia para ser
tomada a la ligera. Incluso con las diez veces el número de soldados, las
tropas normales serían repartidas y aplastadas con esta táctica.
Los caballeros mágicos oponentes
también estaban montando sus caballos de guerra y actuaban como caballería.
Eran una formación V y traspasaron tres partes, con un centro y dos líneas
diagonales de tropas para envolver al enemigo. Las tropas centrales atraparían
al enemigo mientras los otros intentarían cercarlos y aniquilarlos de izquierda
a derecha. En una pequeña colina al final de la armada del reino, los capitales
del primer, segundo y tercer orden caballeresco se reunieron.
[Casi es hora.] Sid dijo mientras
apretaba sus ojos y observaba las líneas enemigas en la distancia. No estaba
montando un caballo y era el único caballero participando como un soldado
caminante en la batalla.
[Sí. Eso es esta formación no es mala,
puede funcionar.] Isabella dijo y asintió. Estaba a la par de Sid sobre un
caballo mientras hábilmente sostenía las riendas de su corcel. Isabella, la
guardiana de Alvin y la representante política de la Familia Real, estaba
sirviendo como el comandante supremo en acuerdo. Con su experto comando y
manejo de tropas, ya había creado una situación favorable para ellos en esta
batalla.
[Gracias por todo su arduo trabajo,
Lady Isabella. Sin embargo, haremos lo que queramos desde ahora en adelante.]
El Duque Durande dijo desde atrás de Isabella mientras montaba a su caballo.
[Eres un representante de la Familia Real. No estamos obligados a seguir tus
órdenes.]
[Además, eres un oficial civil. Pareces
ser bueno en política, pero me pregunto de tus habilidades en asuntos
militares. ¿No crees que sería lo mejor para nosotros irnos?] El Duque Ortol
dijo.
[Bueno, dicen que los expertos lo saben
mejor. Buen día.] El Duque Anthalo añadió.
[Deberías hacer lo que gustes. Eso es,
si tienes una fuerza militar para seguirte.] El Duque Durante dijo. Luego que
los tres duques dieran su opinión, se dirigieron a las tropas que comandaban en
su dominio. Luego de despedir a los tres duques egoístas, Isabella libero un
suspiro.
[Bueno, bueno. Me pregunto por qué no
escuchan a su comandante.]
Sid sacó su disgusto mientras sus manos
estaban cruzadas detrás de su cabeza.
[Dicen lo que quieren, pero eres una
estratega militar muy buena, ¿verdad, Isabella? No hay errores en tus órdenes.]
[No, yo solo…]
[Hahaha. No sean humilde. Un oficial
civil regular no había sido capaz de lidiar con la marcha de una armada y hacer
esta formación. En el fondo, eres un oficial militar, ¿verdad?] Sid dijo, e
Isabella hizo una sonrisa rara. Sid soltó un suspiro mientras daba miradas de
costado a las espaldas de los tres duques. [Si solo se movieran como ordenaste,
incluso los caballeros de esta era serían capaces de superar a esos caballeros
fantasmales con mínimas bajas.]
[Por el bien de sus reputaciones y
futuros intereses, probablemente no les gusta la idea de una victoria bajo el
comando de Isabella, representante de la Familia Real.]
[Hahaha. Ya veo. Que estupidez. Aunque,
es más conveniente de esta forma.] Sid dijo, y con una sonrisa, empezó a
estirar sus piernas de izquierda a derecha.
[¿Qué vas a hacer, Sir Sid?]
[¿Hm? No es obvio, ¿verdad?] Mientras
Sid estiraba sus piernas, miró atrás y sonrió le sonrió a Isabella como un
problemático. [Dijeron que haría lo que quisiera, ¿cierto? Bueno, eso es lo que
haré.]
Al final, las cortinas se levantaron en
la batalla, y los caballeros fantasmales empezaron a moverse. Azotando a sus
corceles fantasmales, atacaron en unísono, y los tremendos golpes de las
pezuñas de sus caballos agitaron la tierra. La densa formación de los
caballeros fantasmales era como si un negro tsunami estuviera consumiendo todo.
En respuesta, los tres duques empezaron a moverse e interceptarlos juntos.
Un cuerno sonó, y un grito de batalla
se alzó. Cada caballero sacó su espada, tomó la rienda de su caballo. La
bendición de la espada mágica también era efectiva en el caballo del caballero,
así que al enviar maná de su espada mágica a su caballo, el caballo ganó una
increíble velocidad y rigidez. Sin dudar, esta caballería con espadas mágicas
era una uno de los más fuertes tipos de soldados en esta era. Sin embargo, sus
oponentes eran caballeros fantasmales. Un caballero fantasmal en un corcel
fantasmal posee una terrorífica movilidad y habilidades de combate cercano. Si
ambos lados chocan de frente, entonces una fiera batalla era garantizada.
Incluso los caballeros endurecieron sus expresiones al pensar de la mortal
batalla que les esperaba.
Justo mientras el choque entre las dos
armadas se estaba acercando finalmente, un solo caballero en toda la armada se
armó desde los rangos de la Armada Real. Era Sid, el único caballero en toda la
armada que iba a pie. Aunque, se movía más rápido que cualquier otro caballero
a caballo. Con una increíble velocidad, cruzó las planicies y dejó atrás a
otros caballeros al instante.
[¡¿Es más rápido que un caballo
mientras va andando?!]
[¡¿Q-Qué demonios?! ¡¿Q-Qué con este
tipo?!] Los caballeros que Sid estaba dejando atrás vieron con los ojos bien
abiertos a su espalda encogerse.
[Bien.] Sid ijo, completamente
despreocupado por los caballeros que dejo atrás. Rápido, los caballeros
fantasmales invasores que parecían pintar el horizonte de negro con su densa formación
se hacían más grande en su campo de visión. Parecía que lo notaron yendo solo,
y varios caballeros fantasmales fueron a Sid con sus espadas desenvainadas,
apuntan a él. [¡Muy bien, hagamos esto!] Sid dijo, y sin bajar el paso, corrió
directo al enemigo. Con un grito, con fiereza movió su mano derecha, y un
vendaval sin misericordia golpeó una sección de la línea frontal de los
caballeros fantasmales.
Lo que estaba pasando era increíble. En
el medio del campo de batalla, en la brecha de la vida o muerte, no había
tiempo para distraerse por algo. los caballeros de la Armada Real sabían esto.
Aun así, no podían evitar tener su atención puesta en el espectáculo frente a
ellos. Mientras daba un fiero grito, Sid luchó en el centro de todo. Luego de
atacar por sí solo, estaba aislado en las profundidades de los caballeros
fantasmales. Normalmente, sería un callejón— el punto cuando el destino de una
persona sería sellado. Sin embargo, Sid no estaba en ningún peligro.
Incontables caballeros fantasmales fueron por él desde el frente, atrás,
izquierda y derecha, tratando de destruirlo y quemarlo. Sin embargo, Sid no
tenía ningún rasguño. Casi como si pudiera ver todo alrededor de él a la vez,
movió su cuerpo a la derecha, se movió a la izquierda, saltó, hizo una
voltereta, y continuó esquivando todo. Esquivando sus ataques con un grito,
movió sus brazos y piernas en un agitado asalto. Con su mano derecha medio
abierta, mando a volar la cabeza de un caballero mágico que se acercaba a su
derecha. Con su puño izquierdo, creó un enorme hoyo en el pecho del caballero
fantasmal llegando de la izquierda. Luego saltó, giró su cuerpo como un
remolino, y repartió una patada de hacha tan fiera que cortó a un caballero
fantasmal y su caballo detrás de él a la mitad. Era como si Sid estuviera
danzando en el medio del campo de batalla. Con cada movimiento de sus brazos y
piernas, los caballeros fantasmales se hicieron polvo y desaparecieron. Ya no
era una batalla. Era solo una masacre.
[¡¿Quién es?!]
[¡¿Cómo está haciendo todo eso sin una
espada mágica?!]
[¡¿Eso es un caballero de la era
legendaria?!] Los caballeros reales estaban atontados, y todo lo que podían
hace era observar la fiera batalla de Sid desde lejos. Bajaron sus hombros y
temblaron del temor. Mientras observaban, Sid movió su mano medio abierta de
forma horizontal, y tan rápido como una flecha se libera de su arco, cortó a
tres caballeros fantasmales atacando desde el costado con un contraataque de su
puño derecho. Al siguiente momento, aún en guardia, Sid de pronto desapareció
en la neblina. Luego, con un ruidoso boom en una parte completamente diferente
del campo de batalla, varios caballeros fantasmales fueron lanzados al cielo.
Allí, la erradicación unilateral de Sid a los caballeros fantasmales inició
otra vez.
[¡¿Se movió hasta allá en un
instante?!]
[¡Es tan rápido que no puedo seguirlo!]
Sid estaba destruyendo a los caballeros
fantasmales en un paso alarmante. Los caballeros fantasmales eran poderosos
oponentes, cada uno de ellos tiene la fuerza necesaria como los caballeros
mágicos del reino. Luchar contra los caballeros fantasmales requería que los
caballeros mágicos formen rangos con sus espaldas una a la otra para proveer
cubertura mientras se lucha el uno contra uno o, preferiblemente, uno contra
varios. Aun así, apenas podían derrotar a un solo caballero mágico con unos
cuantos cortes de espadas, y tomaría algunas veces docenas de golpes para por
fin destruir a uno. Así de fuerte se supone que son los caballeros mágicos.
Sid grito mientras corría a través de
cinco caballeros fantasmales a una vertiginosa velocidad, zigzagueando como un
relámpago. Era como una luz parpadeante, solo visible por un momento siempre y
cuando su velocidad caía levemente para cambiar de dirección. Luego que pasara
a los cinco caballeros fantasmales, y luego de un breve retraso, todos cayeron
en piezas y desaparecieron a la vez.
[Estás bromeando…]
[E-Esto no puede ser real.] Los
caballeros que estaban atestiguándolo, lentamente empezaron a darse cuenta de
algo. Lo que Sid dijo antes de la batalla acerca de ser más fuerte que los dos
mil caballeros mágicos era cierto.
[¡¿Q-Qué están haciendo todos ustedes?!
¡¿Por qué están esperando?!] La voz de enojo del Duque Durante resonó desde
atrás de las espaldas de los caballeros.
[¡¿Por qué se queda ahí mudos y dejan
que un solo caballero lo haga mejor que ustedes?! ¡Mátenlos rápido! ¡Maten
tantos como puedan!] El Duque Durande desesperadamente estaba tratando de
mantener su compostura, pero su rostro estaba totalmente pálido. Era obvio que
estaba en su límite, y su expresión mostraba que no quería admitir la extrema
diferencia entre la fuerza de sus tropas y el caballero de la era legendaria
ante sus ojos.
[No puede ser.] El Duque Ortol dijo.
[Había oído los rumores, pero no
esperaba… todo esto.] El Duque Anthalo dijo. No tan agitado como el Duque
Durande, ambos tragaron saliva y estaban intranquilos mientras observaban la furiosa
batalla de Sid desde atrás del campo de batalla. Los dos mil caballeros
fantasmales que fueron partidos a la mitad por el asalto de Sid estaban fuera
de lugar y ahora no eran más que una desordenada multitud. Sid fue de un
extremo a otro, cogiendo y ocupándose de los caballeros fantasmales quienes
habían sido partidos en grupos más pequeños. Por ahora, era claro para todos
quien lograría más si la batalla seguía este rumbo.
¿Serían los caballeros rojos del Duque
Durante? No. ¿Serían los caballeros azules del Duque Orotol? No. ¿Sería el
Duque Anthalo y sus caballeros verdes? Absolutamente no. Sería la leyenda
revivida, Sir Sid el Bárbaro.
[Hm, parece que la batalla ha sido
decidida.] Cerca de una hora había pasado desde que el combate inició. Dándose
cuenta que ya no había más enemigos alrededor de él, Sid dejó de luchar.
Gracias a que él rompió los rangos de los caballeros fantasmales y
considerablemente disminuyendo sus números, creó una ventaja irreversible para
los caballeros mágicos reales. En las cercanías, tanto aliados como enemigos se
mezclaban entre sí y participaban en el combate, pero, en general, los
caballeros mágicos tenían la carta mayor. Acabar por completo con el resto de
los caballeros fantasmales tomaría tiempo, pero mientras nada pasara, la
victoria de la armada real era asegurada.
[Bueno, he contribuido suficiente a
esta victoria, así que ahora esos duques no deberían ser capaces de decirle
algo a Alvin…] Satisfecho con sus logros, Sid giró su espalda al campo de
batalla y empezó a volver al campamento. Sin embargo, junto con la cacofonía
del latido de su corazón, de pronto el cuerpo de Sid se tambaleó, y cayó al
suelo con una mano y rodilla en el suelo. Su respirar era duro, su rostro se
retorcía en agonía, y su cuerpo se agitaba sin control. Sentía un vacío como
que su alma se saliera de él. Sudor frío cubría todo su cuerpo, y se puso
pálido. Eventualmente, esto se calmó, y se tambaleaba de pies.
[Fuiste y te sobrepasaste, maldito
idiota.] Él se quejó para sí y agitó su cabeza. Luego camino hacia el
campamento principal.
[¡S-Sir Sid!] Del campamento principal,
una sola mujer llego montando un caballo a mucho galope hacia Sid. Era
Isabella. [¡Discúlpeme por venir a caballo! ¿Todo bien, Sir Sid?] Isabella
llegó a su costado y jaló las riendas del caballo para darle vuelta y
estabilizarlo. [Tu rostro luce pálido, y luces…] Tomando nota de la rara
naturaleza de Sid, los ojos de Isabella se abrieron, y lo entendió. [¡Sir Sid,
¿no me diga que…?!]
[Yo, Isabella. Reduje sus números lo suficiente
para asegurar nuestra victoria.] Sid dijo, ignorándola y sonriendo. [Tomará un
rato hasta que las cosas se calmen, pero hemos ganado. No hay nada más para que
yo haga.]
[G-Gracias por tus esfuerzos. En
efecto, eres un caballero de la era legendaria. No creía que fueras tan
fuerte.]
[No es la gran cosa. Había muchos tipos
que podía hacer este trabajo en la era legendaria. Pero dejando eso de lado…]
Sid dijo y levantó la mirada para Isabella con una dura expresión. [No viniste
hasta acá solo para agradecerme, ¿verdad?] Sintiendo la inquietante atmósfera
que traía Isabella, Sid la apresuró a hablar. [¿Qué pasa?]
[C-Cierto. La verdad es, acabo de
recibir la noticia de la capital por el duendecito mensajero.]
[¿De la capital?]
Isabella, quien se había puesto pálida,
asintió. [¡Sí, justo ahora la capital está en grave peligro!] Isabella
firmemente declaró.
El profundo y poderoso rugido de una
bestia resonó por la capital.
El sonido era aterrador, y agitó el
aire, partió el cielo, e hizo a la tierra temblar. Este salvaje rugido era como
un volcán haciendo erupción o alguna otra fuerza violenta de la naturaleza. De
ello vino una onda de choque más grande que un viento de montaña que al
instante se extendió a una gran distancia como un disparó de flecha de un
enorme arco. El impacto de la voz se regó y arrasó las casas que por desgracia
fueron impactadas directamente. El rugido trascendió la lógica e impactó
directamente a las almas de todos quienes lo escucharon, al instante destrozó
sus corazones y mentes. El grito le pertenecía a una criatura que alzaba en la
cima de la cadena alimenticia y cuyo rugido naturalmente estaba imbuido con una
terrible y poderosa magia. Entre los citadinos de la capital golpeados por el
rugido mágico, un tercio de ellos al instante se desmayaron, y el otro tercio
colapsó de la parálisis o sobrecargo de sus sentidos, y el último tercio se
encontraron perdidos en medio del miedo puro y desesperación. Era tan fuerte
que posiblemente envió a esos con una mente o cuerpo débil a un eterno letargo.
Tanto el rugido de una bestia tiránica y una forma de magia conocida como el
aplastador grito o “Stun Slaughter”, y era la única cosa en existencia que
podía hacer tal cosa.
[¿Q-Qué es eso?] Alvin dijo. Había
realizado la guardia en el nivel más alto con los otros y ahora estaba
observando con horror desde la lejanía. Un gran monstruo con un cuerpo como una
montaña de pronto había aparecido en el área sur de la Capital Real. El Kirimu
que se encontraron antes ni siquiera se comparaba al abrumador tamaño de este
monstruo. A pesar de estar lejos de la bestia, podían sentir su opresiva
presencia como si estuvieran a su par. Era tan grande que entumeció la
perspectiva de los sentidos de Alvin. Solo por vista, podía decir que sus
brazos y piernas— gruesos como grandes árboles— tenían un inexplicable y
violento poder. Las escamas que cubrían todo su cuerpo eran de un negro
brilloso. Su mandíbula era enorme, y sus ojos rojos ardían. Era un tirano
absoluto que reinaba sobre los humanos desde su lugar en la cima de la cadena
alimenticia. Era un dragón, la clase más grande de monstruo y una manifestación
física de un tirano nacido del temor y miedo sentidos hacia su violenta
naturaleza.
Casi como si acabara con los cielos, el
dragón una vez más abrió su mandíbula al cielo y libero un enorme rugido. Fue
una masiva onda de sonido que se esparció por la capital, y luego de unos
segundos, la poderosa onda de choque impactó a Alvin y los otros de frente. La
fuerza de eso envió el cuerpo de Alvin al aire y estuvo rodando sin más.
[¡¿P-Por qué?! ¡¿Por qué hay un dragón
aquí?!] Alvin dijo, temblando de manos y rodillas mientras levantaba la mirada
y veía al dragón en la distancia.
[Parece que por fin está pasando.]
Alvin de pronto oyó una voz, y le pertenecía a una figura que apareció a su
lado. [La bendición de Éclair es muy fuerte en la capital. Realmente la pase
mal retocándolo.]
[¿Flora?] Alvin alzó la mirada para ver
a la chica de la clase Blitze quien estaba siempre relajada y casual. Incluso
ahora, estaba sonriendo, luciendo tan despreocupada como solía serlo, viendo al
dragón que había aparecido en la distancia.
[Flora, ¿qué estás diciendo?] Alvin se
paró y se enfrentó a Flora, quien de alguna forma se veía diferente a su usual
yo.
[Oh vaya.] Flora dijo y le pestañó con
sorpresa a Alvin. [Eres capaz de pararte incluso luego de recibir el Stun
Slaughter del dragón. En serio, estoy sorprendida. Sí que tienes una fuerte
Voluntad, ¿verdad, Príncipe? Tienes mi respeto.] Flora dijo y junto sus manos.
El fino sonido de sus aplausos fuera de contexto resonó por el área. Ella era
tan casual como era, pero claramente había algo extraño en ella. Había un
sentimiento que algo estaba mal.
Había algo extraño en Flora desde el
principio.
La percepción—no, de todos— de Alvin de
Flora era que era una amiga con quien compartieron dificultades. Aunque, en el
fondo, Alvin siempre se había sentido incómoda con Flora. Sin embargo, hasta
ahora, no podía cuestionarlo porque este hechizo no le permitía hacerlo.
[Flora, tú eres…] Ahora que las
sospechas de Alvin hacia Flora habían llegado a su pico, por fin era capaz de
pensar en este inconforme sentimiento. [Flora, somos amigos… de la misma
clase.]
Los recuerdos de Alvin se fracturaron
como un caleidoscopio, gradualmente llevándola a la misma conclusión. [No… tú
eres… ¿quién eres?] Alvin dijo, y Flora respondió con una fría y rara sonrisa.
[La clase Blitze es solo de seis: Tenko, Elaine, Christopher, Lynette, Theodore
y yo. ¡Debería ser una clase pequeña de solo seis personas!]
[Oh, ¿así es?]
[Una estudiante llamada Flora no existe.
¡¿Quién eres?!] Alvin demandó, y los hombros de Flora cayeron con un suspiro. Se
veía algo molesta.
[Ves, en el pasado, las brujas usaban
algo llamado “la línea entre la mentira y la verdad”. Era un tipo de magia
donde el usuario podía introducir información en la mente de un sujeto y
manipular su percepción de la realidad. Sin embargo, no estoy tan engreída para
pensar que puedo hacer funcionar tal magia en la mente de un caballero de la
era legendaria. Es por eso que la lancé en ti y tus amigos antes de reunirme
con el gran caballero.] Era como ella dijo. Incluso si su magia no funcionaba
en Sid, funcionaría en Alvin y los otros. Si no se daban cuenta que estaban
siendo engañados por su magia, no había forma que Sid pudiera verlo todo y nunca
se daría cuenta que había una estudiante llamada Flora en primer lugar.
[¡¿Qué?! ¿Dices que nos lanzaste un
hechizo el día que Sir Sid llegó a nuestra clase?]
[Sí, si soy honesta, en realidad sentía
que los últimos días que pase con ustedes no eran tan malos, ¿sabes?] Flora rio
y oscuridad se junto a su alrededor. Era del tipo de oscuridad que era tan
espesa que se tragaría todo, y mientras la oscuridad se formaba alrededor de
Flora, empezaron a cambiar su apariencia. [En la escuela, todos trabajábamos duro
hacia un solo objetivo, ¿y no es eso a lo que llamas juventud? A pesar de cómo
podía lucir, no lo odiaba. Al menos, pensé que éramos amigos… incluso si esa
falsa amistad era una torre de arena.] Mientras se reía, la oscuridad alrededor
de ella cambió de forma en una negra capucha y toga, y la existencia que era
Flora fue reescrita por la fantasmal figura de una bruja. [Ahora, permítanme presentarme.]
Ella dijo, levantando el borde de su toga y dándoles una educada inclinación. [Soy
la gran bruja, Flora, la cabeza de la Orden Oscura de Opus, la cual es dedicada
al Dios Hada Oscuro. Me da gusto hacerlo de su conocimiento… aunque puede ser
no por mucho.]
[¡¿La Orden Oscura de Opus?!] Alvin
dijo, echándose atrás de Flora y sacando su espada mágica. [¡¿Ese dragón que
está aquí es por ti?!]
[Sí, eso es.] Flora respondió con una
sonrisa.
[¿Sabías que esta ciudad real solía fusionarse
entre el mundo material y el mundo de las hadas? Es decir, este es uno de los
lugares más cercano al mundo de las hadas. Así que me aproveché de eso.] Sin
prestarle atención a Alvin y su espada desenvainada, Flora se dio la vuelta y
vio al dragón en el centro de la ciudad. [Al usar magia antigua, conecté el mundo
físico y las profundidades del mundo mágico creando una “puerta” y un “camino”
para invocar al dragón aquí. Tengo que decirlo, era bastante trabajo, preparar
el ritual mientras iba sin ser identificada por la Doncella del Lago.]
[¡¿Por qué hiciste eso?!] Alvin gritó,
como si estuviera por cortar a Flora.
[Lo hice para destruir por completo la
capital, y claro.] Flora susurró felizmente, y sus frías palabras parecía hacer
que la temperatura decayera unos grados.
[¡¿Destruir la capital?!]
[Sí, esta capital fui construida por el
Rey Santo Arthur y, especialmente, el castillo. Es una molestia para los deseos
de mi maestro. Así que voy a sacarlo del mapa.] Flora miró con calma a Alvin,
quien se echó a sudar en frío y se puso pálida. [Es por eso que he estado trabajando
en secreto en este plan por un tiempo. Usé a los caballeros fantasmales para
crear una división y sacar a los caballeros mágicos del castillo. Ahora, con la
ciudad real vacía, el dragón que invoqué de las profundidades del mundo de las
hadas se reducirá a cenizas. Simple y efectivo, ¿no crees?] Flora dijo con una
sonrisa.
[¡¿Qué has hecho, Flora?! ¡Tayweed!] Encendida
del enojo, Alvin habló el antiguo lenguaje mágico para viento de cola hacia su
espada mágica y activo la magia de hadas verde. “Vendaval”. Envuelto en un
poderoso vendaval, Alvin se movió a gran velocidad y fue por Flora.
[Oh vaya.] Flora dijo, y todo lo que
Alvin corto fue su sombra. Para el momento que Alvin se dio cuenta, Flora
estaba parándose en el techo de un edificio cercano, viendo a Alvin con una
expresión relajada. [Oh, no te preocupes. No te haré nada. Invocar al dragón ese
ritual mágico consumió una considerable cantidad de mi maná. Sería una molestia
luchar contigo por lo cansada que estoy ahora.] Flora dijo algo en una lengua mágica
antigua, y un círculo mágico apareció debajo de sus pies. El lugar lentamente
se llenó con sombras, y la figura de Flora empezó a desaparecer.
[¡E-Espera! ¡¿Estás huyendo?!]
[¿Huir? ¡Te estoy perdonando! Aun tienes
valor como un respaldo para esa chica.]
[¡¿Respaldo?! ¡¿De qué estás hablando?!]
[Bueno, es solo si puedes sobrevivir
contra el dragón.] Flora dijo y por fin fue tragada por la oscuridad y desapareció.
Frustrada, Alvin incrusto su espada en
el suelo y la tomó con fuerza. Sin embargo, ahora ya no era el momento para
sentarse enfadada. Justo ahora, algo tenía que hacerse respecto al dragón
atacando la ciudad real. Alvin miró al centro de la capital, la cual ahora se había
vuelto el frente de línea donde el gran dragón estaba atacando al azar, sin
medirse en nada. Con un solo golpe de sus garras o cola, destruía cada edificio
alrededor, y las llamas que salían de su boca incendiaron al área circundante, tornándola
en un infierno abrazador. La evacuación de los ciudadanos del área ya estaba
completa, y no había nada que decir cuántas vidas se habrían perdido si se
hubiera retrasado solo un poco.
Mientras, los caballeros mágicos del Reino
de Calvania no estaban felices de estar en espera y observar como esta amenaza atacaba
la capital.
Esos que se quedaban atrás en defensa
de la capital real ya no estaban divididos en las órdenes de azules, rojos o
verdes. Todos se había reunido ante el dragón, se prepararon para dar sus vidas
en la lucha para detener su destrucción. Liberaron a su mejor estilo de esgrima
y de magia de hada. Espadas de llamas, bolas de fuego voladoras, fuertes vendavales
congelantes, incontables lanzas de hielo, espadas de aire, flores venenosas, y
rocas llegaban de cada dirección en un intento de apaciguar al dragón.
Sin embargo, ninguno de ellos pudo
perforar sus duras escamas. El dragón estaba molesto por los caballeros, como
si fueran molestos insectos para él. El dragón los destrozó con un gran movimiento
de su cola— también sus garras y colmillos eran tan grandes como troncos. Esta tormenta
de violencia pura fue liberada a una velocidad y agilidad que era increíble para
el enorme tamaño del dragón, e, incapaz de hacer algo contra eso, los
caballeros simplemente fueron aniquilados.
[¡Sir Sid!] Inconscientemente, Alvin
miró a su mano derecha y desesperadamente trató de decir el nombre de Sid. No había
respuesta de la cresta. Quizás la niebla temporalmente había cortado la conexión
de Alvin con Sid. No podía invocarlo. [¡Es cuestión de tiempo que el cuerpo de
defensa sea completamente aniquilado, y cuando eso suceda, los ciudadanos
viviendo en la ciudad real seguirán!] Justo mientras Alvin decía esas palabras,
el dragón movió sus pies y empezó a ir bajar directo por el camino principal hacia
el castillo, totalmente despreocupado por los caballeros mágicos destruidos.
Ya sea que fuera ordenado a hacerlo o
era simplemente un capricho, iba a atacar el castillo directamente, y sacudió la
tierra con cada paso que daba. Incluso para el Castillo de Calvania, si fuera a
ser golpeado por el gran cuerpo del dragón, no tendría oportunidad. Además,
había personas que había tomado refugio dentro del castillo en caso de
emergencia.
[¡Chicos!] Alvin dijo mientras girada
su espada a ver a sus compañeros. [¡Podemos ser escuderos que aún no son
concedidos caballeros, pero aún somos los escudos que protegen a este reino! ¡Ahora
es el momento de mostrar que hace un caballero un caballero! ¡Vamos y detengamos
a ese dragón!] Alvin dijo, apresurando a sus compañeros. Todo estaban en
silencio. Elaine, Christopher, Lynette y Theodore sentados sin paz como si sus
almas hubieran dejado sus cuerpos. Claro, no solo era la clase Blitze. Los estudiantes
de las otras clases que habían estado en esperado estaban igual de desamparados
y temblando. Era lo mismo para Tenko, quien estaba en lágrimas e hiperventilándose
mientras se escondía, sacudiéndose sin control.
[¡¿P-Puede ser?!] Impresionada, Alvin
se dio cuenta que algo estaba mal con ellos. Era el Stun Slaugther del dragón. Los
dragones eran una especie superior a los humanos y eran como si la furia de la
naturaleza hubiera tomado forma y se materializada. El rugido del dragón era como
una maldición. Con un solo grito, mantuvo a todos quienes lo oían calmarse, incapaces
para incluso pensar. Aparte de Alvin, todos los otros estudiantes estaban bajo
la influencia del profundo poder mágico del Stun Slaughter. Sus espíritus habían
sido acabados, y habían perdido la voluntad de luchar.
[¿L-Luchar contra eso? ¿E-Es en serio?]
Tenko dijo, temblando mientras miraba a Alvin con lágrimas en sus ojos. [N-No
hay forma que podamos ganar. Seríamos aplastados y devorados, ¿cierto?]
Impresionada por las palabras de Tenko, Alvin cerró sus ojos. Todos los otros
estudiantes estaban en un estado de mente similar al de Tenko.
¿Qué debería hacer? ¿Qué debería hacer? Alvin pensó. Justo ahora, la situación
era desesperada, y no había tiempo para dudar. Incapaz de tomar una decisión,
Alvin apretó sus dientes.
[A-Alvin… huyamos.] Tenko murmuró.
[¿Tenko?]
[E-Entiendo que quieres luchar para
proteger la capital porque eres el príncipe de este país. ¡P-Pero ¿cómo planeas
pelear en serio con esa cosa?!] Tenko gritó, señalando su dedo al dragón que
estaba caminando al castillo. [¡No podemos ganar! ¡No forma que puedas ganar!]
Alvin se quedó en silencio.
[Serás asesinada si luchas contra esa
cosa, Alvin. ¡De seguro morirás, y no quiero que lo hagas! Así que abandona a
tu gente y huyamos jun—]
Justo como Tenko estaba por decir esas
palabras que justificaría el final de alguien como caballero, un gran sonido
resonó por el área. Alvin golpeó las mejillas de Tenko mientras se acobardaba
como una mosca.
[¿Huh?] Estupefacta, Tenko presionó sus
mejillas. Mientras, Alvin la veía severamente antes que su expresión cambiara a
una sonrisa triste.
[Eso no es bueno, Tenko. Dejarás de ser
un caballero si hablas así.] Alvin dijo mientras una asombrada Tenko abría sus
ojos.
[Yo… Yo estaba…]
[Está bien. entiendo. Estoy segura que
no querías decir lo que dijiste. Es una reacción temporal a la magia del
dragón.] Alvin dijo, gentilmente amonestando a Tenko y poniendo sus manos en los
hombros de Tenko. [Pero un caballero nunca debería decir eso. quieres ser un
caballero, ¿verdad? Del tipo de gran caballero que le serviría a un maravilloso
rey como mi padre, el Rey Auld.]
[Yo…]
[Estoy segura que te convertirás en un espléndido
caballero algún día. Así que no deberías decir eso.] Alvin dijo y se paró.
[Alvin, ¿a-adónde vas?]
[Voy a luchar contra el dragón. Incluso
si todos los demás en este país huyen, yo no puedo. Y eso es porque soy su rey.]
Con una determinada voluntad, Alvin se dio la vuelta sin dudar en sus pasos.
[¡E-Espera! ¡P-Por favor espera!] Tekno
gritó, aun en el suelo y apuntando a Alvin. [¡No vayas! ¡No puedes ir! ¡Si lo
haces, morirás! ¡Serás asesinada!]
[Sí, probablemente moriré en esta
batalla. Pero si fuera mi padre, él seguramente se quedaría y lucharía hasta el
final. La razón principal es porque quiero salvar a este país.] En un severo
silencio, los ojos de Tenko se abrieron a las palabras de Alvin. [Al final, amo
a este país. Tú y todos los demás aquí. Hay muchas adversidades, pero amo a
este país porque podemos sonreír y estar juntos. Así que quiero salvarlo…
incluso si me cuesta la vida. Supongo que este mi camino al trono.] Alvin dijo
mientras caminaba con dudosos pasos. Luego de dejar solo esas palabras y una agitación
de su capa, Alvin con valentía fue hacia adelante. Sacando el maná de su espada
mágica, Alvin revisitó su cuerpo en magia de viento. Acelerado por el torbellino
de su magia de hadas, Alvin surcó por los cielos de la capital real y se
dirigió directo al dragón, pasando por los techos de los edificios de la
ciudad.
[A-Alvin… ¡Alvin!] Tenko solo pudo gritar mientras iba por la espalda de Alvin.
No hay comentarios:
Publicar un comentario