Full width home advertisement

Post Page Advertisement [Top]

 

Ayaha Interludio III

 

[Dime, Ayaha].

 

Mi último recuerdo de ella.

 

[Hm, ¿qué?]

 

Antes que lo dejáramos por hoy, observamos el naranja en el cielo siendo absorbido por el purpura crespúsculo. Estábamos terminando la conversación acerca de mi poder.

 

[¿Está mal si no lo usas?]

 

Estábamos hablando acerca de cómo lo usaríamos hasta ahora. Pero lo que había querido preguntar era eso.

 

[¿Te refieres al poder?]

 

[Sí].

 

Porque tengo el poder de verdad. Porque no sé cómo usarlo. Era una pregunta sin una respuesta a la vista.

 

[¿Por qué no?] Ella me miró en serio.

 

Había esperado que se burlara, pero se veía seria. Y gracias a eso, tuve el coraje para hablar de más.

 

[No puedo ver cómo usarlo puede hacerte feliz. Puedes saber algo que no deberías y terminar sintiéndote mal].

 

Como yo.

Las palabras se quedaron en mis labios. Pero si no lo uso, entonces es igual a no tener nada. Y solo sería otra persona ordinaria.

 

[Hm, eso es cierto. Tienes un punto]. Ella se preguntó. [Pero aun así, depende en cómo lo usas, ¿no? Es todo con la habilidad].

 

[Hahaha… Puedes manejarlo].

 

[¿Hm? No estoy tan seguro].

 

[Bueno, si es así, entonces tener el poder puede no ser tan bueno. Dios debió haber jugado tan mal en la lotería si nos dio este poder].

 

Y una terrible coincidencia en eso. O quizás dios solo no pudo imaginar que la cagaría tanto cuando me dio este poder.

 

[Pero, para bien o mal, está en ti, ¿cierto?]

 

[¿Hm?]

 

Ella no miró aquí. Yo, también, no la miré. Y así, nunca pude saber qué tipo de expresión tenía. Ella, también, no podía ver mi expresión.

 

[Digo, el tema pasó a ser acerca de poderes sobrenaturales, así que puede parecer dramático. En realidad, ¿no sería lo mismo para las otras cosas también? Como qué tan alto eres, qué tanto te puede crecer el pecho. Incluso tu género cuando naciste. Todos nacen diferentes]. Ella extendió sus brazos. [Y eso es lo que nos hace. Cómo nos percibimos, cómo actuamos. Todo está de acuerdo a nosotros. No, otros pueden decidir por nosotros, pero odiaría si alguien me lo hiciera].

 

[Sí].

 

[Es por eso que quiero amarme a mí misma no importa cómo sea. Quiero ser alguien que pueda amarme. Cada día es más divertido para mí de esa manera].

 

[Sí, puedes tener razón]. De alguna manera, cuando dijo eso, sonaba convincente.

 

[O puedo estar equivocada—]

 

[Hey, no puedes estar segura hasta el final]. Dije a pesar de saber que así es cómo ella era.

 

[Sigo, no conozco la respuesta correcta. Quizás moriría sin saberlo, la forma correcta de vivir, me refiero].

 

[Aunque a mí me gustaría saberlo antes de morir].

 

[Concuerdo].

 

Silencio.

 

[Como sea, si pasa que lo descubres un día, asegúrate de decirme, ¿bien?]

 

Asentí.

 

[¡Yupi! Muy bien, me sentaré y esperaré por tu respuesta—]

 

[Eres mayor que yo, sé un buen ejemplo].

 

Entramos en otro silencio.

 

Ahora que lo pienso, fue un poco extraño, pero al mismo tiempo, sentí que no había necesidad de decir nada.

 

[¡Yay!]

 

[¡Pwah!]

De pronto, algo frío fue presionado contra mi cuello. Y salté.

 

[Ahaha, ¿qué fue eso? “Pwah”].

 

[Alto].

 

Cuando me di la vuelta, vi a Ayaha sonriendo felizmente, sosteniendo una botella de plástico. Entonces abrió la botella y me la ofreció.

 

[¿Quieres beber? Soda de Calpis].

 

[No me gusta la Soda].

 

[Eh, ¿por qué no? Dale un trago]. Ella me acercó la botella a la boca.

 

Dije que no me gusta… Por cierto, no es este un beso—

 

[Está recién comprado, no te preocupes].

 

[Bueno, supongo que no dolerá probarlo].

 

[Ah, ¿o estás decepcionado que no consiguieras un beso indirecto de esta madura onee-san?]

 

[¡N-No! ¡Idiota!]

 

[Ehh, sospechoso].

 

Ignoré sus burlas y rápidamente le di un trago a la soda. Mi calurosa y sonrojada cara se enfrío. Era mucho más dulce de lo que imaginaba.

 

Ella esperó por mi respuesta. [Hey, sabe bien, ¿verdad?]

[No realmente…]

 

[Hehe, ¿por qué no? Hmph, te haré ver la grandiosidad de la soda].

 

[No, gracias].

 

Entonces la campana resonó de pronto, señalando el final del día escolar. La escuela cierra luego de la campana, teníamos que ir a casa.

 

Ese fue el último recuerdo que tenía de ese día, con ella.

 

[Ayaha].

 

[Hm, ¿qué?]

 

[Pero… los superpoderes de lo que hablamos eran enteramente hipotéticos, ¿verdad?]

 

Envuelto en la campana resonando, iluminado por la puesta de sol, dije como si lo recordara.

 

[Sí, hipotéticamente].

 

Y sí.

 

Y sí viviera.

 

¿Qué estaría haciendo ahora?

 

¿Qué estaríamos haciendo ahora?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bottom Ad [Post Page]