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04

Yamabuki Karen y Fujiyama Shiho

 

La siguiente semana empezó y regresé a observar a Minato en la escuela.

 

Si le gusta alguien, escribiría su interacción y lo que rodeaba al momento, lo más detallado posible. Todo mientras trato de deducir la hipótesis al grabar sus sentimientos en el momento.

 

Un proceso lento, pero seguro. Poco a poco, descubrimos el Síndrome del Enamoramiento… O ese era el plan.

 

[Estoy sin ideas].

 

[…]

 

Llegamos a un complete alto.

 

En el usual café, con estando cara a cara en la mesa. Cerca de diez días habían pasado desde el inicio de la operación. La recopilación era más de lo que había imaginado, una velocidad impresionante. Pero no tengo idea de nada.

 

[Lo siento…]

 

[No, hiciste un gran trabajo. Más bien, lo siento…] Agité mi cabello en frustración.

 

Como si se sincronizara, ambos agitamos nuestras cabezas y suspiramos.

 

En serio, pensé que iba a ser más fácil que esto. O al menos, alguna pista saldría a la superficie. Por desgracia, entre más información había, más lejos estábamos de la respuesta. No había nada parecido a consistencia en la información.

 

En lugar de enamorarse del guapo con el que habló varias veces en un día, se enamoraría de un simple chico con el que no había hablado. Aunque nunca se enamoraría a primera vista, o eso se suponía hasta que se enamoraría de un chico de otra escuela quien camino a su par o de camino al café.

 

Era como si estuviera en la nada. La tierra era azul, algo más allá de lo negro.

 

[No sirve de nada. Lo preservaré y seguiré. Mientras, trataré de ver las otras posibilidades]. Me recosté en la silla.

 

[S-Sipi… Sí, haré algo].

 

La atmósfera era pesada. Pero tampoco hay duda en eso.

 

El hablar con personas con las que no estaba familiarizada o visitar otras clases para hacer observaciones en cada descanso eran arduas tareas. Y a pesar del esfuerzo, la ausencia de resultados podía ser desmotivadora.

 

[Por cierto, ¿cómo se lo está tomando Fujimiya?]

 

[Hm, sí… Notó que algo estaba raro, pero nada aún]. Ella respondió, le falta su usual confianza.

 

De acuerdo a ella, hace unos días, su mejor amiga, Fujimiya Shiho, notó su inusual comportamiento. Bueno, dado el tiempo de su amistad, era lo que se esperaba.

 

[Ustedes son cercanas]. Dije.

 

[Sip… Ella es, esa chica es importante para mí. No quiero esconder nada de ella, pero…] Ella retorció un poco su rostro.

 

Desde su punto de vista, aclarar su situación— el Síndrome, la consulta— tampoco era una opción para ella. Luego de eso, la hice regresar sola y ayudé en el café.

 

Esperar y ver, esa fue la conclusión a la que habíamos llegado. Sin embargo, el escenario ideal y la realidad son diferentes, no había lujos para tales cosas, al parecer.

 

A eso, ella se involucraría en un incidente un tiempo después.

 

  

 

¡¡Phweee!!

 

El estridente sonido del silbato señaló el fin del encuentro. Los estudiantes entraban y salían de las canchas mientras intercambiaban lugares. Cada cancha ahora tiene dos estudiantes enfrentándose entre sí.

 

La clase de la tarde era el bádminton de géneros separados. Dos clases fueron combinadas, entonces divididas en siete grupos para encuentros. Esta era una de las clases con más chicas.

 

Y la clase siete y ocho estaban emparejadas en esta unión de clases. Por gracia, las canchas que estábamos usando estaban justo lado a lado. Gracias a eso, la observación era más fácil.

 

El silbato sopló otra vez y el siguiente encuentro inicio. Yo, quien estaba fuera, miré desde el costado en la cancha de Minato.

 

Minato estaba vestida en un simple jersey azul con su cabello con una cola de caballo. El contraste entre su blanca nuca y cabello negro era deslumbrante. Incluso en un simple atuendo, claramente sobresalía del resto con su elegante glamur.

 

[I—O—]

 

El llamado de Reiji me saco de mi mundo. Mientras se sentaba a mi lado, noté que le faltaban sus pendientes. Con eso fuera, su rostro bien formado lo hacía verse como un buen deportista.

 

Por cierto, él estaba en el club de basquetbol, aunque no en una buena posición debido a su tendencia de hacerse el pendejo.

 

[¿Yuzuki-san otra vez?] Él inclinó su cabeza.

 

[¿Qué con ese “otra vez”?]

 

[Oi, oi, no creas que te puedes salir con la tuya. Siempre la estás viendo últimamente. No, hasta vas a verla]. Sonrió de lo más a gusto.

 

Bueno… Como se esperaba, Reiji no puede ser burlado.

 

[Trabajo, como es usual. Sigue la onda]. Dije.

 

[“Como es usual”, ¿huh? Eres lindo, Io].

 

Él sonrió y no pregunto nada más, probablemente porque sabía que no conseguiría nada si es acerca del Ángel. Entonces, un fuerte sonido vino de las cercanías.

 

En sucesión, el “Oh” vino del área alrededor.

 

[Oh, buen disparo. Ella es como alguien del club de bádminton]. Reiji comentó.

 

[Esa cancha está recibiendo mucha atención]. Observé.

 

[Bueno, es el emparejamiento]. Él se bajó de hombros. [Del otro lado está Yamabuki].

 

Del otro lado, Yamabuki Karen, llamaba mucho la atención como Minato. Explicación corta: Ella es una del Plus Four, otra belleza.

 

 

Sus ojos eran grandes y como almendras, su figura bien contorneada, y sus delgados labios. Su atmósfera se parecía un poco a la de Minato, deben estar en el mismo nivel. Pero no se detenía allí, ella estaba llena de un equipo de maquillaje. En términos de imagen, ella no era diferente a las idols.

 

Además, su cabello semi largo estaba por el rubio oscuro al leve castaño, y a diferencia de Reiji, ella tenía sus aretes puestos. Combinado con su jersey rosado, ella era toda una gal. Su popularidad entre los chicos era diferente de la de Minato, pero era bastante popular.

 

El año pasado, tuve un consultante que deseaba confesársele. Y eso fue lo que hizo que Minato se concentrara en mí.

 

Yamabuki recogió la pelota con su raqueta y miró a Minato en su lado opuesto. Su boca dijo algo. Probablemente “vete a la mierda”. De su servicio, el golpe se fue a lo alto. Minato también lo regresó con la misma ferocidad, tratando de ganarle a Yamabuki. Sin embargo, Yamabuki se hizo hacia atrás y saltó, lanzó un golpe de vuelta.

 

Doblándose en un ángulo casi imposible, Minato logro regresarlo. Desde allí, Yamabuki tomó la ofensiva y anotó un punto. El brillo en sus ojos era como si dijera que esa fue su venganza.

 

El otro lado era un buen oponente, al parecer.

 

Cuando Minato se agachó para tomar el gallo, Yamabuki la menospreció. Su boca se movió otra vez. Quizás “pendeja” esta vez. Por el otro lado, Minato mantuvo su fría expresión mientras se preparaba para el siguiente round.

 

[Oh, se la está dejando de chula. Bueno, no quiere perder ante Yuzuki-chan ni nada].

 

[¿A qué te refieres?]

 

Cuando pregunté, Reiji solo se rio. Era como si todo fuera diversión y juego para este chico.

 

[Esa chica odia a Minato. Usualmente la culpa, chismoseando a sus espaldas. Bueno, a Yuzuki-chan no parecer importarle].

 

[¿Y la razón?] Pedí más información.

 

[No lo sé. Quizás celos. Ella es del Plus Four, Minato de las Tres Grandes. Eso no queda bien con el estilo princesa de Yamabuki].

 

[Así que, ¿ella la odia porque Mi— Yuzuki es más popular?]

 

[Sipi, mejor en cuanto a notas y deportes a pesar que Yamabuki está en clubs deportivos. Pierde en todo contra ella, por así decirlo].

 

[Ya veo…]

 

Así que son celos unilaterales de Yamabuki. Seguro que la tienes difícil, Minato.

 

[Oh, match point].

 

El encuentro estaba a 11 puntos para ganar, y pronto, las tablas ya estaban 10 a 9, con Minato liderando y un minuto de sobra.

 

Con la misma compostura, Minato pegó un servicio largo. Yamabuki, quien estaba yendo al frente, fue tomada por sorpresa y su golpe de vuelta era débil. Minato aplastó el gallo que venía a ella con fuerza, pero Yamabuki lo regresó con tenacidad.

 

Minato lo recibió y lo mandó a volar para ganar tiempo. Buena estrategia. Pero Yamabuki saltó, estirándose y forzando un smash. El fuerte golpe fue directo a su rostro.

 

[¡Uwah, al cuerpo!]

 

Demasiado tarde. Eso pensé. Sin embargo, Minato cambió su postura, saltó y redirigió el gallo. Era como si lo pudiera ver venir. El gallo aterrizó con un sonido seco, incluso antes que Yamabuki llegará.

 

Justo entonces, el silbatazo señalaba el fin del encuentro. Los encuentros que aún estaban en marcha fueron forzados a detenerse y cambiaron lugares con el resto. Con un fluido movimiento, ella dejó la cancha con calma. Señalándole a Fujimiya, se sentó en la banca.

 

Pero la Yamabuki en el otro lado aún estaba viendo a Minato, sin importarle los alrededores.

 

Tiempo después, el campaneo del fin de la escuela resonó, los estudiantes se alinearon e inclinaron. En la Secundaria Kuze, las clases se suspendían después del almuerzo, así que los estudiantes estaban libres de irse.

 

Los estudiantes sin ganas guardaban las redes y raquetas, y el número gradualmente disminuía. Yo igual, cuando había terminado de limpiar, decidí irme rápidamente.

 

[Eres una lunática, en serio].

 

Mientras iba por el corredor, alguien dijo eso. La voz era fuerte con prepotencia y malicia, una provocación que al instante me hizo detenerme. Cuando vi lo que pasaba, rápidamente busqué la voz. Cerca de la esquina, tres chicas, Yamabuki incluida, estaban enfrentando a Minato. Odio cuando mi presentimiento se vuelve realidad.

 

[Deja de pedir esa cosa, ¿sí? No juegues con tu suerte solo porque tienes una buena cara].

 

Me escondí en las sombras donde pudiera escuchar.

 

Los ojos de Yamabuki eran como los de una serpiente, las otras dos eran igual de malas, su maliciosa sonrisa hizo que me estremeciera.

 

Minato las miró con decepción y rápidamente cambió a resignación. Sin embargo, no parecía estar parada como de costumbre. Para ser honestos, tampoco estaba seguro que fuera la acción apropiada. Soy el tercero en discordia aquí, y no estoy seguro que pueda lidiar con las tres.

 

Por desgracia, las disputas en la secundaria no eran tan simples. Pero pretender que nada pasaba estaba fuera de cuestión.

 

[En serio, reina emo, es obvio que desprecias a todos. Qué lunática].

 

[Digo, es psicológicamente imposible— Puedo ver por qué no tienes amigos—] Las dos tipas se acercaron a Minato desde el costado.

 

El feo lenguaje hizo que me doliera el corazón. Pero la absoluta hostilidad era suficiente para lastimarla. Dicho simple, totalmente irritante.

 

Ugh… A penas puedo detenerme de ir a ellas.

 

[¿Te das cuenta que eres odiada? No solo nosotras, los demás también]. La líder Yamabuki dijo.

 

Pero Minato no se inmuto. Más bien, liberó un cansado suspiro. [¿Terminaste?] Ella preguntó levemente.

 

[¿Hah?] Estupefactas caras.

 

[¿Es todo lo que tienes que decir? Me iré entonces].

 

La expresión de Yamabuki se oscureció al instante.

 

[¡Tú! ¡¿Quieres pelear?!] Su grito llegó en todo el corredor. En lugar de Minato, las dos tipejas retrocedieron. Unos cuantos estudiantes restantes llegaron a socorrer luego de la voz.

 

Esto no es bueno…

 

[¡Veo a través de ti! ¡Vas por ahí seduciendo chicos!] El sarcasmo dio en el blanco, Minato se asustó. Era como si pudiera echarse a llorar al instante.

 

Incluso yo, también, perdí la calma.

 

De qué… estás… hablando… Mis dientes se estaban apretando antes de saberlo.

 

[¡Llevándotelas de diva, asqueroso! ¿Tanto quieres ser la morra emo?]

 

Estaba visiblemente agitada, su rostro palidecido, y sus ojos bajos.

 

Yamabuki, quien había conseguido la respuesta que quería, siguió con alegría. [¡Suficiente de esa carita linda! ¡Perra! ¡Puedo ver lo que estás pensando!]

 

Algo se rompió. La fría rabia se apodero de mí. No, no puedo dejarlo salir. No, nunca.

 

¿Qué es lo que entiendes de ella, Yamabuki?

 

[Oi]. Me encontré entrometido.

 

No, no tenía un plan, solo estallé, sacando la rabia en mi pecho.

 

Las tipejas apartaron sus miradas incómodas. Minato me miró en sorpresa. Con su cuerpo enfrentando a Minato, Yamabuki solo giró su rostro hacia mí. [¿Cuál es tu problema?] Ella demandó.

 

[Nada contigo. Yuzuki, andando].

 

Le tomé su mano y la jalé. Minato me siguió sin fuerzas, pazos torpes. Sin embargo, Yamabuki se entrometió, bloqueando nuestro camino.

 

[¿Qué estás haciendo? No tengo nada que ver contigo]. Ella demandó.

 

[Me dio dolor de cabeza escuchar tus pendejadas. Guárdate tu lloriqueo para ti, ¿sí?]

 

[¿Ha? Por cierto, ¿qué? ¿Tratas de ser genial?]

 

A pesar que la sobrepasaba por 10cm, su comportamiento seguía igual. La apariencia y poder físico no determinaban el rango en la sociedad, al parecer. Da igual, si quería despreciarme, entonces que haga lo que le plazca, solo no te metas en mi camino, es un fastidio.

 

[Será mejor que no metas tus narices, quienquiera que seas].

 

[Tú…]

 

[Hey— Akahi—]

 

Entonces, desde atrás de Yamabuki, del rincón del que vine, una chica apareció de la nada-

 

Lindo cabello corto. Ojos grandes y rasgados. Levemente despeinada en un jersey verde. Con su diente yaeba al aire, Aki Hiura hizo su entrada. *Yaeba= diente doble.

 

[Qué están haciendo— regresemos a clase]. Ella dijo casualmente como si nada hubiera pasado un momento antes. Y a diferencia de mí, Yamabuki lo pensó dos veces antes de hablar.

 

[Hiura… ¿También te estás entrometiendo?]

 

[¿Hm? ¿Qué? Solo estoy recogiendo a este idiota y Yuzuki. Dijeron que van a invitarme a un helado].

 

¡Cuándo pasó eso?… Pero gracias a eso, las cosas parecían arreglarse. Eso se pondría peligroso incluso para mí…

 

[Me da igual este pusilánime, pero estamos hablando, Yuzuki y yo]. Yamabuki clamó.

 

[¿Esa era una plática? Pensé que estabas siendo tú sola]. Hiura agitó su cabeza.

 

Un extraño triángulo se formó mientras Hiura tomaba nuestras manos.

[No te hagas mi enemigo. ¿Conoces las consecuencias?]

 

[Si hay alguna consecuencia, sería de tu lado. En primer lugar, atacar a las personas solo porque perdiste un partido de tenis, ¿qué eres, un mocoso? Es precisamente por eso que dejaste el Plus Four].

 

[¡¿Huh?! ¡S-Si es así, entonces tú también!]

 

[Igual no lo estoy intentando. ¿Por qué tendría algún interés en un título bonito que no puede comprar el almuerzo?]

 

[¡…!] Yamabuki finalmente se hizo atrás.

 

Rápidamente dejamos el lugar y lo dejamos ahí. Hiura no me preguntó nada. [Dame el helado mañana—] Y se fue. Mirando a su delgada espalda, me di cuenta cuán confiable era.

 

No puedo irme sin invitarle uno ahora.

 

  

 

[Otras veces no son igual de ruidosas, ¿cierto?]

 

Solo para estar seguros, dejamos la escuela por separado antes de reunirnos en el Café Proof.

 

El tema, era indudablemente, el tema de antes. Minato parecía haberse calmado y empezó a explicar la situación.

 

[Excepto por las ocasionales miradas, no hay nada…] Su tono era normalito.

 

[En resumen, la confrontación de hoy fue debido a la operación y con el partido de tenis como disparador].

 

[Sí, esa es mi suposición].

 

Ambos bebimos nuestras bebidas. La mía era cidra, la de Minato té de limón.

 

[Perdón por eso].

 

[Uh…]

 

No era como que estaba fuera de mi expectación.

 

El acto de ampliar sus relaciones humanas atraía más crushes, nadie estaba al tanto de ello. No sería extraño si eso causaba intranquilidad en algunas personas. Y con la cosa de las Tres Grades de Kuze a considerar…

 

[Las cosas resultaron así, es toda mi culpa. Y antes, solo me metí sin pensar…]

 

Ella agitó su cabeza débilmente. [N-No, decidimos hacer esto juntos. Y por entrometerte… me salvaste, así que gracias].

 

Y si la agresión continúa, necesito preparar algunos planes de reserva también. Mis manos estaban llenas, no podía dejar que esto saliera de control. Más importante, ella ya estaba agitada.

 

[Solo me estoy asegurando que no te pese].

 

[¿Hm?] Ella inclinó su cabeza levemente en respuesta.

 

No estaba seguro que aún se aferraría a ello o no, pero mejor lo saco del medio.

 

[No eres una puta].

 

Sus ojos se abrieron por un momento, entonces murmuró. [Sí…]

[No es que vayas por ahí haciendo que las personas se enamoren de ti, es lo opuesto, eres la que se enamora de ellos. Solo estás conociendo a otras personas como tus compañeros, si se llegan a enamorar de ti, ese solo es el resultado. No importa que, no tienes nada que ver, no estás equivocada].

 

[Sí… lo sé. Lo entiendo]. Como si se convenciera, asintió varias veces.

 

Podía entenderlo por esa lógica, no estaba equivocada, pero ser condenada así, incomodaría a cualquiera. No podía solo apartar la mirada, tomar la responsabilidad era lo mejor que podía hacer.

 

[Estoy bien, en serio. Me hice a la idea, está bien. Solo…]

 

Una profunda y algo dolorosa respiración.

 

[Solo que, duele más de lo que pensé. Aunque nada serio]. Ella me dio una sonrisa agria.

 

[Sí eso dices, está bien].

 

No tiene sentido seguir con el tema. Además, ella es fuerte. Hasta ahora, había seguido mis instrucciones por voluntad propia. Si tan solo otros consultantes pudieran ser tan dedicados como ella.

 

[Y entonces, estar en las Tres Grandes debe ser muy problemático].

 

[Oh, eso…] Ella retorció su rostro. [Sí, nada más que un fastidio. No estoy orgullosa del título, con esos contras, preferiría no tenerlo. Eso incluye lo que pasó hoy].

 

[Oí que Hiura dijo la misma cosa]. Recordé. [Una patada en el culo o así. Y es solo el Plus Four].

 

[Llegar a la escuela un día y descubrir todo el titulado. Sin oportunidad de rehusarte, sin donde firmar, como un objeto maldito].

 

Hoh, es una inusual analogía para una estudiante top. De casualidad, ¿es una gamer?

 

Entonces otra vez, las Tres Grandes de Kuze y el Plus Four son más problemáticos de lo que parecían. Era un tipo de prueba de popularidad, y bastante prestigioso, así que pensé que la mayoría de chicas lo añoraría.

 

[Por cierto, Hiura-san, ¿por qué nos ayudó? ¿Una amiga tuya?]

 

[¿Hm? Sipi].

 

Ah, olvidé mencionarlo. Sí. Es una buena oportunidad para decírselo.

 

[Ella sabe que soy el Ángel. Debió haber supuesto que eres mi consultante].

 

[¿Eh? Está bien…] Su rostro se reflejo con ansiedad y un poco de sorpresa.

 

Desde entonces, expliqué que ella era una de los colaboradores y había ayudado en este caso.

 

Hiura probablemente pensó en Minato como el objetivo de mi consultante, pero ahora debió haber notado que la misma Minato era la consultante. Y por eso, hizo el esfuerzo de ayudarnos, supongo.

 

[Además, Miwa Reiji de la misma clase, le pido ayuda algunas veces. Aunque, no estoy seguro cuánto sabe del caso].

 

[Miwa-kun…] Ella murmuró y lazó la mirada al cielo, tratando de recordar.

 

Él era bastante popular, así que su nombre debe ser de conocimiento popular.

 

[¿Por qué les dijiste? Acerca del Ángel].

 

[Hm… He sido amigo con Reiji por mucho tiempo, así que ocultarle cosas no es una tarea fácil].

 

Debía parecer que iba por ahí tonteando, pero sus suposiciones daban en el clavo. Mejor decirle todo que esperar que lo descubriera.

 

[¿Y Hiura-san?]

 

[¿Hiura? Bueno… mucho pasó. Nada confidencial, solo es una larga historia para la próxima].

 

[Bueno… De alguna manera, tú y Hiura-san hacen un extraño combo].

 

[Sí, también lo creo así].

 

A primera vista, parecíamos del tipo que vive en mundos diferentes.

 

[¡Ah! Casi lo olvido. Veamos el progreso de hoy].

 

[A… Um… Bien…]

 

Siendo que asintió, le ofrecí mi mano derecha. Luego de un profundo respiro, se la llevó a su rostro. Me pregunto cuántas veces mi palma había tocado su rostro. Y desde ahora en adelante, cuántas más.

 

Distraído por esos pensamientos, me olvide de la mayoría de rostros que había visto.

 

  

 

Bajémosle la espuma al chocolate, llegué a esa conclusión, hasta que la tensión del incidente de Yamabuki se calmara, pero ella se rehusó. [Nunca llegaremos a ninguna parte así].

 

Por eso, seguí observándola. Si eso era lo que quería, entonces no la detendré.

Ella tenía algo que hacer luego de la escuela hoy, así que la reunión sería corta en el tejado. La puerta se abrió sin esfuerzo y Minato me sacó, el resto es lo usual. El número se mantenía igual hoy. Terminando el tema, regresamos.

 

[Hahh…]

 

Ella bajó primero mientras yo esperaba. Luego de que un tiempo pasara, salí de la escuela. Hm, a diferencia del café, tocar su rostro dentro de la escuela era algo agigante…

 

[Akashi-kun, ¿cierto?]

 

De la puerta, el rincón del primer bloque llevando a la estación, alguien dijo mi nombre. ¿Quién será?

 

Ah, sip, sipi.

 

[Dejà vu]. Suspiré.

 

[Necesitamos hablar. Algo importante]. Leve, pero llegaba clara y confidencialmente.

 

El dueño de la voz, la amiga de Minato. Fujimiya Shiho sonrojada estaba frunciendo el ceño con una adorable cara. No pierdas esa cara por mí, y da miedo, por favor para.

 

[Conocías a Minato]. Ella pronunció.

 

Claro, maldición…

 

Sus ojos se clavaron con cautela antes de señalarme seguirla al callejón. Por fortuna, había pasado rato desde que la escuela terminó, así que no había estudiantes cerca. Pero también significaba que se había esforzado por esperarme.

 

Le di una última mirada al mundo exterior. [¿Y qué con Yuzuki…?]

 

[¿Yuzuki? Qué frío. La estabas llamando Minato antes, ¿no?]

 

Respiré con pesadez. ¿Oíste? Y por “antes”, ¿cuándo?

 

[El tejado. Te vi entrar. La llamaste “Minato” entonces].

 

[¿Por qué estar allí? No pensé que estarías allí]. Allí va mi patético atento de jugarla.

 

[Esa chica, ella estaba actuando raro, así que he estado alerta. Además, lo mismo va para ti, ¿qué estabas haciendo allí?]

 

[Ya veo…]

 

En resumen, estaba en guardia. Y probablemente se guardo sus sospechas, ya que Minato no parecía saber nada. Pero no había esperado que llegara a tanto. Aunque pensé que trataría de ir por Minato, no de un completo extraño como yo. Piensa fuera de la caja…

 

[He visto lo que estabas haciendo. Lo siento, pero no pude evitarlo].

 

[¡Ngh!]

 

Mi corazón se apretó, como la última vez. Una onda de nausea me golpe, lentamente me moví para recostarme en el muro.

 

Haha… ¿Qué tanto el Ángel había caído?

 

Mucha información confidencial se filtró. No podía importarme menos el Ángel ahora, ese era mi problema. Mi preocupación era la situación de Minato.

 

[Descuida, no oí nada luego de eso].

 

[¿En serio?]

[Sí, ustedes dos estaban lejos de la puerta, y no tenía la intención de escuchar igual. Pero te vi tocando la mejilla de Minato a toda luz].

 

[Ugh…]

 

Fuerte y claro…

 

No pensaría que estaba actuando un super poder, ¿cierto?

 

La expresión de Fujimiya era severa. Por el lado positivo, no se veía que estuviera enojada. Aunque no sería extraño si me dijera que me alejara de Minato, dado a lo que había visto. Más bien, estaba bastante seguro que este era el propósito de esta reunión.

 

[Últimamente, has estado en nuestra clase a diario]. Ella observaba. [Y estabas viendo a Minato. Eso en sí era normal, pero tu mirada era diferente a los otros, no tienes sentimientos por ella].

 

[Bien que te preocupas por ella. No creo que un amigo normal iría por tanto].

 

[No normal]. Ella accedió. [Pero soy su mejor amiga, iré a tales extremos por ella].

 

Ella me enfrentó, sin caretas. Sus ojos estaban moviéndose, como si me asimilara. Me gustaría evitar hacer a esta chica mi enemiga, pero no puedo explicarlo todo…

 

Ven y ayúdame, Minato-san…

 

[No he hecho ninguna de las cosas que puedes estar pensando. Nunca la pondría en peligro. Así que por ahora—]

 

[¿Puedo confiar en ti?]

 

[Eh…]

 

¿Qué fue eso? Cuando me mantuve en silencio, ella me miró sin más, entonces continuó.

 

[No la estás acosando. A ella no le importa que le toques su mejilla, pude verlo].

 

[…]

 

[Si ella no me lo dice, entonces debe ser algo que no quiere que nadie sepa. Respeto su decisión, no le preguntaré nada a ella ni a ti].

 

[Si es así, entonces ¿por qué venir a mí?]

 

[Pero si la lastimas de alguna manera, date por muerto. Incluso si está bien con eso, yo no. No esperes piedad de mí… Solo estoy aquí para decirte eso]. Eso significaba que es una advertencia, pero solo puedo oír su tono de voz de súplica.

 

¿Y eso era frustrante?

 

Apreté mis puños. ¿Ella vino hasta aquí solo para eso? Por el bien de su amiga. Fujimiya probablemente estaba preocupada por Minato, confiaba en ella. Y así me llamaba para medir su responsabilidad como la mía. Finalmente podía empezar a entender por qué se llevaban tan bien.

 

[Es todo lo que tengo que decir. En serio, por favor. Apóyala por mí…]

 

[Me temo que no puedo]. Agité mi cabeza.

 

[¿Eh?]

 

[La asistiré, pero es todo lo que puedo hacer. Pero tú, puedes apoyar sus sentimientos. Tú eres su amiga. Y una buena persona. Así que, ayúdala. Si fuera a actuar extraño, o alguien como yo anda ordenándole como mosca, haz lo que has hecho antes, ser su amiga].

 

Ella se tomó las palabras.

Solo tenía este inútil poder, persistencia, y experiencia. El Ángel era, al final, una relación de consejos, no una relación en sí. Quien realmente podía ayudar realmente a Minato era Fujimiya, no yo. Ahora que he visto qué tipo de persona era Fujimiya, quizás podía preocuparme menos por Minato.

 

[Ayer en el gimnasio].

 

[Sipi].

 

[Tú fuiste el que se metió, ¿cierto?]

 

Agité mi cabeza. [Hablando estrictamente, me entrometí, pero quien nos sacó no fui yo].

 

[Gracias. Y entonces, perdón por esta visita].

 

[Nah, no es nada. Perdón que tenga que guardarte secretos].

 

[No, eso es lo que Minato decidió, lo respetaré].

 

Ahora que lo pienso, seguro que tiene agallas, emboscarme por sí sola.

 

[Tengo que irme ahora, te ves].

 

[Ah, Akashi-kun].

 

[¿Sí?] Me giré. Fujimiya puso sus manos en su cintura, y abrió sus piernas.

 

Esa posé no le queda nada. Pero en sí, se veía confiable y un poco divertida.

 

[¡Me encargaré de lo que pueda! ¡Te dejaré el resto a ti!]

 

[Hoh…]

Ella me levantó el pulgar con una sonrisa. Bueno, supongo que las negociaciones tuvieron éxito. Además, su carácter era un poco diferente de su imagen…

 

[Hay más, lo que pasó aquí es un secreto para Minato, ¿bien?]

 

[¿Eh? Pero, ¿en serio?]

 

[Sí, mejor para ella. Además, también lo está ocultando de mí, esto es lo justo—] Ella infló sus mejillas.

 

[Bueno… da igual. Bien, lo tengo].

 

Las personas están llenas de secretos. Aunque no soy mejor, así que me detendré aquí.

 

[¡Ah! ¡Y acerca de eso, realmente no lo entiendo!]

 

[¿Sí?] Ahora…

 

[No dejaré que toques otro lado que no sea sus mejillas, estás advertido, ¿bien?]

 

Bueno, acerca de eso… [No lo haré].

 

[En momentos así, respondes de inmediato, ¿verdad?] Viendo mi reacción, ella sonrió y me ondeó su mano para indicar que era una broma.

 

Al final, ella no confía en mí… Probablemente yo tampoco.

 

[Ah…]

 

Pero si son las manos, nos las tomamos bastante a menudo.


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